Seat cierra el servicio de moto compartida en Barcelona
La compañía argumenta los elevados costes y la falta de rentabilidad
BarcelonaSeat Mó, la filial de movilidad de la automovilística Seat, ha decidido poner fin al servicio de moto compartida de la ciudad de Barcelona, que empezó a funcionar en 2020. A partir del 1 de marzo la compañía dejará de prestar servicio de motorsharing en la capital catalana, según ha informado la propia empresa a través del mail y la app a sus usuarios.
La decisión obedece, básicamente, a dos aspectos. Por un lado, los elevados costes operativos del negocio y, por otro, la falta de rentabilidad, según fuentes de la compañía. Estas mismas fuentes han dicho que Seat "seguirá trabajando para ofrecer opciones de movilidad adaptadas a las necesidades actuales del mercado".
"Después de muchos viajes compartidos, ha llegado el momento de conducir hacia nuevas aventuras", indicó la compañía a los usuarios. En la comunicación se asegura que a partir del 1 de marzo se dejará de prestar el servicio de motorsharing en Barcelona: "Juntos hemos realizado más de 1,8 millones de viajes, 24,7 millones de minutos (17.133 días) y hemos podido contribuir juntos a mitigar el cambio climático gracias a las 230 Tn de CO2 que hemos ahorrado con las nuestras soluciones de movilidad eléctrica".
La compañía también dice que los usuarios pueden consumir el crédito de viajes que tengan hasta el 29 de febrero y, en caso de no consumirlos, el importe equivalente será reintegrado a la tarjeta de crédito de cada usuario ligada al aplicación en un máximo de treinta días. La compañía asegura que mantendrá operativo al equipo de atención al cliente hasta el 31 de marzo, al tiempo que ofrece a sus clientes las motos de Seat: "Nuestros e-scooters continuarán disponibles para la venta al mejor precio y condiciones de financiación para ti en nuestra web".
Seat Mó era una de las empresas operadoras que recibieron una adjudicación de licencia para operar el servicio de motosharing convocado por el Ajuntament de Barcelona. El concurso levantó polémica por la limitación a las flotas de cada operador, que fueron repartidas con el mismo número de motos aunque había empresas que ya estaban ofreciendo el servicio de alquiler por minutos. Sin embargo, las licencias correspondientes a algunas de las empresas operadoras que renunciaron a ellas o que cerraron los meses anteriores fueron recolocadas entre el resto.
Barcelona era la única ciudad donde funcionaba Seat Mó con el motosharing. Seat ya protagonizó una experiencia en el servicio de coches de alquiler mediante la compra de la empresa Respiro de Madrid, que finalmente cesó su actividad también por falta de rentabilidad.