Recibir la eutanasia con 28 años por una depresión: el caso que conmociona a los Países Bajos

BarcelonaZoraya ter Beek tiene 28 años y vive en un pequeño pueblo de los Países Bajos cerca de Alemania. Vive allí con su pareja –de la que dice estar felizmente enamorada– y sus dos gatos. Pero ahora está en boca de todos, porque la semana pasada explicó a The Free Press que estaba a la espera de recibir la eutanasia. Ter Beek ha tomado la decisión de poner fin a su vida después de tiempo luchando contra una depresión. También sufre autismo y un trastorno de personalidad. Según ha explicado ella misma en el medio estadounidense, el último empujón antes de empezar el procedimiento se lo habría dado su psiquiatra, cuando le dijo que "nunca mejoraría" y que "ya no podían hacer nada más" por ella . Se espera que reciba la eutanasia a principios de mayo.

El caso ha tenido un amplio eco, tanto en los Países Bajos como a escala internacional. Ter Beek ha explicado que quiere dejarlo todo atado antes de morir: "No quiero que mi pareja tenga que preocuparse de organizar nada". "Aún no hemos decidido la urna, pero será mi nueva casa", ha dicho. También ha explicado que no quiere que haya funeral y espera que su pareja esté a su lado hasta el último momento. "Tengo un poco de miedo a morir", ha reconocido.

Los Países Bajos fueron el primer estado del mundo en legalizar la eutanasia en el 2002. Desde entonces, la normativa se ha ido flexibilizando, aunque para recibir la eutanasia se siguen pasando controles estrictos: una junta revisa todos los casos, que necesitan el aval de dos opiniones médicas. Además, para optar a ello se requiere que no exista perspectiva de mejora. Los casos, en ocasiones, llegan a alargarse años.

De hecho, el caso de Ter Beek, al ser por salud mental, requiere un procedimiento aún más estricto. Esto se debe a la necesidad de ver la aflicción de la enfermedad. De hecho, según los datos del comité regional de revisión de la eutanasia (RTE), sólo un 10% de las solicitudes por problemas de salud mental acaban saliendo adelante.

Los Países Bajos, en los últimos años, han ido abriendo poco a poco la vía de la eutanasia para grupos de personas que antes la tenían vetada. Hace un año, por ejemplo, ampliaron la franja de edad para solicitarla. Aunque hasta entonces los niños de entre 1 y 12 años no podían acceder al procedimiento, ahora ya pueden. Los Países Bajos no son el primer país en habilitar la eutanasia en todas las edades: Bélgica lo permite desde 2014.