'Heartstopper' se enfrenta ahora a las dificultades de salir del armario

BarcelonaEn abril del año pasado, Heartstopper se convirtió en todo un fenómeno entre la comunidad queer (entró en el top 10 de Netflix en 54 países) y sirvió para visibilizar una realidad que muchos seguidores de la serie no han podido vivir: el amor correspondido en la adolescencia entre personas LGTBIQ+. La historia de Nick (Kit Connor) y Charlie (Joe Locke) robó el corazón a los espectadores por la ternura y la luminosidad con la que estaba contada, y pocos meses después del estreno Netflix ya confirmaba una segunda y tercera entregas. Ahora Heartstopper vuelve a la plataforma con una segunda temporada que reanuda la relación entre los dos adolescentes y leo enfrenta a las dificultades de salir del armario.

Basada en la saga de novelas gráficas homónimas de Alice Oseman, la dramedia reflejará la homofobia que los protagonistas sufren en los pasillos del instituto, en gran parte propiciada por Harry (Cormac Hyde-Corrin), un alumno rico y privilegiado. A lo largo de los ocho episodios, Charlie también tendrá que aprender a gestionar el vínculo con su ex, Ben (Sebastian Croft), que le traerá algunos problemas. Y Nick verá cómo no basta con salir una vez del armario. Pese a que en la primera temporada ya confesó a su madre que es bisexual, se dará cuenta de que no todo el mundo a quien lo revele lo recibirá de la misma forma y de que algunas reacciones pueden ser muy negativas. Pero la pareja vivirá sobre todo momentos bonitos y memorables: viajará a París con la clase y se empapará de la libertad de la capital francesa al descubrir que las parejas homosexuales demuestran su amor en la calle sin miedos.

Buena parte de los personajes secundarios de la primera temporada repetirán en esta nueva entrega. Elle (Yasmin Finney) y Tao (William Gao) se encontrarán con la posibilidad de que su relación vaya más allá de la amistad, pero tendrán que decidir qué prefieren hacer: si arriesgarse a dar un paso más o quedarse en el espacio de confort que hasta ahora han ocupado. Tara (Corinna Brown) y Darcy (Kizzy Edgell) verán cómo cada una de ellas se encuentra en un punto diferente del enamoramiento y tendrán que aceptar que, cuando hay sentimientos de por medio, no se puede tener todo calculado y controlado. Todo ello con la dificultad añadida de mantener la amistad entre el grupo de jóvenes mientras experimentan los altibajos de los enamoramientos de la adolescencia.

La segunda temporada de Heartstopper recuperará al personaje de James McEwan (Bradley Riches) y le dará una trama relevante que Netflix mantiene en secreto. Entre las nuevas incorporaciones se encuentra Leila Khan, que interpretará a Sahar Hadid, una antigua amiga de Imogene Heaney (Rhea Norwood) que reaparecerá durante el viaje a París. Jack Barton encarnará a David Nelson, el hermano mayor del Nick, y Nima Taleghani se sumará al grupo de profesores del instituto Truham, donde asisten todos los protagonistas.

El impacto en la vida de los actores

El éxito de Heartstopper transformó las vidas de sus protagonistas, Kit Connor y Joe Locke, que apenas tienen 19 años. El impacto fue mayor en el caso de Kit Connor, que mantenía en la intimidad su identidad sexual. Tras estrenar la serie, numerosos fans lo acusaron de queerbaiting y Connor se vio obligado a contar, a través de Twitter, que era bisexual. "No creía que millones de personas estarían interesadas en mi vida privada", señala el actor en una entrevista en el diario británico The Guardian. Pese al malestar de esa experiencia, ahora ambos celebran la popularidad de la serie y dicen que los ha hecho mejores: "Me siento más confiado en mí mismo, en quién soy y en todo lo que puedo hacer. Tengo mucho más orgullo ahora que antes", subraya Connor.