Intento de magnicidio en Eslovaquia

El poeta y activista pacifista que disparó contra el primer ministro

Juraj Cintula, de 71 años, es acusado de intento de asesinato premeditado por venganza

Sònia Sánchez
3 min
El atacante del primer ministro eslovaco, Robert Fico, en el suelo al ser detenido tras el intento de asesinato.

BarcelonaEste miércoles, cuando el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, fue a saludar a los seguidores que le esperaban tras una valla en la ciudad de Handlova, Juraj Cintula se abrió paso entre ellos y va disparar cinco veces contra el jefe de gobierno eslovaco, que cayó al suelo rodando. El atacante fue reducido allí mismo y detenido enseguida. Ha sido acusado de intento de asesinato premeditado por venganza y se enfrenta a 25 años de cárcel. Pero quién es el hombre que intentó asesinar el populista primer ministro eslovaco?

El agresor ha sido identificado como Juraj Cintula, ciudadano de Levice, en el sureste del país. Tiene 71 años y es un escritor y activista que hace unos años fundó una plataforma contra la violencia, pero que tenía vínculos con grupos ultranacionalistas y pro-rusos y había manifestado opiniones en contra de la población gitana, según publica la prensa local eslovaca. Vecinos y conocidos de Cintula aseguran al medio eslovaco Novy Cas que el hombre es una persona "muy agradable" y que no entienden por qué ha actuado así.

Él mismo, sin embargo, dejó claras sus motivaciones políticas en la primera declaración después de su detención. “No estoy de acuerdo con las políticas del gobierno. ¿Están liquidando los medios de comunicación, por qué ataca la RTVS [la televisión pública]?", dijo Cintula, según el portal Noviny.sk.

El hombre, un poeta que ha publicado varias recopilaciones, es miembro del Club Literario DUHA y de la Asociación de Escritores Eslovacos. . Se sabe que había sido votante y partidario de Zuzana Čaputová, la actual presidenta de Eslovaquia, que el miércoles condenó con contundencia el atentado. elegido el pasado mes de abril que aún debe tomar posesión y miembro de la coalición de Fico–, Peter Pellegrini, para condenar el ataque al primer ministro y convocar a todos los partidos políticos para rebajar la tensión generada por el intento de magnicidio.

Defensor de la no-violencia

El agresor había trabajado para una empresa de seguridad llamada SBS en grandes almacenes. Se cree que por eso tenía un arma, una Ceska Zbrojovka o CZ, de 9 milímetros y de origen checo. En 2016 fue agredido por un cliente de los grandes almacenes y aquel incidente le llevó a crear una plataforma política, el Movimiento contra la Violencia. En ese momento, Cintula decía que la democracia eslovaca estaba amenazada por la privatización de bienes del estado tras la caída de la dictadura comunista, unos bienes que habían pasado a manos de "oligarcas y ricos que compran los representantes políticos", decía. Y por ese motivo, llamaba a la sociedad a salir a la calle a protestar "desde la no-violencia".

El ministro del Interior eslovaco, Matus Sutaj Estok, ha afirmado este jueves que Cintula "no es miembro de ningún grupo radicalizado ni de derechas ni de izquierdas" y que es simplemente alguien "muy involucrado en los acontecimientos políticos" y en desacuerdo con las políticas de Fico.

Sin embargo, según un periodista húngaro llamado Szabolcs Panyi, citado también por la prensa local, Juraj Cintula solía formar parte del movimiento militar pro-ruso Reclutas Eslovacos (Slovenski Branci), que puso fin a sus actividades el año 2022. En un mensaje del 2016 en la página de Facebook de Slovenskí Branci, se puede ver a Cintula participando en un acto del grupo de simpatías neonazis, donde deja un mensaje para pedir la aparición de milicias armadas que defiendan los europeos del llegada de “centenares de miles de migrantes”, según informa Efe.

Según el diario SME, el hombre ha participado en varias protestas contra el gobierno de Fico, la última el pasado abril. También ha publicado dos libros, uno de los cuales incluye ataques contra la comunidad gitana de Eslovaquia.

La policía cacheó su coche para ver si había explosivos, y escoltaron a su mujer, jubilada, fuera del apartamento donde viven el mismo miércoles por la noche, pero no ha trascendido que encontraran nada destacable.

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