¿Qué territorio ocupa Rusia en Ucrania?
Moscú controla casi 114.500 km2 de Ucrania, un 19% del país, y centra sus avances en el Donbás
BarcelonaLas cesiones territoriales estarán sobre la mesa de la reunión de este viernes entre Donald Trump y Vladímir Putin. De hecho, aunque el dirigente estadounidense haya asegurado este miércoles que cualquier cambio de fronteras tendrá el visto bueno de Kiiv, el encuentro podría definir un intercambio de cromos en algunas regiones en el este de Ucrania. ¿Pero cómo está el frente en estos momentos? ¿Qué territorio ucraniano ocupa Moscú?
Rusia controla casi 114.500 km2 de Ucrania, más que todo Hungría (93.000). Esta superficie supone el 19% del país. La cifra incluye tanto las zonas ocupadas antes de la invasión a gran escala de 2022 como las conquistadas posteriormente. En cambio, Ucrania –que lideró una incursión en la región rusa de Kursk el pasado agosto– ya no controla ningún territorio ruso reconocido internacionalmente.
Moscú considera que Crimea, Donetsk, Luhansk, Zaporíjia y Kherson forman parte de Rusia desde octubre del 2022, aunque Kiiv ha dicho repetidamente que nunca reconocerá la ocupación rusa de sus territorios.
Crimea y el Donbás, el precedente
Las fuerzas rusas tomaron el control de la península de Crimea, en el mar Negro, en el 2014. Y tras un polémico referendo sobre la anexión a Rusia, Moscú absorbió la región. Si bien Ucrania sostiene que la península sigue perteneciéndole, en privado altos funcionarios admiten que sería difícil recuperar su control efectivo.
La situación en el Donbás es diferente. En 2014, separatistas de Donetsk y Luhansk se independizaron y se proclamaron "repúblicas populares" independientes. Ahora bien, Putin no las reconoció hasta 2022, pocos días antes de la invasión de Ucrania. En el Donbás, Rusia controla unos 46.570 km2 del territorio, es decir, el 88% de la región. Aquí se incluye la totalidad de Luhansk y el 75% de Donetsk. Es precisamente en el frente de Donetsk donde Moscú está intensificando la ofensiva en las últimas semanas.
Las tropas de Putin empezaron la ocupación de Zaporíjia y Kherson a partir de febrero de 2022, y actualmente controlan un 74% de la superficie de las dos regiones, es decir, unos 41.176 km2, mientras que Ucrania sólo controla unos 14.500 km2. En Zaporíjia, Rusia controla principalmente la mitad sur; en Kherson, sólo la orilla este del Dniéper. Estos dos óblastos podrían ser uno de los arrecifes en los que Putin incida durante el encuentro con Trump, ya que en el 2024 aseguró estar dispuesto a aceptar la paz si Ucrania se retiraba de estas regiones y renunciaba oficialmente a las aspiraciones de adherirse a la OTAN.
Estas son las regiones que Rusia se ha anexionado hasta ahora. Pero Moscú también ha realizado avances militares en otras zonas de la frontera. Concretamente, controla algunos puntos de las regiones de Járkov y Sumi, cerca de 400 km2 en total, y un pequeño rango en el extremo sudeste de Mikolaiv. En Sumi, Rusia asegura que está creando una zona de seguridad para proteger a su región de Kursk de los ataques de Ucrania.
Un movimiento repentino
Este martes, sólo tres días antes del encuentro con Trump, las tropas de Putin lanzaron una ofensiva cerca de la ciudad minera de Dobropilia, en Donetsk, y al oeste de las líneas habituales de avance ruso. Se trata de uno de los movimientos más destacables del último año y ha sido interpretado por algunos analistas como un intento de aumentar la presión sobre Kiiv para que ceda territorio.
Según el mapa de DeepState, elaborado con fuentes militares ucranianas, el martes las fuerzas rusas habían avanzado al menos 10 km hacia el norte en dos tramos, en un paso más para tratar de controlar por completo la región ucraniana de Donetsk. Los avances son relevantes porque permiten a las tropas rusas una vía de acceso a las ciudades estratégicas de Kostiantínivka y Pokrovsk, que Moscú quiere rodear aprovechando la carencia de efectivos del bando contrario.
Si bien por el momento el ejército ucraniano habla sólo de "infiltración", analistas del Instituto para el Estudio de la Guerra afirman que es probable que las tropas de Moscú busquen convertir estas ganancias tácticas en un avance en los días entrantes. Queda por ver si las tropas rusas podrán mantener sus posiciones frente a una contraofensiva de Kiiv.