Un titular de portada que atraviesa una línea roja

En el auca de la trifulca política existe una tipología de personajes bien entretenidos que los periódicos utilizan como arma arrojadiza contra sus enemigos. Son personas agravadas, o llenas de despecho, que amenazan con estirar la manta. Y sí, a veces debajo hay un cagallón denunciable, pero demasiado a menudo detrás de sus acusaciones e insinuaciones no hay más que el vacío de su rencor. Ahora bien, la prensa que los utilizaba de palanca solía mantener el mínimo decoro de respetar la presunción de inocencia y recordar en el titular que se trataba de una versión de parto. Pues no. La Razón ha atravesado esta peligrosa línea roja con su titular de portada del martes: "Koldo y Ábalos decían que parte de las comisiones «iban al partido»". En esa frase falta un elemento fundamental: el sujeto de la noticia, que es el empresario Aldama. Y también falta un verbo no menos esencial: dice. Escribiéndolo así, ya no es el comisionista quien dice lo que iban diciendo Koldo y Ábalos, sino que el diario se hace suya la afirmación. Y, por tanto, y en mi opinión, sería susceptible incluso de recibir una querella, por mucho que después el subtítulo permita inferir que se trata de una versión interesada de un tercero.

Mientras, al otro lado, los diarios sanchistas levantan su escudo y tanto El País cómo La Vanguardia escriben a sus titulares que Aldama no presenta pruebas de sus graves acusaciones. En este sentido, elAbc es más pícaro a la hora de hacer sangre. mordidas del 1,5% para el PSOE" es un titular que sortea la posibilidad de una demanda, aunque confiesa es un verbo elegido con mucha astucia, ya que presupone verdad. Lo cierto es que, en estos momentos, no sabemos si Aldama realmente confiesa o siquiera fabula, inventa, intoxica, miente, engaña o tabana.