Mas de Enric incumplió el protocolo de reincidencia con el preso que mató a la cocinera
El equipo de tratamiento habría tenido que realizar un test de evaluación al delincuente cuando agredió a otro interno cuatro meses antes del crimen
Barcelona / TarragonaEl crimen de la cárcel de Mas de Enric cogió a todos por sorpresa: ha sido el primer caso de la historia penitenciaria catalana en el que un recluso mata a una trabajadora. No era un preso recién llegado. ISO había entrado en el centro ocho años antes de matar a navajazos a la cocinera de la cárcel y suicidarse en el mismo lugar donde trabajaban los dos juntos. ISO había ingresado en Mas de Enric de forma provisional el 26 de abril del 2016 por el asesinato a cuchilladas de otra mujer, un crimen por el que le condenaron el 1 de junio del 2018. Durante los seis años que pasaron entre la sentencia y el segundo crimen, sólo tuvo otra conducta violenta, apenas cuatro meses antes de que matara a la cocinera: dio un puñetazo en la cara a otro preso. Sin embargo, parece poco importante, según ha podido saber el ARA, cuando cometió esta agresión la cárcel incumplió el protocolo de reincidencia.
Quien tiene la última palabra sobre si un preso como ISO puede trabajar, en una cárcel, es la Junta de Tratamiento, formada por juristas, psicólogos, educadores y trabajadores sociales, entre otros. Antes, un equipo multidisciplinar, que ve el día a día del recluso, también emite un informe. Sin embargo, desde el año 2009 estos equipos utilizan una herramienta para ayudarles a tomar la decisión. Se llama RisCanvi y es un test que, con un algoritmo, prevé qué riesgo tiene cada interno de reincidir. Este riesgo puede ser bajo, medio o alto. El ARA ha tenido acceso a la normativa que marca el uso de esta herramienta y el protocolo es claro: cada seis meses debe realizarse una reevaluación. Y hay que volver a hacer si dentro de este período existe un "evento crítico".
El interno ISO fue evaluado con RisCanvi hasta 14 veces desde 2016 y en todas las ocasiones menos una (en 2020, en pleno confinamiento) el resultado fue que el riesgo de reincidencia era bajo. Sin embargo, la última evaluación fue el 13 de julio del 2023, y tras la agresión al otro preso, el 31 de octubre del 2023, no se le hizo ninguna reevaluación. Tanto fuentes internas de Mas de Enric como de la conselleria de Justícia confirman a este diario que no se siguió correctamente el protocolo y que, por tanto, se cometió un error. La agresión a otro preso se considera un "evento crítico" como los que indican que es necesario realizar un nuevo test RisCanvi.
De hecho, había dos razones que llevaban a realizar una nueva evaluación de reincidencia con el algoritmo. "La aparición por primera vez de una conducta agresiva" dentro del centro y un "cambio de actitud o conducta importante". Son dos supuestos que marca la normativa y después los equipos de tratamiento deben valorar la reevaluación. Tanto fuentes de Justicia como de la cárcel confirman que debería haberse hecho. Cuando, el 5 de enero de 2024, tras el puñetazo, la Junta de Tratamiento aprobó que ISO volviera a trabajar en la cocina, lo aprobó con unos resultados del RisCanvi que no estaban actualizados y que todavía indicaban que el riesgo de reincidencia era bajo. Hay que decir, sin embargo, que la Junta podría haber aprobado igualmente que el preso volviera al trabajo aunque el resultado de la reevaluación hubiera indicado que el peligro era medio o alto, pero la decisión se tomó sin esa información.
El RisCanvi, creado por un equipo de investigadores de la Universidad de Barcelona, tiene en cuenta hasta 43 factores de cada recluso, como, por ejemplo, su nivel de hostilidad y su capacidad para realizar planes razonables de futuro. Intenta predecir las probabilidades de que un recluso se autolesione, que cometa un delito violento, que cometa cualquier delito o, como ocurrió en Mas d'Enric, que pueda atacar a otro interno oa un trabajador del centro. Quien realiza este test es el equipo multidisciplinar que trata habitualmente al preso, y en el caso de ISO no se siguió el protocolo. Desde Justicia precisaron este lunes que los técnicos de la cárcel no consideraron un evento crítico esta agresión. Fuentes internas de la cárcel tarraconense precisan que en ese momento la psicóloga responsable de hacerlo estaba de baja y que nadie de la dirección les avisó de que había que volver a realizar la prueba. Es decir, no llegó a valorarse. La normativa marca que los subdirectores de tratamiento "son responsables de la organización de la labor de los equipos multidisciplinares en el centro" y de "supervisar la evaluación de riesgo", "de acuerdo con las directrices".
Sea como fuere, la cárcel no siguió el protocolo y nadie acabó haciendo ni ordenando la reevaluación con esta herramienta clave, aunque no definitiva. El RisCanvi a menudo ha estado en el centro de la polémica y no está visto con buenos ojos por todos los sectores penitenciarios. El profesor del departamento de tecnologías de la información y la comunicación de la Universidad Pompeu Fabra Carlos Castillo explicaba a este diario que con ese algoritmo "las posibilidades de reincidencia se estiman a la baja". También alertaba, por ejemplo, de que no es tan preciso con los subgrupos, como las mujeres, que representan a un 10% de la población penitenciaria. Sin embargo, según sus creadores, el RisCanvi tiene una alta capacidad predictiva, del 72%.
Volver al trabajo
Tras la agresión a otro preso, la Junta de Tratamiento consideró el 5 de enero, sin el RisCanvi actualizado, que ISO podía volver a trabajar en la cocina. A los 68 días asesinó a la cocinera. Pero ya había trabajado antes. De hecho, 48 horas después de la agresión al otro interno, habiendo pasado unas horas en el departamento de sancionados, ISO ya volvía a trabajar en la cocina. Y esto provocó tensiones internas en Mas de Enric. Una semana más tarde, el 7 de noviembre del 2023, abandonó la cocina hasta que lo readmitieron a raíz de la evaluación sin el RisCanvi actualizado del 5 de enero del 2024. En el expediente del preso consta que dejó la cocina porque cogió una baja voluntaria, pero fuentes internas de la cárcel señalan que, con el protocolo en la mano, ante una agresión a otro peso habría tenido que expulsársela directamente del trabajo. Sin embargo, fuentes de Justicia aseguran que en este caso el protocolo sí se aplicó correctamente y que, aunque en el expediente ponga que salió de la cocina por una baja voluntaria, de hecho fue expulsado de forma ejecutiva tal y como marca la normativa.
Por la agresión, el 14 de diciembre de 2023 ISO fue sancionado a 11 días de aislamiento en la celda, sanción que, cuando mató a la cocinera, todavía estaba pendiente de ejecutar. Fuentes de Mas de Enric señalan que la trayectoria del preso no fue ejemplar, porque nunca reconoció el delito por el que estaba entre rejas ni quiso realizar un programa de reinserción. Además, según las mismas fuentes, no pagó la indemnización a la familia de la víctima. Sin embargo, tenía dinero: el ARA ha podido comprobar que en su cuenta de la cárcel tenía 8.203 euros.