Israel ha muerto cerca de 100 palestinos en Gaza desde el alto el fuego
El equipo negociador de EE.UU., Witkoff y Kushner, se ha reunido con Netanyahu para abordar el cumplimiento de la tregua
BarcelonaIsrael y Donald Trump afirmaban la noche del domingo que el alto el fuego "sigue vigente", pero su fragilidad es palpable en todos los rincones de la Franja. Después de unas horas de ruptura ayer domingo –durante las cuales Israel lanzó una nueva ola de bombardeos sobre el enclave y suspendió la entrada de ayuda humanitaria–, esta mañana el ejército israelí ha derribado a tiros a dos palestinos en Ciudad de Gaza. Con estas dos nuevas víctimas, ya son 97 los palestinos fallecidos por acciones israelíes desde el inicio del alto el fuego.
Hamás ha entregado el cuerpo de otro rehén este lunes, el decimotercer que ha devuelto hasta ahora. La organización islamista argumenta que son muy difíciles de localizar por las condiciones de destrucción de la Franja, pero Israel considera este pretexto como una excusa para incumplir el alto el fuego. Justificó el bloqueo de la ayuda humanitaria por los retrasos de Hamás a la hora de entregar los cuerpos de los 28 rehenes, que debían entregarse en esta primera fase según constaba en el acuerdo.
En esta misma línea se ha pronunciado Donald Trump que ha reclamado a los militantes de Hamás que se acojan a los términos del plan de paz que impulsa a Gaza advirtiendo que, de lo contrario, podrían ser "erradicados". "Tenemos paz en Oriente Medio por primera vez en la historia; hemos llegado a un acuerdo con Hamás según el cual se llevarán bien y serán amables. Y si no, iremos y los erradicaremos", amenazó el presidente de Estados Unidos.
Pero Israel tampoco se ha ceñido a los términos del acuerdo. Esta mañana sus hombres dispararon a dos personas en el barrio de Tuffah, en el este de Ciudad de Gaza y junto a la "línea amarilla" que delimita la zona donde se replegaron las tropas israelíes en la primera fase del alto el fuego. El ejército confirmó que se produjeron dos incidentes en el barrio de Shujaiya (también en el este de la capital y fronterizo con Tuffah), en el que personas atravesaron la "línea amarilla" y, como respuesta, sus tropas abrieron fuego contra ellos "para eliminar la amenaza", según aseguran en un comunicado. Desde que empezó el alto el fuego, el ejército israelí ha fallecido más de 40 personas alegando que suponían una "amenaza inmediata" porque se encontraban en zonas cercanas a la "línea amarilla".
También se han escuchado explosiones en Khan Yunis, en el sur de la Franja, y en Deir al-Balah, en el centro. En este segundo punto, periodistas de Al Jazeera desplegados sobre el terreno afirman que Israel ha llevado a cabo ataques con artillería.
Después de días en los que Tel-Aviv había ido haciendo ataques puntuales contra palestinos pese al acuerdo, el domingo los enfrentamientos entre el ejército y milicianos palestinos se saldaron con dos soldados muertos. El detonante habría sido un enfrentamiento entre Hamás y milicias palestinas rivales financiadas por Israel en el sur de Gaza. El ejército israelí habría intervenido para proteger a estas milicias y se habría iniciado un enfrentamiento con Hamás que Israel utilizó como argumento para volver a bombardear varios puntos de la Franja de Gaza. Las fuerzas aéreas israelíes lanzaron una ola de bombardeos que afectó especialmente a la zona de Khan Yunis y dejó al menos 36 muertos, entre ellos varias criaturas.
JD Vance en Israel
Este lunes por la mañana se ha reanudado parcialmente la entrada de ayuda humanitaria, después de que Israel suspendiera ayer su paso como represalia por un presunto ataque de Hamás en el sur de la Franja. Se ha reabierto el paso fronterizo de Kerem Shalom, en el sureste, y otros puntos para el acceso de ayuda humanitaria, pero el ejército sigue impidiendo el paso de camiones por el paso de Rafah. "Siguiendo una directiva del escalón político, el paso de Rafah permanecerá cerrado al movimiento de personas hasta nuevo aviso", recoge un comunicado de Cogat, el organismo militar israelí que gestiona asuntos civiles en los territorios palestinos ocupados.
Precisamente para abordar el cumplimiento del alto el fuego, el enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, y el yerno de Trump, Jared Kushner –los principales negociadores de Washington–, viajaron hoy a Tel Aviv y se reunieron con Benjamin Netanyahu. Si bien no informaron del contenido de la conversación, sí anunciaron que el martes también visitará Israel el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, acompañado de su esposa, para reunirse con el primer ministro israelí. Pese a los recientes incumplimientos, la presión estadounidense habría ayudado a evitar que el acuerdo descarrilara completamente y, de momento, se prevé que las conversaciones sobre la segunda fase del plan continúen.