Osàcar insinúa que Mas conocía el blanqueo de dinero en CDC pero sitúa a Gordó al frente

El extesorero de CDC levanta la alfombra pero exculpa a Puig, Rigau, Macias, Flamerich y Trias

Montse Riart
5 min
L’extresorer de CDC Daniel Osàcar, a la Ciutat de la Justícia durant el judici del cas Palau.

BarcelonaEl extesorero de CDC Daniel Osàcar ha cambiado de estrategia de defensa. El hombre leal a Convergència que defendió al partido mientras Fèlix Millet y Jordi Montull confesaban la financiación irregular de la formación a través del Palau de la Música ha decidido ahora, después de sentirse abandonado por el partido y cambiar de abogado, que no tiene nada que perder. Osàcar está cumpliendo una condena –en tercer grado– de tres años y medio por este caso y tiene encima un nuevo juicio en la Audiencia Nacional por el caso del 3%, que investiga la adjudicación sistemática de decenas de obras públicas en Catalunya a cambio de comisiones que, según la Fiscalía Anticorrupción, también se embolsaba CDC. La semana pasada el extesorero convergent ya admitió ante el juez del caso el blanqueo de dinero por parte del partido. Este martes ha apuntado más alto en una nueva declaración en los juzgados. Según fuentes judiciales consultadas por el ARA, Osàcar habría insinuado que el expresidente Artur Mas tenía que estar al corriente de este sistema por el cual varios altos cargos de CDC blanqueaban el dinero de las comisiones que llegaban a la formación, teniendo en cuenta la jerarquía del partido y que el líder del sistema era su mano derecha, el ex conseller Germà Gordó.

La sentencia del caso Palau dio por acreditada la financiación irregular del partido a través de comisiones, pero ni la investigación del caso ni el juicio consiguieron ir más allá y la responsabilidad por estas operaciones ilegales se ciñió a los extesoreros Carles Torrent –muerto durante la instrucción del caso– y Daniel Osàcar. El juez de la Audiencia Nacional que pilota la investigación del caso del 3% ha llegado también al nivel de los extesoreros de la formación –además de Osàcar también está investigado su sucesor, Andreu Viloca–, y hace un tiempo consiguió dar un salto cualitativo relacionando a uno de los hombres de confianza de Mas, Gordó, con la supuesta trama. De hecho, la Audiencia Nacional ya ha procesado a Gordó por la financiación ilegal del partido y lo continúa investigando en otra pieza del caso por el blanqueo de las supuestas comisiones, junto con los ex consellers Jordi Jané, Felip Puig, Irene Rigau y Pere Macias.

Es en el marco de esta investigación donde ha declarado de nuevo Osàcar en la última semana. Su testigo implica un nuevo salto cualitativo que permite a los investigadores llegar al máximo nivel de responsabilidad del partido, uno de los objetivos de la Fiscalía Anticorrupción desde que asumió la causa del 3%. Según las fuentes consultadas, Osàcar ha sido especialmente contundente a la hora de explicar cómo funcionaba el sistema de blanqueo de comisiones y ha señalado a Gordó como el hombre que movía los hilos de todo el entramado. El extesorero ha avalado la tesis del juez y de la Fiscalía que considera que, durante años, el partido habría ingresado comisiones irregulares a cambio de adjudicaciones en obra pública –en la etapa en la que CDC lideraba la Generalitat– y a cambio de tratos de favor en el momento en el que ya estaba en la oposición.

El extesorero de CDC no ha dudado en apuntar que Gordó era quien lideraba el sistema, pero ha sido más sibilino cuando se le ha preguntado si Mas, entonces secretario general del partido, estaba al corriente. Osàcar ha reconocido que no tiene ninguna prueba material, porque nadie se lo había dicho nunca directamente pero –según las fuentes consultadas– ha recordado que Convergència era un partido muy jerarquizado y que Mas despachaba diariamente con Gordó –que entonces era el gerente del partido–. También ha apuntado a la ascendencia que tenía el ex conseller como hombre fuerte del partido y como mano derecha del ex president, y lo ha ejemplificado recordando que Gordó no solo era el gerente del partido sino que, más tarde, fue designado "nada más y nada menos" que como secretario del Govern de Mas. Otra cosa es hasta qué punto esta declaración da herramientas a la Fiscalía para poder pedir que se investigue al ex president de la Generalitat.

Jané y Crespo, también señalados

La declaración de Osàcar no ha acabado aquí. De hecho, el juez José de la Mata y el fiscal de Anticorrupción José Grinda se han desplazado desde Madrid a Barcelona para volver a tomar declaración al extesorero convergent, después de constatar la semana pasada el cambio de estrategia de Osàcar, que hizo evidente que estaba dispuesto a levantar la alfombra. Su primera declaración, sin embargo, se quedó a medias por problemas técnicos con el sistema de videoconferencia. Según las fuentes consultadas, más allá de constatar el sistema de blanqueo de comisiones irregulares en el partido, Osàcar ha señalado que varios cargos del partido hacían transferencias a la formación –en forma de donaciones y cuotas de afiliados– y que él mismo, como tesorero, les devolvía el dinero en metálico.

Entre los excargos que hacían estas aportaciones, Osàcar ha señalado al ex conseller de Interior Jordi Jané y al exdiputado de CDC en el Parlament y exalcalde de Lloret de Mar Xavier Crespo, un viejo conocido para la Fiscalía Anticorrupción, que ya lo investigó por haber aceptado sobornos de un empresario ruso a cambio de la tramitación de un proyecto urbanístico en Lloret. El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) ya lo inhabilitó durante nueve años, pero después el Tribunal Supremo rebajó la condena a dos años y medio de inhabilitación.

En cambio, según las fuentes consultadas, el extesorero de CDC ha exculpado claramente a otros excargos del partido investigados por el juez, como por ejemplo los ex consellers Felip Puig, Irene Rigau, Pere Macias, el exalcalde de Barcelona Xavier Trias o el expresidente del Cesicat Carles Flamerich. Según ha declarado Osàcar, todos ellos rechazaron implicarse en el sistema y recibir el dinero en metálico. La defensa de Rigau ya ha avanzado que pedirá a la Audiencia Nacional que archive su parte de la investigación. Osàcar también ha insistido enque él nunca se quedó ni un solo céntimo. De hecho, la sentencia del caso Palau de la Música lo situaba como una de las patas del sistema de trasvase de las comisiones ilegales al partido a través de la institución cultural, pero lo exculpaba de haberse embolsado dinero por participar en el sistema, a diferencia de Millet y Montull.

Este martes al exresponsable de las finanzas convergents también le han preguntado por el origen de las comisiones que supuestamente se blanqueaban en CDC. Según las fuentes consultadas, el extesorero ha explicado que desconocía el listado de empresarios que hacían donaciones al partido y que quien lo controlaba era Gordó. El próximo lunes el juez tiene previsto volver a interrogar al sucesor de Osàcar en el cargo de tesorero, Andreu Viloca, uno de los primeros detenidos por el caso 3%.

stats