¿Dónde está Noof al-Maadeed? "Si dejo de escribir en las redes sociales es que estoy muerta"

Barcelona¿Dónde es la activista catarí Noof al-Maadeed? Crece la preocupación entre los grupos de derechos humanos, que reclaman a las autoridades cataríes que muestren pruebas de que la joven, de 23 años y conocida por su lucha feminista, está viva. Se cree que podría estar muerta o haber sido secuestrada. La activista lleva desaparecida desde mediados de octubre, después de volver a Catar desde el Reino Unido, donde había pasado dos años bajo asilo internacional debido a la grave violencia doméstica que hacía años que sufría y la restricción de libertades en su país. Recientemente, había recibido la confirmación desde Catar de que podía volver y estar segura, una promesa que la llevó a viajar de vuelta a su país.

La joven, muy activa en las redes sociales, hacía años que documentaba su vida, ideología e historias en sus perfiles de internet. Fue precisamente a través de Twitter, donde diariamente compartía contenido, que escribió el alarmante mensaje: "Si no estoy activa en las redes sociales, es que estoy muerta". Después de este tuit, el 12 de octubre explicó en la red social que su familia, que ya la había intentado matar en tres ocasiones anteriormente, había podido acceder al hotel donde estaba y en el que, supuestamente, tenía protección oficial. Sus dos últimos tuits fueron del 13 de octubre. "Todavía no estoy segura" y "Un poco mejor" es lo último que se sabe de ella.

Sus fieles seguidores han llenado las redes sociales de mensajes con el hashtag #whereisNoof (¿Dónde está Noof?), con el que piden saber los motivos de su desaparición y que se hagan públicas pruebas de que Al-Maadeed está viva. Desde el Centro de Derechos Humanos del Golfo (GCHR, en las siglas en inglés) han dicho que la falta de pruebas de vida de la activista es preocupante, y que han recibido informaciones que apuntan a que la chica habría sido entregada a su familia.

Las leyes de tutela cataríes

A principios de año, Human Rights Watch denunció la situación de Al-Maadeed en un comunicado que subrayaba "el sistema discriminatorio de tutela masculina que se aplica en Catar, que niega a las mujeres el derecho a tomar decisiones clave sobre su vida". Las leyes cataríes impiden que una mujer no casada de menos de 25 años pueda viajar sola fuera del país sin permiso de un tutor masculino. El informe llevaba por título Todo lo que tengo que hacer está ligado a un hombre, y en él se explicaba que Noof Al-Maadeed había decidido marcharse del país después de ser víctima durante muchos años de violencia doméstica y de tener los movimientos limitados. "Solo tenía permitido ir a la escuela y volver a casa. Cualquier otra cosa y me esperaba una paliza", relataba. Esta fuga catarí la documentó a través de sus perfiles de Instagram y Twitter, donde narró que había tenido que robar el móvil a su padre para poder tramitar el permiso de viaje.

A pesar de que las historias de mujeres cataríes buscando asilo internacional no son habituales, la discriminación que sufren es sistémica. Poco a poco algunas se van armando de valentía y deciden levantar la voz ante las injusticias que sufren. Al-Maadeed es solo un ejemplo de ello.