El sexo a los 50, según Carrie Bradshaw

BarcelonaUna serie de seis temporadas y dos películas (la última fuertemente vilipendiada por la crítica y los fans). Sexo en Nueva York parecía una franquicia a la que ya se le había sacado todo el jugo posible hasta que Sarah Jessica Parker y sus compañeras –con excepción de Kim Cattrall, que ha pasado página– decidieron que todavía había margen para explicar cómo son el sexo y las relaciones cuando se llega a los cincuenta. Acompañadas de Michael Patrick King como showrunner –fue productor y guionista de la serie original–, Carrie, Charlotte (Kristin Davis) y Miranda (Cynthia Nixon) vuelven enarbolando sus cócteles y abriéndose a un mundo que va más allá de su microuniverso de mujeres blancas solteras y cisgénero con And just like that, la nueva etapa de Sexo en Nueva York que se estrena este jueves en HBO Max.

Como le pasó a una de sus sucesoras más célebres, Girls, la comedia de Sarah Jessica Parker mostraba esencialmente una Nueva York poblada por personas blancas, un retrato alejado de la realidad de la ciudad, donde el 28,3% de la población es de origen latino, el 20,2% negro y el 15,6% asiático. La nueva incursión quiere enderezar la visión sesgada original con la incorporación de una serie de personajes destinados a hacer olvidar ese pecado original e intentar suplir la pérdida de la desinhibida Samantha. Sarita Choudhury interpreta a uno de los personajes más importantes de la nueva serie: ella es Seema Patel, una agente inmobiliaria de más de 50 años que no se ha casado nunca. Karen Pittman da vida a Nya Wallace, una profesora de la Universidad de Columbia a la que Miranda conocerá cuando empiece a estudiar un máster en derechos humanos, y Nicole Ari Parker da vida a una madre de una junta escolar que parece ser la mujer perfecta. Finalmente, Sara Ramírez, conocida por haber sido Callie Torres en Anatomía de Grey, es Che Diaz, una cómica de género neutral y bisexual que presenta un podcast en el que colabora Carrie. "Creo que es un personaje que representa el momento en el que está el mundo en términos de sexualidad y su exploración", explica Michael Patrick King.

Sarah Jessica Parker defiende que la falta de diversidad de la serie original se debía al hecho de que el material del que partían, las columnas de Candace Bushnell para el New York Observer, mostraban un mundo y un momento en el que esta cuestión no estaba presente. Por su parte, Cynthia Nixon, que además de actriz ha hecho carrera política y en 2018 se presentó a las primarias demócratas para ser candidata a las elecciones para gobernadora del estado de Nueva York, ha explicado que la falta de diversidad racial de Sexo en Nueva York la "horroriza". Las incorporaciones de este reboot pueden ser vistas como una operación cosmética, pero las tres actrices principales insisten en que los nuevos personajes tendrán entidad y no serán "accesorios".

Reivindicación de una comedia que fue rompedora

El aura de glamur que rodeaba la serie y el hecho de que fuera una comedia protagonizada por mujeres ha propiciado que la ficción haya sido históricamente minusvalorada. En realidad, Sexo en Nueva York, estrenada a mediados de 1998, rompió moldes presentando a cuatro mujeres que hablaban sin rodeos sobre sexo y que vivían con alegría (y también algún conflicto) su sexualidad. "Hay una visión revisionista de la serie como si ellas cuatro solo llevaran zapatos geniales y bebieran Cosmos. En realidad, el tapiz era mucho más complejo. Carrie tenía un affaire con un hombre casado cuando a las heroínas no se les permitía hacer una cosa como esta en una comedia. ¿En una drama? Sí, pero en una comedia nunca. Miranda se planteaba abortar. Samantha tuvo cáncer. Y el marido de Charlotte sufrió disfunción eréctil durante años. La realidad es que las tramas siempre han sido complicadas y chocantes, y continuaremos por este camino", asegura King, que remarca que en esta nueva temporada quieren demostrar que a los 50 todavía se está a tiempo de redefinir la vida que quieres vivir.

La idea de hacer una nueva temporada nació a raíz de las conversaciones entre Sarah Jessica Parker y Michael Patrick King durante el confinamiento para hacer un podcast en el cual explicar las intrahistorias de la serie original, un tipo de formato que se ha llevado a cabo con otras ficciones célebres como por ejemplo El ala oeste de la casa Blanca (el podcast The West Wing Weekly hacía un repaso de cada uno de los episodios del drama) o The Office (en Office Ladies Jenna Fischer y Angela Kinsley, las Pam y Angela de la comedia, comentan todos los capítulos de la serie que las hizo populares). Durante la lluvia de ideas sobre cómo hacer el podcast, la pareja se acabó preguntando por qué no empezaban a pensar en nuevas historias para los personajes, puesto que estaban convencidos de que todavía había cosas que se podían explicar.

"Soy una mujer de más de 50 años, así que tengo bastante claro que tu vida no acaba cuando encuentras o no a un hombre o a una mujer para compartir la vida, o cuando tienes hijos o no. Somos un ejemplo de que la vida no se acaba y que no se hace aburrida. Así que no dudé nunca de que podíamos explicar historias interesantes", asegura Kristin Davis. Las historias con las que quieren volver a enganchar a sus fans, sin embargo, las mantienen en secreto. El equipo solo ha hecho un pequeño spoiler: Samantha no está muerta, a pesar de que ya no recorra las calles de Manhattan con sus inseparables amigas.