Internacional

Empieza la batalla urbana en la ciudad de Gaza

Netanyahu asegura que "no habrá ningún alto el fuego", tras la emisión de un vídeo en el que tres rehenes le piden que negocie su liberación

4 min
tanques gaza

BarcelonaLa batalla urbana de Gaza ha comenzado este lunes, tres semanas después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, lanzara una operación militar para "reducir Gaza en los escombros" y "destruir" Hamás, y dos días después de que anunciara "la segunda fase de la guerra" con la invasión terrestre.

El plan israelí se ha ejecutado paso a paso desde el ataque sorpresa de Hamás del 7 de octubre. Primero, bombardeos masivos sobre zonas civiles que, según el ministerio de Salud de Gaza, han matado ya a más de 8.300 palestinos, entre ellos más de 3.200 criaturas según Save the Children, una cifra que supera a las criaturas muertas en zonas de guerra en todo el mundo el año pasado. Israel ha declarado que Hamás ha situado a sus efectivos en escuelas, hospitales y barrios residenciales, que han sido el objetivo de los bombardeos, que allanaban el terreno para la invasión terrestre. Segundo, cortar las comunicaciones de Gaza, en el momento en que empezaban a entrar tropas en la Franja, este fin de semana. Y ahora una ofensiva terrestre en la que los tanques israelíes ponen a prueba la capacidad de Hamás y el resto de milicias palestinas. El ejército israelí ha protagonizado varias incursiones preparatorias a lo largo del fin de semana, llegando este lunes hasta la periferia de la ciudad de Gaza y cortando durante una hora la carretera de Salah Al-din, que atraviesa la Franja de norte a sur. La intensidad de los bombardeos en las últimas horas carece de precedentes. Ni en esta guerra ni en ninguna otra.

Los ataques israelíes han afectado a los alrededores del Hospital de Al Quds, en la ciudad de Gaza. Según su director, Bachar Mourad, han recibido la orden de evacuación del ejército israelí, pero dicen que es imposible evacuar a los enfermos gravemente heridos oa los bebés que están en las incubadoras. También la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aclarado que "es imposible evacuar hospitales llenos de pacientes sin poner en peligro su vida". Tampoco tienen un lugar seguro a donde ir: los bombardeos en la zona sur de la Franja, donde el ejército israelí ha ordenado a los palestinos refugiarse, también son constantes.

Israel sigue desvelando muy poco sobre sus planes operativos en Gaza, más allá de decir que está ampliando las operaciones terrestres y advertir a su opinión pública de que la guerra será larga y dura. Hay combates en el norte de la Franja, y también en las inmediaciones de la ciudad de Gaza, en lo que parecería un plan para cortar la Franja por la mitad.

"Poco a poco y de manera planificada y metódica, el ejército israelí está entrando en el corazón de la ciudad de Gaza, mientras continúan los bombardeos para destruir los arsenales y mandos de Hamás", explica al ARA desde Tel-Aviv Eitan Shamir, analista militar de la Universidad de Bar-Ilan. Él también prevé que "hará falta tiempo para limpiar toda la infraestructura de Hamás", y dice que "es cosa de meses". Pero asegura que el objetivo de Israel no es volver a ocupar ni total ni parcialmente a Gaza. "Ahora hay dos preguntas: cuánto tiempo durará la operación de limpieza y quién controlará Gaza cuando la guerra haya terminado. Y ahora mismo nadie tiene respuesta a ninguna de las dos preguntas".

La ofensiva israelí sobre Gaza s enfrenta a dos grandes desafíos. El primero es la red de túneles subterráneos que Hamás ha construido durante años y que, según admite el analista, los servicios de inteligencia israelíes conocen sólo parcialmente. "Combatir sobre los túneles es muy difícil y seguro que habrá muchas bajas entre los soldados israelíes, que ahora son miles en la Franja, aunque sean las unidades de élite más preparadas", reconoce. Shamir también explica que entre los efectivos israelíes hay muchos especialistas en ingeniería militar precisamente por intentar neutralizar la acción de los milicianos desde los túneles. Pero el analista descarta que los soldados israelíes tengan que entrar en combates cuerpo a cuerpo: "Si alguien dispara desde una casa, la bombardearán. No tienen ninguna necesidad de entrar en las casas".

Los rehenes israelíes, un tema crítico

El otro reto para los militares es político. Son los rehenes en manos de Hamás; según admite el propio analista, "es muy difícil que salgan ilesos de la incursión, aunque esto podría lograrse si se reúne información suficiente de inteligencia capturando a milicianos vivos". El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, compareció de nuevo este lunes ante la prensa para dejar claro que "no habrá ningún alto el fuego", pese a los continuos llamamientos de la comunidad internacional.

Hamás sigue insistiendo en que está dispuesto a negociar una tregua ya llegar a un acuerdo sobre los 239 rehenes secuestrados en Gaza, aunque ha anunciado que una cincuentena han muerto en los bombardeos. El viernes Qatar, que actúa como mediador, había dicho que las conversaciones avanzaban positivamente, pero entonces Israel puso en marcha la operación terrestre. Este mediodía la milicia islamista palestina ha publicado un vídeo en el que se ven tres rehenes retenidas pidiendo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que acceda a un intercambio de prisioneros. Desde el 7 de octubre el número de prisioneros palestinos en Israel se ha duplicado y alcanza ya los 10.000. En Israel la desesperación de los familiares de los rehenes cada vez gana más peso. Este lunes, el ejército israelí ha anunciado que durante las operaciones terrestres de la última noche se pudo liberar a una soldado israelí, Ori Megidish, que había sido secuestrada el 7 de octubre y que ya estaba con su familia.

Ex altos cargos del ejército israelí, incluido Shaul Mofaz, que fue ministro de Defensa y jefe del estado mayor, se han posicionado a favor de un intercambio de "todos por todos": los rehenes de Hamás a cambio de los palestinos tomados por motivos de seguridad, que serían enviados a Gaza. Israel no cerró la puerta a un acuerdo y, según se supo hoy, un enviado de Tel Aviv estuvo negociando el sábado en Qatar. En las negociaciones se ha puesto también sobre la mesa un alto el fuego. Pero esto es entre bastidores: sobre el terreno ahora sólo hablan bombas y fusiles.

stats