La mujer de Xi Jinping es aún más famosa que él en China
Atractiva, estilosa y budista: el perfil de la primera dama, Peng Liyuan, es una anomalía en la opaca política china
PekínLa imagen sonriente de Peng Liyuan saludando desde la escalera del avión al llegar a la cumbre del G-20 en Bali junto a su marido, el presidente Xi Jinping, es una ruptura con las tradiciones chinas formales, en las que las mujeres de los mandatarios pasaban desapercibidas. Peng Liyuan, de 60 años, tenía una carrera propia antes de convertirse en primera dama. Era una conocida cantante con voz de soprano que interpretaba canciones tradicionales y melódicas, una de las caras más conocidas y asiduas a las galas de la televisión del Año Nuevo Chino.
Peng provenía de una familia de artistas de la provincia de Shandong y su padre fue represaliado durante la Revolución Cultural. Con 18 años ella ingresó en el Ejército Popular Nacional (EPL) y tiene rango civil de general. Las fuerzas armadas chinas cuentan con divisiones de músicos y bailarines. Gracias a su voz, se convirtió en una cantante famosa que ha vendido miles de discos y ha participado en exitosos montajes musicales y series de televisión. Sus actuaciones, vestida de militar o con vaporosos trajes de noche, atraían a miles de fans.
Con 24 años ganó el premio más importante de teatro que se otorga en China. Fue el mismo año en el que conoció al actual presidente chino, Xi Jinping. Un año después, en 1987, se casaron, pero han pasado gran parte de su matrimonio viviendo separados. Peng desarrollaba su carrera desde Pekín y hacía numerosas giras, incluidas en el extranjero, mientras que Xi Jinping trabajaba en las provincias de Fujian y Zhejiang. En 2007 abandonó la carrera cuando su marido fue nombrado miembro del Politburó y secretario del Partido Comunista Chino en Shanghái, un cargo que los catapulta a la cúpula de gobierno del país.
Revolución del rol de primera dama
Cuando en 2012 Xi fue nombrado secretario general del partido, su mujer era mucho más conocida que él en el gigante asiático. La presencia pública de Peng Liyuan supuso un gran cambio, puesto que la vida familiar de los líderes chinos, hasta entonces, siempre había sido desconocida. El papel de la viuda de Mao, que acabó ejecutada después de morir por formar parte de la Banda de los Cuatro, no había dejado un buen precedente e incluso se legisló la prohibición de que las mujeres de los altos cargos tuvieran poder.
La pareja de Peng y Xi actualizaba la imagen de los mandatarios chinos a sus salidas al exterior y hacía soñar en una apertura del país. A Peng se la consideraba una embajadora de la moda local y los modelos que lucía en sus viajes eran ampliamente comentados en la prensa nacional e internacional. Ha hecho famosas marcas de diseñadores chinos como Ma Ke o Wuyong, con modelos que combinan la modernidad con detalles de la tradición china.
En 2017, Forbes la reconoció como la 57a mujer más influyente del mundo. Ha tenido cargos en la administración china como presidenta de la Academia del Arte del Ejército Popular de Liberación, entre el 2012 y el 2017. También ha sido embajadora de buena voluntad de la OMS para la tuberculosis y el sida, además de enviada especial de la Unesco para la educación de las niñas y mujeres.
Posible distanciamiento con Xi
Durante el segundo mandato de Xi Jinping, la figura de su esposa perdió brillantez. Su desaparición pública incluso levantó rumores en las redes sociales. Se especuló sobre un distanciamiento entre ellos dos, porque Peng no estaría de acuerdo con las políticas tan estrictas de control social. El momento coincidió con una nueva política que reclamaba el retorno a los valores tradicionales y a abandonar la ostentación.
La pareja tiene una hija, Xi Mingze, nacida en 1992. Prácticamente no se sabe nada de ella y hay muy pocas imágenes. Se sabe que en 2014 se graduó en la Universidad Harvard con una licenciatura en psicología, pero esta información no se ha publicado en China.