La UE abre la mano a un IVA reducido en más productos
La reforma permitirá aplicarlo a productos beneficiosos para el medio ambiente y ampliar el alcance del IVA superreducido en toda la UE
BruselasLos ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea han acordado hoy una reforma de las normas del impuesto sobre el valor añadido (IVA) que da más flexibilidad a los gobiernos para aplicar el impuesto reducido, excluye los productos perjudiciales para el medio ambiente y permite añadir otros productos considerados esenciales. La reforma ha costado tres años de negociaciones "maratonianas", en expresión del comisario de Economía, Paolo Gentiloni, que ha recordado que la propuesta de Bruselas llegó en 2018 y las negociaciones se han alargado hasta hoy.
Tal como recuerda la Comisión Europea, las actuales normas del IVA tienen casi 30 años y requerían una "modernización urgente". El acuerdo de este martes implica actualizar la lista de bienes y servicios a los cuales los socios europeos pueden aplicar el tipo de IVA reducido. Los nuevos productos están relacionados principalmente con la salud pública, son ecológicos o apoyan de alguna manera a la transición digital. Por otro lado, cada gobierno también tendrá carta blanca para aplicar este tipo de IVA a productos que considere esenciales. En España, por ejemplo, el IVA reducido es del 10%, y en la actualidad se aplica a alimentos, bienes agrícolas, agua, compresas, tampones y preservativos, por ejemplo, además de los transportes de viajes, entre otros muchos.
Además, también se permitirá generalizar exenciones históricas que se aplican en ciertos estados miembros. Por ejemplo, en España se aplica un IVA superreducido de un 4% para productos como por ejemplo el pan, la leche o los huevos; libros y revistas; vehículos para personas con movilidad reducida o vivienda de protección social. En todos estos casos, si se cumple con los principios medioambientales, la UE permitirá que otros socios europeos puedan aplicar los mismos criterios. El IVA reducido máximo de la UE es del 5%, pero con esta normativa otros gobiernos europeos podrán aplicar también en un "pequeño número de productos y bienes" un IVA superreducido por debajo de este umbral como hace España.
Si esta reforma ha costado tantos años es porque para cualquier cambio en el ámbito fiscal la UE requiere unanimidad. Por lo tanto, que los veintisiete gobiernos se hayan puesto de acuerdo. Ahora solo falta que la Eurocámara dé el visto bueno definitivo a la nueva legislación europea –probablemente en marzo de 2022– y pueda entrar en vigor.