El Ebro y Poniente, las zonas cero de un verano que puede ser de los más calurosos

BarcelonaEl verano llega oficialmente este jueves a las 22.51 horas coincidiendo con el solsticio veraniego, y la pregunta que se hace todo el mundo es evidente: ¿volverá a hacer tanto calor como en los últimos años? Hasta ahora, este junio el ambiente cálido se ha mantenido bastante a raya, sin llegar a extremo alguno, pero parece que este verano seguirá los pasos de los últimos y puede volver a ser uno de los más cálidos vividos en Catalunya desde que hay registros . Esto es lo que proyectan los mapas de temperaturas previstas entre julio y septiembre facilitados por el programa europeo Copernicus. Unos termómetros que quedarían claramente por encima de la media en el Mediterráneo y en toda la Península.

En este sentido, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha detallado en una rueda de prensa las previsiones estacionales y ha asegurado que el verano 2024 puede quedar entre el 20% de los más cálidos registrados hasta ahora. ''Hay una probabilidad bastante alta de que la temperatura de este verano sea muy superior a la normal'', ha explicado el portavoz de la agencia, Rubén del Campo. En este sentido, los mapas cifran en un 50% o 70% las opciones de que toda Catalunya sufra mucho más calor de lo normal este verano, datos que se elevan a casi el 100% en el sur del país. Unas previsiones que siguen la tendencia de calentamiento global acelerado en el actual contexto de crisis climática.

Esto es lo que indica el modelo europeo de previsiones a largo plazo, pero el modelo estacional americano también va en esa línea. En este sentido, los modelos climáticos de la Administración Atmosférica y Oceánica Nacional (NOAA) de Estados Unidos auguran un verano más cálido de lo normal en el conjunto de Cataluña, pero mucho más caluroso en el caso de las Terres de l'Ebre y de Ponente. Las temperaturas subirían especialmente en julio y agosto. Por el contrario, la zona que podría tener un verano más cercano a la media sería el noreste del país.

Si analizamos los datos a escala territorial, estas previsiones encajarían perfectamente con la distribución de las lluvias caídas antes del verano. Debemos recordar que la sequía ayuda a disparar más fácilmente las temperaturas, como se ha podido comprobar en los últimos años, y los mapas apuntan que allí donde puede más calor es precisamente donde ha llovido menos últimamente y donde la sequía territorial sigue siendo mucho grave. En concreto, el llano de Lleida y las Terres de l'Ebre.

Por tanto, hay que seguir con mucha atención hasta dónde se acaban subiendo las temperaturas. 2022 fue el año más cálido registrado nunca en Catalunya desde que se tienen datos, y en 2023 el segundo año más caluroso, con un verano muy tórrido. De momento este verano ha comenzado con temperaturas bastante normales para la época y sin calores a la vista.

¿Verano con poca lluvia?

En cuanto a las precipitaciones, los distintos modelos discrepan. El europeo sugiere que el verano sería más seco de lo normal en Catalunya, con una probabilidad del 50% de que este escenario acabe ocurriendo. Sin embargo, el modelo americano se decanta por un verano con las lluvias habituales para la época.

En Cataluña, el verano es una estación bastante seca, especialmente durante la primera mitad de la temporada. Ahora bien, también es cierto que son unos meses (sobre todo a partir de agosto) en los que las tormentas de tarde son habituales en el Pirineo y el Prepirineo. Por tanto, el modelo americano de predicciones deja entrever que las precipitaciones se mantendrían de forma más o menos regular en esta área del país. Esto sería una buena noticia para ir aportando agua a las principales cuencas internas.

En todo caso, se trata de previsiones a largo plazo que son una guía importante de futuro pero que deben interpretarse con precaución. Habrá que ir siguiendo la evolución de la previsión meteorológica semana tras semana, hasta el 22 de septiembre, para ver si las tendencias se acaban cumpliendo.