Anna Boldú

Formación

“Durante mi infancia estudié en Granollers, junto a Llerona, donde vivía, hasta que terminé el instituto. Después, en 2002 entré en la universidad para hacer administración y dirección de empresas en Esade, donde me gradué en 2007. Siempre lo había tenido claro y quería especializarme en marketing. En casa veo la parte de negocio de mi padre, pero el emprendimiento de mi madre. Recuerdo la etapa universitaria muy intensa, con mucho trabajo, pero también la disfruté mucho”

Trayectoria profesional

“Mientras estudiaba hice prácticas en Bacardí. Me gradué en el 2007 y después me llamaron para que me quedara en la empresa. Estuve allí hasta 2013 trabajando en la parte de marca, innovación y marketing. Cuando cerré la etapa hice de 'freelance', tenía algunas ideas pero ninguna acababa de cuadrar. Luego conocí a mis socios y vimos un nicho: crear una nueva forma de entender la sexualidad, y decidimos crear Platanomelón en 2015, un movimiento social, una marca de juguetes eróticos y de e-commerce líder en España”.

Un éxito

“Haber construido una compañía con personalidad fuerte y auténtica. Tenemos una visión muy clara de lo que queremos hacer”

Un fracaso

“Muchos. Pero en todo lo que nos hemos equivocado, nos ha hecho más fuertes y mejores”

Lecciones de vida

“Lo más sorprendente de Platanomelón es nuestra forma de comunicar y nuestra pasión a la hora de romper tabúes y educar, lo que ha hecho de la empresa un movimiento social. Tenemos más de dos millones de seguidores en las redes y es una de las mayores comunidades del sector del mundo. Todo esto se debe a nuestra vocación por democratizar la sexualidad”. “Emprender siempre tiene momentos de altibajos, el riesgo siempre existe. Pero hay que ser consciente, ir despacio y no correr más de lo que puedas permitirte. Hay que dar alma a los proyectos y tener una visión que mejore tu entorno, porque esto se traslada a toda la empresa“