La inteligencia alemana consideró muy probable que la cóvid-19 hubiera surgido de un laboratorio
En un informe de 2020 que el gobierno no hizo público se apuntaba una probabilidad de entre el 80% y el 90%
BarcelonaCinco años después de que la cóvid-19 generara una alarma mundial, todavía sigue habiendo muchas incógnitas sobre cómo se originó. La hipótesis que ha sido ampliamente defendida en varios artículos científicos apunta a un mercado de la ciudad china de Wuhan como el epicentro de la pandemia, pero todavía hay voces que defienden la teoría de que el virus SARS-CoV-2 que causa la enfermedad salió de un laboratorio chino. Esta semana dos diarios alemanes han publicado que la agencia de inteligencia del país elaboró un informe en el 2020 en el que apuntaba a la hipótesis del laboratorio, aunque el gobierno, entonces liderado por la conservadora Angela Merkel, nunca llegó a hacerlo público.
En concreto, la agencia alemana consideraba que había una probabilidad de entre el 80% y el 90% de que el coronavirus hubiera sido liberado de forma accidental del Instituto de Virología de Wuhan. Según la información publicada por Die Zeit y Sueddeutscher Zeitung,el organismo tenía indicios de que el centro de investigación había realizado experimentos con los que los virus se modifican para ser más transmisibles a los humanos con fines de investigación. También tenía indicios de que se habían producido varias violaciones en las regulaciones de seguridad en el laboratorio.
China ha negado repetidamente esta teoría. El ministerio de Exteriores chino dijo el mes pasado que el Instituto de Virología de Wuhan nunca había realizado este tipo de experimentos y que no tenía ninguna implicación en la liberación del SARS-CoV-2. Esta semana, tras las informaciones alemanas, el portavoz de Exteriores, Mao Ning, subrayó que "rastrear el origen de la cóvid-19 es una cuestión científica que deberían ser determinada por científicos con un enfoque científico", y recordó que expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) determinaron que la teoría del laboratorio es "extremada". "China se opone firmemente a cualquier manipulación política sobre la cuestión del rastreo del origen de la cóvid-19", dijo.
El informe de la agencia de espionaje alemana se basó en una operación de inteligencia sin especificar y en datos públicos, y lo había encargado la oficina de la cancillera. En una rueda de prensa esta semana, el actual jefe de gobierno, Olaf Scholz, declinó responder a una pregunta al respecto. Aunque este informe nunca se hizo público, sí se compartió con la agencia de inteligencia de Estados Unidos, la CIA, aunque mucho más tiempo después, en otoño del 2024, según la información de los diarios alemanes.
Teoría defendida por Estados Unidos
Estados Unidos –que ve a China como su principal rival geopolítico– mantienen viva la teoría de que el virus se originó en el laboratorio de Wuhan. En enero la CIA publicó un comunicado en el que afirmaba que esta hipótesis es "más probable" que la que afirma que se originó de forma natural, aunque admitía que tenía "poca confianza" en sus conclusiones y subrayaba que ambos escenarios siguen siendo plausibles. Este comunicado, que se publicó después de que Donald Trump tomara posesión del cargo de presidente de EEUU por segunda vez, es el primero en el que la CIA apuesta tan claramente por esta tesis pese a no tener pruebas. Trump, que era presidente cuando estalló la pandemia mundial, se refirió en muchas ocasiones al coronavirus de la cóvido como el "virus chino" y abrazó posturas negacionistas.
Varios estudios científicos han señalado el mercado mayorista de mariscos de Huanan, en la ciudad de Wuhan, como el origen del SARS-CoV-2. Por ejemplo, la revista Science publicó en el 2022 una investigación realizada por 18 científicos en la que se negaba que el virus proviniera de un laboratorio. En septiembre del año pasado la revista Cell publicó un alter estudio que reforzaba la hipótesis de que el coronavirus se originó en el mercado, donde se vendían animales vivos.
En 2021 una investigación de la OMS concluyó que la teoría de las filtraciones en el laboratorio era "extremadamente improbable". Pero el organismo de las Naciones Unidas sigue reclamando más información en China, que asegura que ya ha entregado todos los datos de los que dispone. El año pasado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, admitió que sin datos completos "todas las hipótesis están en el aire".