Trump arremete contra Putin por el último ataque en Ucrania: "Se ha vuelto completamente loco"

WashingtonDonald Trump vuelve a criticar a Vladimir Putin en medio de la nueva ola de ataques rusos en Ucrania. "Se ha vuelto completamente loco", ha escrito el presidente estadounidense sobre su homólogo ruso en Truth Social tras el ataque aéreo masivo que Moscú lanzó sobre Ucrania el domingo. "Está matando a mucha gente innecesariamente, y no me refiero sólo a soldados", ha añadido. Trump cargaba así contra Putin tan sólo seis días después de llamarse con él y Volodímir Zelenski, y aseguraba que "Rusia y Ucrania empezarán a negociar de inmediato el alto el fuego".

Una vez más, Putin ponía en cuestión las palabras del presidente cuando Moscú disparó unos setenta misiles y unos 300 drones contra el país vecino el sábado por la noche. La ofensiva dejó al menos doce personas fallecidas, entre ellas tres niños, y unos ochenta heridos. La gran cantidad de proyectiles disparados por Rusia imposibilitó que la defensa aérea ucraniana, desbordada, pudiera interceptarlos todos. "Están disparando misiles y drones contra ciudades de Ucrania sin motivo alguno", ha escrito Trump.

El pasado lunes Trump estuvo hablando más de dos horas con Putin sobre la situación del conflicto ucraniano. Era la tercera vez que ambos mandatarios se llamaban desde que el republicano regresó a la Casa Blanca en enero. Una vez más, el presidente estadounidense valoró positivamente la llamada y volvió a decir que ambas partes empezarían a negociar para llegar a un acuerdo. Ucrania hace ya tiempo que se ha mostrado abierta a aceptar una tregua de treinta días y es Rusia la que no para de negarse. Aún así, las muestras de cansancio de Washington respecto a las conversaciones de paz van más dirigidas a Kiiv que a Moscú. El secretario de Estado, Marco Rubio, y el vicepresidente, JD Vance, han amenazado con la posibilidad de que Estados Unidos abandone el papel de supuesto mediador si no se logran resultados pronto.

¿Fracaso de Trump?

Han pasado ya más de cuatro meses desde que Trump llegó a la Casa Blanca y todavía no ha habido avances significativos para alcanzar un alto el fuego. El presidente estadounidense –a base de chantaje y presiones– logró que Zelenski aceptara una tregua de mínimos acordada con Putin para detener los ataques a las infraestructuras energéticas cuando ya había terminado el invierno. Sin embargo, poco después de firmar un pacto que claramente tenía un coste muy bajo para Moscú e incluso le da más tiempo para dilatar el proceso de negociación, Rusia volvió a atacar y le incumplió.

El mensaje criticando a Putin sigue la misma dinámica que la otra publicación de finales de abril, donde Trump clamó un "Vladimir, STOP!" después de una ola de ataques sobre Kiiv. Ahora ha ido un paso más allá con sus palabras. "No sé qué le pasa. ¿Qué demonios le pasa? Está matando a mucha gente. Eso no me gusta", había dicho en unas declaraciones previas desde el aeropuerto de Nueva Jersey, desde donde ha abierto la puerta a imponer nuevas sanciones a Rusia, tal y como pide Ucrania: "Por supuesto", ha dicho cuando se lo han preguntado. La reacción del magnate también denota el cansancio que quiere hacer llegar Washington a ambos países en guerra.

"Siempre he dicho que [Putin] quiere toda Ucrania, no sólo una parte, y quizás tiene razón, pero si lo hace, provocará la caída de Rusia!", ha subrayado también Trump en las redes sociales. me gusta, y es mejor que pare [de hablar]", ha dicho. Una vez más, Trump hace equilibrios para mostrar de manera indirecta a Rusia su acercamiento.

El líder republicano ha insistido, con todo, en que ésta "es una guerra que no habría empezado" si él hubiese sido la presidenta. "Esta es la guerra. ayudando a apagar los grandes y horribles incendios que se han iniciado a causa de la incompetencia y el odio", ha sentenciado el mandatario estadounidense.

El Kremlin ha restado importancia este lunes a las palabras de Trump. "Estamos muy agradecidos a los estadounidenses y al presidente Trump, especialmente, por su apoyo. crucial y tiene relación con la carga mental que afecta absolutamente a todo el mundo con estas reacciones emocionales", ha manifestado el portavoz de Putin, Dmitri Peskov.

El Kremlin quiere aprovechar el momento

Los ataques del sábado tuvieron lugar después de que Moscú y Kiiv mantuvieran conversaciones directas en Estambul el viernes de la semana pasada, las primeras en tres años y en las que acordaronel mayor intercambio de prisioneros de guerraentre ambos países, mil reclusos por bando. Sin embargo, Rusia no afloja y deja en evidencia a Trump, que había prometido poner fin al conflicto en unas pocas semanas después de regresar a la Casa Blanca.

El ataque del domingo confirma una dinámica: en los últimos meses, y ya con Trump como presidente, el ejército ruso no ha aflojado los ataques aéreos contra Ucrania. Recientemente, de hecho, el ritmo se ha intensificado. Putin está convencido de que el tiempo juega a su favor y considera que ahora es un buen momento para apretar el acelerador: varias voces occidentales alertan de que Kiiv se está quedando sin armamento y munición.

La semana pasada, además, un informe de la Agencia de Inteligencia de la Defensa de Estados Unidos (DIA, por sus siglas en inglés) ha puesto de relieve que Rusia planea continuar los combates en Ucrania a lo largo de este año. Los analistas, y el gobierno ucraniano, dan por hecho que en los próximos meses Moscú, que lleva tiempo con la iniciativa en el campo de batalla, intentará lanzar una nueva ofensiva para conquistar más territorio. Putin ha demostrado que no le importa tener muchas bajas a cambio de ganar centímetros de territorio ucraniano.

En este sentido, el canciller alemán, Friedrich Merz, ha afirmado este lunes que el hecho de que Putin no haya reaccionado a la oferta de entablar conversaciones con Ucrania mediadas por el Vaticano es un indicio de que la guerra en este país durará mucho más de lo previsto. El presidente francés, Emmanuel Macron, también se ha expresado de forma similar este lunes. En declaraciones a los medios de comunicación desde Hanoi, donde empezó su gira por el sudeste asiático, el líder francés dijo que "Trump se dio cuenta de que Putin le ha mentido y que Putin no está preparado para la paz".

Rusia ha atacado a Ucrania por tercera noche consecutiva este lunes de madrugada, según han informado los servicios de emergencia ucranianos. La alerta de bombardeo aéreo duró seis horas en Kiiv, según informó Timur Tkachenko, jefe de la administración militar de la ciudad. La región circundante de Kiiv fue sometida a un ataque combinado de drones y misiles, según Reuters. Los ataques con drones rusos han causado incendios y destrucción en viviendas particulares en la región sur de Odessa.

Al mismo tiempo, Ucrania ha lanzado también algunos ataques sobre territorio ruso este lunes. El ministerio de Defensa ruso ha informado de que sus sistemas de defensa aérea habían derribado a 96 drones ucranianos, incluidos seis sobre la región de Moscú. Los aeropuertos de Domodédovo y Jukovski de Moscú han detenido temporalmente los vuelos, según Rosaviatsia, el organismo de control de la aviación ruso.