Automoción

Raquel Sánchez todavía ve posible que Catalunya se quede con una de las grandes fábricas de baterías

La ministra de Transportes defiende que sería una "muy buena inversión" para el país, que también quiere ser una potencia del vehículo eléctrico

Ara
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Trabajadores montando la batería en un modelo ID3 a la planta de Volkswagen a Zwickau, la primera del grupo que se ha reconvertido totalmente para hacer coche eléctrico.

BarcelonaLa ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado en una entrevista a Ràdio 4 que ve posible y mantiene la esperanza de que Catalunya pueda contar con una de las dos grandes fábricas de baterías eléctricas que está previsto que se instalen en el Estado español durante los próximos años. "Ojalá sea así, es una de las opciones", ha afirmado la ministra.

Tal como avanzó el ARA, en el Estado no habrá solo una planta de baterías —como se había dicho hasta la semana pasada—, sino dos, y de gran capacidad. Serán gigafactorías. Lo que todavía no se sabe o no ha trascendido es qué fábricas se harían, en qué comunidades y en colaboración con qué fabricantes, puesto que el proyecto está rodeado de secretismo y fuentes oficiales del ministerio de Industria remiten a las marcas interesadas.

De hecho, la normativa de los PERTE (proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica) fija que primero se tiene que hacer una propuesta y que es después cuando el gobierno acaba eligiendo las opciones que ve más sólidas. Eso sí, desde el ministerio responsable admiten un punto clave: "Hay dinero para dos grandes fábricas de baterías". Esta realidad concuerda con un pronóstico hecho por la ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, en una entrevista a Levante la semana pasada: "Es probable que haya más de una gigafactoría".

Entre el baile de apuestas, a pesar de las declaraciones de hoy de Raquel Sánchez, fuentes conocedoras del proyecto advirtieron al ARA de que Catalunya nunca ha estado entre las favoritas al proyecto y señalan que en el ámbito institucional cometió errores.

La opción que a estas alturas tiene más peso es la del País Valenciano (en un municipio de tradición industrial como Sagunto) con una segunda en Extremadura, aprovechando la presencia de minas de litio en la comunidad. A pesar de la "competitividad" de cada territorio, Raquel Sánchez ha dicho que, como catalana, "no puede evitar expresar la ilusión que le haría que se instalara aquí" y ha remarcado que "sería una muy buena inversión", puesto que Catalunya es "una potencia en automoción y quiere serlo también con el vehículo eléctrico".

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