Trump asegura que tiene "los ingredientes" para un acuerdo de paz en Ucrania
El presidente de EEUU se reúne con Zelenski pero admite que no tiene ningún plazo para poner fin a la guerra
Barcelona"Tenemos los ingredientes para un acuerdo [de paz]", aseguró el presidente estadounidense, Donald Trump, quien recibió a su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, con un apretón de manos en las escaleras de entrada de su residencia vacacional en Mar-a-Lago, en Florida, que fue inmortalizada. Ambos mandatarios han hecho una breve comparecencia ante los medios de comunicación justo antes del inicio de la reunión en la que discutirán el plan de paz que quieren proponer a Rusia para poner fin a la guerra después de casi cuatro años de conflicto. Se trata de un documento de veinte puntos, que por el momento Moscú rechaza.
En su breve comparecencia ante la prensa, Trump y Zelenksi han respondido algunas preguntas de los periodistas, pero no han aclarado cómo tienen previsto resolver los flecos del acuerdo de paz que todavía generan reticencias tanto en Kiiv como en Moscú. Con todo, Trump se mostró convencido de que esta vez tanto Zelenski como el presidente ruso, Vladimir Putin, quieren llegar a un acuerdo de paz, pero reconoció que no tiene ningún plazo para hacerlo realidad ni para poner fin a la guerra.
En cuanto a las garantías de seguridad de Ucrania en el futuro, el presidente estadounidense ha calificado de "tonto" la pregunta de un periodista que le ha cuestionado al respecto. "Habrá un acuerdo de seguridad. Será un acuerdo sólido. Las naciones europeas están muy involucradas", ha declarado después para salir del paso. Y ha añadido que los países europeos "han sido realmente fantásticos" y "son todas personas fantásticas".
Poco antes del inicio del encuentro, Trump ha hablado por teléfono con Putin, según ha informado él mismo y ha confirmado el Kremlin. Asimismo, el dirigente estadounidense ha anunciado que volverá a conversar con su homólogo ruso tras la reunión con Zelenksi para "seguir la negociación". También ha advertido que cualquier plan de paz que se proponga en Moscú debe contar con su aprobación para que salga adelante. Con lo que, Zelenski está contra las cuerdas.
La reunión de este domingo entre el presidente estadounidense y su homólogo ucraniano es la primera de los dos mandatarios desde que Trump se negó a facilitar misiles Tomahawk de largo alcance en Ucrania.
Intensificación de los ataques
Durante los días previos al encuentro, Rusia ha intensificado los ataques contra la capital ucraniana con misiles y drones con el objetivo de presionar a Zelenski para que ceda y acepte algunas de las exigencias rusas para poner fin a la guerra. La ofensiva rusa continuó este sábado por la noche con un "bombardeo masivo" sobre Kherson, según informó el servicio estatal de emergencia a esta ciudad del sur de Ucrania.
El plan de paz que ha elaborado Ucrania junto con Estados Unidos y los socios europeos plantea un pacto de no agresión, garantías de seguridad para Kiiv y el ingreso de Ucrania en la Unión Europea a medio plazo. También establece que Rusia y Ucrania se comprometerán de forma irrevocable a no atacarse mutuamente. Zelenski considera, sin embargo, que los continuos ataques rusos demuestran que el mandatario ruso "no quiere la paz" realmente.
Uno de los puntos de fricción del acuerdo de paz es también la gestión de la central nuclear de Zaporíjia, la mayor de Europa y una de las diez mayores del mundo, situada en el sureste de Ucrania. Actualmente la central está ocupada por Rusia, y la propuesta de paz que defiende Trump prevé que sea operada en el futuro de forma conjunta por Ucrania, Estados Unidos y Rusia.
Otro punto espinoso en las negociaciones es el control de la región del Donbás, en el este de Ucrania y formada por dos subregiones, Donetsk y Luhansk. Actualmente Moscú controla el 75% de la región de Donetsk, y un 99% de la vecina Luhansk. La semana pasada el presidente ruso, Vladimir Putin, reiteró en una reunión a puerta cerrada con la élite empresarial rusa que sólo aceptará un acuerdo de paz si Ucrania entrega toda la región de Donbás a Moscú, incluso las zonas que todavía están bajo control de Kiiv.
En cambio, como alternativa, el plan de paz estadounidense propone crear "una zona económica libre" en esta región. Zelenski considera que esta propuesta sigue dejando muchos interrogantes abiertos, como quién administrará este territorio y cómo se garantizará que Rusia retire sus tropas.
De hecho, la prioridad del presidente ucraniano es garantizar la seguridad de Ucrania en el futuro, es decir evitar futuras agresiones rusas. Sin embargo, Zelenski se ha mostrado dispuesto a ceder y abandonar la idea de que Ucrania forme parte de la OTAN, con el objetivo de conseguir como sea un acuerdo de paz. A cambio, el líder ucraniano y sus aliados europeos presionan para que Ucrania disponga de garantías de seguridad similares a las del artículo 5 de la Alianza Atlántica, según el cual un ataque contra un país miembro de la OTAN debe considerarse como un ataque contra todos. Sin embargo, no queda claro si Moscú aceptaría esta condición.
Antes de viajar a Florida, Zelenski visitó Canadá el sábado, se reunió con su primer ministro, Mark Carney, y logró un importante apoyo económico. Canadá proporcionará a Ucrania ayuda por valor de 2.500 millones de dólares canadienses (unos 1.552 millones de euros) que permitirá a Kiiv acceder a 8.400 millones de dólares en préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Por otra parte, Zelenski tiene previsto volver a mantener conversaciones con los líderes europeos tras el encuentro de este domingo con Trump. Los jefes de la Unión Europea, Ursula von der Leyen y Antonio Costa, dejaron claro pocas horas antes de la reunión que van a trabajar para que Ucrania pueda adherirse a la Unión Europea.