No es una mera foto (y por tanto hay que pagarla)

16/01/2025
Jefe de Media
2 min

Ha aparecido el libro Macarras ibéricos de Iñaki Domínguez, que propone una historia de España a través de sus quinquis más célebres. Una foto del Vaquilla ilustra la portada. El autor de la imagen es el desaparecido (y añorado) Paco Elvira. Su hija, al ver que una obra de su padre aparecía en la cubierta del volumen, se puso en contacto con Akal y le solicitó una compensación económica, que no obtuvo. Esta semana ha comenzado el juicio que debe dirimir el caso. El editorial argumenta que la imagen está despojada de cualquier "originalidad creativa" y, por tanto, no la considera una obra sino una "mera fotografía", es decir, el registro banal de la actualidad.

Portada del libro 'Macarras ibéricos'.

Es una argumentación rara y difícil de sostener. Si esta imagen ha aparecido en varios sitios –desde la revista Interviú hasta la portada del libro Fuera de la ley- es porque tiene una fuerza expresiva que es fruto de la mirada y la técnica del fotógrafo. Una mera foto podría proceder de las cámaras de seguridad de un banco, pero no del obturador de un profesional que elige el momento justo, hace probablemente unas cuantas probaturas y selecciona la instantánea que mejor capta al personaje. El hecho de que la editorial ponga esa estampa en la portada como principal reclamo para llamar la atención hacia el libro ya demuestra el valor intrínseco de esta obra fotográfica. Considerarla como "mera" permite explotarla sin compensar a nadie (y ni siquiera citar su autoría), ya que se considera que estas imágenes pasan a ser de dominio público 25 años después de ser tomadas. Pero el trabajo de los fotoperiodistas merece un mayor reconocimiento, especialmente cuando las imágenes que han tomado se convierten en icónicas y parte de la memoria colectiva, como ésta del Vaquilla. Es una cuestión de dinero, por supuesto, pero también de respeto profesional.

stats