iPhone 16: una renovación prescindible

Por primera vez, los protagonistas de la tradicional presentación de novedades de Apple de septiembre no han sido los iPhones, sino los dispositivos complementarios como relojes y auriculares. Y no es que los nuevos teléfonos no aporten más funcionalidad y potencia, sino que dependen de una apuesta por la inteligencia artificial generativa (IAG) que aún tarda en materializarse.

Apple ha formalizado este lunes la principal renovación anual de su catálogo. Esto ya es en sí mismo una anomalía: la empresa suele celebrar estas presentaciones el martes. Sin embargo, en esta ocasión ha cambiado de día para evitar la coincidencia con dos eventos previstos para el día 10. Uno de ellos es externo y político: el primer debate entre Kamala Harris y Donald Trump, ambos candidatos a la presidencia de EEUU. En cambio, el segundo afecta directamente a Apple: el Tribunal Europeo de Justicia comunicará si hace definitivamente efectiva o no la sanción de 13.000 millones de euros que la Comisión Europea impuso en el 2016 al fabricante de los iPhones por rectificar el trato fiscal preferente que Irlanda va aplicarle entre 2004 y 2014. En caso de que la resolución sea desfavorable, los nuevos productos recibirían mucha menos atención.

Sobre todo porque los protagonistas habituales del acto, los nuevos iPhones, tampoco parecen aportar novedades suficientemente significativas para justificar un cambio por parte de los usuarios que ya tienen un teléfono de Apple. Quizás por eso, los directivos de la marca han dedicado una parte considerable de su intervención a productos en principio secundarios: los relojes Watch y los auriculares AirPods. Cabe decir que esta categoría representa ya el 10% de la facturación de Apple, en torno a la quinta parte que los iPhones y menos de la mitad que los servicios, pero ya aportan más ingresos que los ordenadores Mac y que las tabletas iPad .

Relojes

El modelo estándar de reloj Apple Watch llega a la décima generación adelgazándose –ahora mide 9,7 milímetros de espesor, un 10% menos que el actual Watch 9– y con una pantalla más grande que le permite mostrar una línea más de texto de los mensajes o facilitar la escritura con el teclado virtual, si el usuario insiste en hacerlo. Apple asegura que la nueva pantalla luce un 40% más cuando la miras de lado, y que la batería tarda sólo media hora en cargarse al 80% de su capacidad. El altavoz integrado en el nuevo modelo permite ahora escuchar música y podcast directamente cuando te has dejado los auriculares en casa. La variante básica con carcasa de aluminio cuesta a partir de 449 € el pequeño, de 42 milímetros (120 € más con conectividad móvil para realizar y recibir llamadas). Esto representa también una novedad: se mantienen los precios de los modelos anteriores.

Funcionalmente, Apple destaca la utilidad de los Watch en la vida diaria de los usuarios, gracias a funciones como la detección de caídas optimizada con IA y las notificaciones de medicación, exposición excesiva al ruido y episodios de fibrilación auricular. En este sentido, la gran novedad es la detección de apneas del sueño, que según Apple sufrimos 1.000 millones de personas en el mundo, el 80% sin saberlo. Esta función llegará también a los Watch 9 y los Watch Ultra 2 existentes. Tanto este último como el nuevo Watch 10 pueden comprarse ahora con carcasa de color negro, mientras que la versión lujosa del Watch 10, que cuesta casi el doble que la normal, abandona el acero inoxidable para adoptar el titanio. Apple mantiene a la venta el reloj básico Watch SE, pero, en cambio, no ha aparecido el esperado Watch barato, con carcasa de plástico, con el que supuestamente la marca pretendería captar usuarios infantiles.

Auriculares

Los emblemáticos auriculares de botón AirPods llegan a la cuarta generación con mejoras de la calidad de sonido, reducción del ruido externo en las llamadas y una práctica función para responder a la ama de llaves Siri sin hablar, sólo asintiendo o negando con la cabeza. Cumpliendo la normativa UE, el estuche se carga ahora con conector USB-C. Los nuevos AirPods 4 siguen costando 149 €, pero por 50 € más existe una versión con carga inalámbrica y cancelación activa de ruido en diversas modalidades de detección de conversación. En este sentido, la variante de botón más completa, los AirPods Pro 2 (279 €) ofrecen ahora una función de audiometría como la que Samsung tiene hace años, para adaptar el sonido de la música a la audición de cada usuario, pero en este caso también registrará en la aplicación Salud del iPhone la pérdida auditiva con el tiempo. Y dentro de unos meses se promete una actualización que permitirá utilizar los AirPods Pro 2 como audífonos con homologación clínica.

Ahora sí, los iPhones 16

A partir de ahora habrá móviles Apple con cuatro tamaños de pantalla diferentes –cinco, si contamos las 4,7 pulgadas del modelo básico SE, pero éste tiene los días contados–. Los nuevos iPhone 16 (a partir de 959 €) e iPhone 16 Pro (desde 1.109 €) mantienen las 6,1 y 6,7 pulgadas de sus predecesores, mientras que los iPhones 16 Pro (desde 1.219 €) e iPhone 16 Pro Max (empieza en 1.469 €) crecen hasta las 6,3 y las 6,9 pulgadas, respectivamente.

Los dos primeros, con carcasa de aluminio, cuentan con dos lentes que según Apple permiten disponer de cuatro cámaras distintas, desde el teleobjetivo de dos aumentos hasta la macrofotografía. Utilizan el procesador propio A18, que promete el mismo rendimiento que el A16 de los iPhones 15 consumiendo un 30% menos energía. Las novedades más visibles son dos botones físicos: uno es el de acción, antes reservado a los modelos Pro, que se puede configurar para realizar operaciones específicas con un único clic. El otro, totalmente nuevo en los iPhones, es el de control de cámara, que no sirve sólo para disparar el disparo sino también para activar y elegir opciones fotográficas y de vídeo. Por ejemplo, deslizando el dedo por encima se puede ajustar el zoom o escoger modalidades de imagen.

Los modelos de gama alta iPhone 16 Pro y Pro Max elevan la apuesta en potencia de procesamiento, con un nuevo chip A18 Pro. Combinando las tres lentes se consiguen varias opciones de fotografía y vídeo de calidad profesional. Una modalidad de grabación en resolución 4K a 120 cuadros por segundo permite obtener lo que Apple llama cámara lenta cinemática, realmente espectacular. Tanto las dos cámaras de los iPhones 16 como las tres de los iPhones 16 Pro permiten captar fotografías de efecto espacial, para ser vistas con el visor Vision Pro de realidad mixta de la marca.

El salto de todos los iPhones 16 en términos de potencia de procesamiento está motivado por la necesidad de hacerlos compatibles con Apple Intelligence, la plataforma de IA generativa que Apple presentó en junio. En línea con su reputación de privacidad, la empresa asegura que la mayoría de las operaciones –desde generar emojis a medida hasta resumir el contenido de los mensajes de correo, pasando por encontrar fotos antiguas sólo escribiendo su descripción, o interrumpir Siri mientras dialogamos con ella– se hacen sin que los datos del usuario salgan de su teléfono, por lo que es necesario disponer de suficiente potencia en el mismo aparato.

Sobre el papel resulta prometedor. Pero, en la práctica, a Apple le está costando rematar su plataforma de IAG, un campo al que llegó tarde. Por eso, los nuevos iPhones saldrán a la venta sin Apple Intelligence, a la espera de que una actualización futura les añada la función en unos meses. Al menos en EEUU y –más adelante– en otros mercados de habla inglesa. En cambio, ya veremos si Apple Intelligence terminará o no estando disponible en la Unión Europea, vistas las estrictas normas sobre IA que aquí se aplican. De hecho, Samsung aguó aún más el acto de Apple desplegando el mismo día sus modelos S24, S23, Flip5 y Fold5 su IA Galaxy AI que ya tenían los Flip6 y Fold6. Por eso, el mejor consejo es que, si los dos nuevos botones físicos no deben cambiar la vida, conserve el iPhone 13, 14 o 15 que ya tiene, a la espera del desenlace del futuro europeo de la IA de Apple.