Cataluña gana reservas de agua para dos meses gracias a las lluvias de marzo
Mascort confía en que las lluvias retrasen la entrada de Barcelona y Girona en la fase 2 de emergencia
BarcelonaLas lluvias y nevadas de marzo han nutrido un poco los embalses de las cuencas internas de Catalunya, que superan ya el 17% de su capacidad. Aunque el porcentaje todavía es bajo, las señales son optimistas: el agua acumulada alcanza ya los niveles de finales de diciembre –momento a partir del cual los pantanos empezaron a vaciarse sin freno– y las reservas siguen remontando tímidamente, hasta en recuperar los niveles perdidos en los últimos dos meses y medio. Esta tendencia es aplicable al sistema Ter-Llobregat, que ya está en el 17,75% de su capacidad.
Ahora bien, la fuerte sequía que se ceba con Catalunya no se enderezará con estas lluvias. El propio consejero de Acción Climática, David Mascort, avisó ayer de que para levantar la fase de emergencia deberían que las reservas alcanzaran un mínimo del 28%. “Si tenemos previsión de que haya lluvias y lleguemos a un porcentaje importante de las cuencas internas es posible que nos planteemos levantar la emergencia”, anticipó en una entrevista en Catalunya Ràdio, pero añadió que hay que llegar a niveles como los del año pasado en esta época del año.
Según Mascort, no tendría sentido levantarla con los embalses al 17% o 18% para volver a decretarla al mes y medio, dijo. “Si ocurriera lo mismo que ocurrió el año pasado en mayo y junio, que llovió mucho y nos salvó de la emergencia, podríamos plantearnos salir de la emergencia. Si tiene que llover un poquito, no”, concluyó el conseller.
Aplazar los barcos con agua
El agua de las últimas lluvias ha regado todas las cabeceras de la mayoría de las cuencas internas en todo su recorrido, especialmente las del norte, y se espera que el agua todavía siga llegando a los pantanos en los próximos días, sobre todo a medida que se vaya fundiendo la nieve en cotas altas. Pero los pantanos del sur no han notado prácticamente ninguna diferencia.
Ante esta tendencia, Mascort confió en que, si siguen dándose episodios de lluvia como los de estas semanas –se han recogido casi unos 13 hm³–, ni Barcelona ni Girona entrarán en fase 2 de emergencia en verano. Esto permitiría retrasar medidas caras y excepcionales como llevar agua en barcos. “No es la solución a la sequía. Es una medida puntual que serviría para los equipos indispensables que necesitan agua”, insistió. Por otra parte, el PSC pidió la comparecencia del conseller a la diputación permanente del Parlament para que dé explicaciones sobre la situación por la sequía.