Francia prohíbe las túnicas musulmanas en las escuelas e institutos

ParísUna semana antes de que comience el curso escolar en Francia, el nuevo ministro de Educación, Gabriel Attal, ha sorprendido este lunes con el anuncio de la prohibición de las abayas y los qamis –vestidos y túnicas tradicionales de países musulmanes– en todos los centros escolares públicos del país. "Cuando se entra en un aula, no debería poder identificarse la religión de los alumnos mirándolos", ha resumido Attal. La decisión cuenta con todo el apoyo del ejecutivo francés, tal y como ha dejado claro el portavoz gubernamental, que calificó las dos prendas como un "ataque político" contra la laicidad de los centros educativos. "La escuela es laica", ha subrayado.

La ley de la laicidad de 2004 ya prohíbe de forma genérica en los establecimientos escolares públicos –escuelas e institutos– cualquier símbolo "que manifieste ostensiblemente una pertenencia religiosa", como el velo islámico, las cruces cristianas de grandes dimensiones o las kipás. Pero la norma no especificaba todos los símbolos religiosos prohibidos, lo que obliga a los responsables de los centros educativos a aplicar su propio criterio a la hora de prohibir o permitir prendas como las abayas y los qamis.

Ante la demanda de aclaraciones por parte de los directores de los centros, el año pasado una circular de Educación abría la puerta a prohibir estos vestidos y túnicas, pero era lo suficientemente ambigua como para seguir aceptándolas en las escuelas e institutos. El anterior ministro de Educación, Pap Ndiaye, se negó a prohibirlas explícitamente. "No publicaremos catálogos interminables para precisar la longitud de las prendas", dijo entonces Ndiaye.

Aumento de los ataques contra la laicidad

Pero Attal, una figura en ascenso en el gobierno, ha querido empezar el curso prohibiendo las abayas y los qamis coincidiendo con un aumento de las notificaciones de ataques a la laicidad en los centros escolares. Se empezaron a disparar después del atentado que acabó con la vida del profesor Samuel Paty, en octubre de 2020, pero en los últimos dos años la subida ha sido del 150%, una cifra que preocupa al ejecutivo.

Detrás de la decisión está también la voluntad de Gabriel Attal, nombrado en julio como ministro de Educación, de marcar perfil político propio y responder a la demanda del presidente, Emmanuel Macron, de "restaurar la autoridad en las escuelas". Macron hizo esta petición en una entrevista a principios de agosto en el diario Le Figaro, pocas semanas después de los graves altercados que hubo en muchas ciudades de Francia protagonizados por jóvenes tras la muerte de un adolescente a manos de la policía.