El mal trago de HBO: series atrasadas, crisis de modelo y cuentas de Twitter falsas
Las huelgas de guionistas y actores han puesto en peligro algunos de los títulos más conocidos de la plataforma, que este 2024 pasará a llamarse Max
BarcelonaMalos tiempos para HBO, que desde hace unos meses está inmersa en una crisis de modelo y prestigio cada vez más profunda. En las últimas semanas, los problemas en la plataforma se han agravado por el anuncio del retraso de las nuevas temporadas de algunas de sus series más conocidas y la revelación de que el máximo dirigente de la compañía, Casey Bloys, estaba detrás de perfiles falsos de X que atacaban a periodistas que hacían malas críticas de sus ficciones. A todo esto hay que sumarle la decisión de abandonar la marca histórica y reconocida HBO y cambiar el nombre de la plataforma de HBO Max a simplemente Max (el nuevo servicio, que ya funciona en EE.UU., combina contenidos de HBO Max y de la plataforma Discovery +).
HBO Max lucha por encontrar su sitio dentro de Warner Bros Discovery, que arrastra miles de millones de dólares de deuda desde que en 2022 se hizo oficial la fusión entre Warner Media y la televisión por cable Discovery. Los resultados económicos del tercer trimestre del grupo, hechos públicos el miércoles, muestran una reducción de las pérdidas, pero su servicio de streaming no despunta. La compañía ha perdido un total de 700.000 suscriptores, en parte debido a la decisión de combinar los contenidos de Discovery+ con HBO: el primero todavía opera de forma individual y, por tanto, hay clientes que estaban suscritos a ambos servicios que han terminado renunciando a Discovery+ y quedándose solo con Max. Así, Warner Bros Discovery ha perdido suscriptores por el lado de Discovery+ y no los ha ganado por el lado de Max.
En los próximos meses HBO tendrá que ingeniárselas para atraer al público sin contar con algunas de las series con más tirón de su catálogo, que han tenido que retrasar las nuevas entregas en parte debido al impacto de las huelgas de guionistas y actores, ahora ambas resueltas. Teniendo en cuenta ambas huelgas, la industria ha estado detenida prácticamente siete meses. En la presentación de las novedades de la nueva temporada, Casey Bloys echó agua al vino y anunció que tanto Euphoria como The white lotus y The last of us no tendrán nueva temporada hasta el 2025. También ha quedado fijado para dentro de dos años el estreno de la precuela deIt: Welcome to Derry, título inicialmente previsto para Halloween del 2024. El retraso de series es un problema para una plataforma que, pese a los baches, todavía es vista como sinónimo de calidad televisiva: de las ocho nominadas al mejor drama, cuatro producciones son suyas –La casa del dragón, Sucsession, The last of us y The Crown.
Seguramente el retraso menos sorprendente de todos es el de la tercera temporada de Euphoria, que hacía tiempo que ya se rumoreaba. En este caso, además de las huelgas de actores y guionistas, cabe sumar las complicadas agendas de los implicados en la ficción, como explicó la responsable de series dramáticas de la plataforma, Francesca Orsi, en mayo. En 2023 Sam Levinson, creador de la serie, estrenó su nuevo proyecto de ficción para HBO, The Idol, uno de los grandes fracasos de la plataforma esta temporada, que se canceló después de la primera entrega. Por su parte, Zendaya es una de las estrellas más demandadas del momento. Hacer converger las agendas de todo el equipo es ciertamente difícil. Si realmente la tercera entrega se estrena en el 2025, habrán pasado seis años desde el debut de la serie en HBO.
En el caso de The white lotus, la causa del retraso es la huelga de guionistas y la de actores: la producción de la tercera temporada arrancó antes de que empezara el paro de guionistas, pero el conflicto laboral obligó a dejar en pausa la serie. Aun así, Mike White, creador de la serie, ya tiene claro cuál será el argumento de la nueva entrega, que se trasladará a Tailandia y será una "exploración de la espiritualidad versus el ego". En una entrevista reciente en Entretainment Weekly, el creador explicó que ya tenía terminados los guiones y que estaba esperando el fin de la huelga de actores para poder empezar a elegir el reparto.
Más allá del retraso del estreno de series, en los últimos meses HBO ha iniciado una política de licenciar sus contenidos en Netflix, una estrategia que ha hecho que algunos de sus títulos más conocidos, tales como A dos metros bajo tierra, Ballers o Insecure, ahora se puedan ver también en la plataforma rival. El movimiento, que inicialmente iba a contracorriente del sector, es sorprendente por el hecho de que un catálogo bien nutrido es un activo a la hora de captar nuevos suscriptores. Sin embargo, el acuerdo con Netflix aporta unos ingresos extras que HBO necesita. Casey Bloys ha defendido esta política asegurando que durante años la sindicación de contenidos ha sido práctica habitual de la televisión convencional. "Tenemos que proteger nuestras series de éxito, pero he trabajado tiempo suficiente en televisión para saber que la sindicación solía ser el gran premio al que aspiraban", resumió.
Cuentas de Twitter falsas
Que en HBO hay cierta inquietud por sentir que están perdiendo parte de su fortaleza ganada con algunos de los títulos que conforman la prestige TV se ha hecho evidente con la revelación de que en el 2020 Bloys creó perfiles de Twitter falsos para acosar a periodistas que hacían malas críticas de las series de la plataforma. La estrategia, que se reveló a raíz del juicio por despido improcedente de un ex trabajador de HBO, la puso en marcha el propio Bloys, molesto por un tuit contra Perry Mason que había hecho la crítica de la revista Vulture Kathryn VanArendok. La plataforma creó una cuenta falsa –en teoría propiedad de una madre vegana de Texas– que se dedicaba a responder a las críticas negativas de las series de HBO que hacían periodistas como Alan Sepinwall, de Rolling Stone, o James Poniewozik, del New York Times.
Ante la evidencia, Bloys se vio obligado a reconocer esta práctica y pidió disculpas públicamente, aunque previamente justificó su decisión. "Quiero que nuestras series sean muy buenas... para mí es muy importante lo que pensáis sobre nuestras series", dijo ante los periodistas que asistieron a la presentación de temporada. Y a continuación añadió: "Tened en cuenta esta mentalidad y luego pensad en el 2020 y el 2021: estaba teletrabajando y pasaba una gran cantidad de tiempo muy poco saludable haciendo scroll en Twitter. Y se me ocurrió una idea increíblemente tonta para liberar mi frustración".