Más de 500 detenidos por las protestas en Francia contra los recortes
La movilización social que pretende bloquear el país acaba con altercados en París y en otras ciudades
ParísFrancia vive este miércoles una jornada de movilizaciones sociales para protestar contra los recortes que pretendía realizar el gobierno que cayó el lunes. Aunque este martes el presidente Macron nombró a un nuevo primer ministro, la protesta se ha mantenido. Con el lema "Bloqueémoslo todo", el movimiento que ha convocado la movilización –surgido en las redes sociales y vinculado a movimientos sociales de izquierda– quería bloquear el país e hizo un llamamiento a los ciudadanos a quedarse en casa: ni ir a trabajar, ni a comprar, ni llevar a sus hijos a la escuela. Por último se han producido numerosos enfrentamientos entre la policía y los manifestantes en distintos puntos de Francia, si bien el seguimiento de la movilización es bajo y el país no se ha detenido.
Con todo, miles de personas han salido a la calle a protestar y desde primera hora de la mañana ha habido incidentes en París y en otras ciudades del país, como Lyon, Burdeos, Rennes, Nantes y Toulouse. En distintos puntos, grupos de manifestantes han bloqueado carreteras, una treintena de institutos y los accesos de algunas empresas. Según ha informado el ministro del Interior en funciones, Bruno Retailleau, se han realizado 521 detenciones, la mayoría en París y en su área metropolitana.
Incendio de un edificio
El gobierno ha hecho un despliegue inédito en todo el país para evitar incidentes con 80.000 agentes. En París se han vivido altercados en lugares turísticos como los alrededores del centro comercial de Les Halles, que ha tenido que cerrar sus puertas ante el temor a pillajes. Una de las imágenes más espectaculares fue el de un incendio que se produjo a primera hora de la tarde en un edificio de un restaurante cercano a Les Halles mientras la policía cargaba contra un grupo de manifestantes. El restaurante, situado a pie de calle, fue evacuado rápidamente y no hubo heridos.
"La movilización no tiene nada de movilización ciudadana. Ha sido desvirtuada, apropiada, incautada por el movimiento de la extrema izquierda con el apoyo del movimiento insumiso", ha denunciado Retailleau, el ministro más conservador del gobierno. La movilización ha contado con el apoyo de sindicatos y de partidos de izquierdas, como la Francia Insumisa (LFI) y los ecologistas. "Sed prudentes y esté atentos. Retailleau busca que haya incidentes y multiplica las provocaciones. Cuidado, le gusta la represión y quiere imágenes de violencia para los telediarios", ha replicado el líder de los insumisos, Jean-Luc Mélenchon, al ministro del Interior.
A pesar de la poca participación ciudadana, la movilización ha afectado al funcionamiento de transportes públicos, museos y lugares turísticos. El Museo de Orsay, uno de los más visitados de París, ha cerrado durante todo el día, mientras que el Louvre ha abierto pero mantiene cerradas muchas salas. También existen líneas de tren del área metropolitana de París afectadas por el movimiento social.
En medio de las protestas
La movilización callejera contra el proyecto de presupuestos del anterior gobierno ha coincidido con la toma de posesión de Sébastien Lecornu como nuevo primer ministro. El presidente de la República le nombró este martes y hoy se ha hecho el traspaso de poderes entre el anterior jefe de gobierno, François Bayrou, y Lecornu. El nuevo primer ministro se comprometió a reunirse en los próximos días con partidos políticos y sindicatos y prometió gobernar de una forma diferente. "Serán necesarias rupturas en la forma, pero también en el fondo", aseguró en sus primeras palabras como jefe de gobierno. Lecornu empezará esta misma semana las consultas para formar un nuevo ejecutivo.
El nuevo primer ministro tiene el reto de presentar en las próximas semanas un nuevo proyecto de presupuestos que frene las protestas sociales. La movilización de este miércoles nació como respuesta a los recortes de los anteriores presupuestos y amenaza con hacerse fuerte si el nuevo gobierno no da marcha atrás en medidas como las de suprimir dos festivos para todos los trabajadores sin compensación económica alguna. Tras las protestas de este miércoles, Francia vivirá una huelga general el 18 de septiembre. Será la primera de Lecornu como primer ministro.
El nombramiento de un nuevo jefe de gobierno que proviene de la derecha –actualmente es del partido centrista de Macron pero antes era de Los Republicanos– ha enfadado a todos los partidos de izquierda. Lecornu deberá presentar unos presupuestos que sean sensibles a las reivindicaciones de la izquierda si desea evitar una moción de censura. Si se ponen de acuerdo el bloque de izquierda y la extrema derecha pueden derribar el futuro nuevo gobierno. "O hay ruptura o hay censura", ha advertido el presidente del Reagrupament Nacional (RN), Jordan Bardella.