Este artículo puede contener trazas de franquismo

Un módulo de la portada deLa Razóninforma de lo siguiente: "Los socialistas quieren llevar a los currículos escolares un plan antifranquista". ¡Inadmisible! ¡Intolerable! ¿Qué será lo siguiente? ¿Enseñar a los alumnos a resolver sus diferencias sin recurrir a las patadas en los testículos? Que consideren adoctrinamiento el enseñar que una dictadura no es un sistema político aceptable evidencia mucho el sustrato intelectual que nutre este medio. Que consideren denunciable mostrar toda la represión y la supresión de derechos que supuso el franquismo implica ponerse a un lado muy determinado de la historia. Y no es un lado amable. Dentro, el subtítulo es: "Sánchez busca llevar su plan anti-Franco" a las escuelas. Este uso del término anti-Franco me tiene fascinadísimo, porque se adivina una voluntad peyorativa. Como si al pobre Franco, así, tuviéramos que comprenderlo, matizar y, sobre todo, no olvidar quetampoco vivíamos tan mal.

Todo esto lo hace el mismo diario que hace unos años aplaudía hasta sangrar cuando el entonces ministro de Educación, José Ignacio Wert, anunciaba que se había propuesto "españolizar" a los alumnos catalanes. Aún hay quien busca en las páginas del diario de Planeta una denuncia por el adoctrinamiento que esto conllevaba. Entonces hubo varias tribunas de opinión en las que se retrataban las aulas como una dictadura monolingüe, aunque basta con haber pisado un poco el terreno para saber que el castellano está muy presente en las clases, al margen del papel mojado de la ley de inmersión. Españolizar muela. Democratizar ya no tanto. Y después el diario más pegado al PP se lamentará (con lágrimas de cocodrilo) por tener que pactar con Vox.