El 24 de agosto, Ucrania celebra su 33º aniversario como una nación libre, soberana e igualitaria en la arena mundial. Esta conmemoración es posible gracias a las Fuerzas Armadas de Ucrania y al apoyo de los países que respetan los principios de democracia, derechos humanos, libertad, igualdad, la dignidad humana y el estado de derecho.
Desde el 24 de febrero de 2022, hemos enfrentado sufrimientos, pérdidas y destrucciones inimaginables. La ocupación rusa ha causado muertes, torturas, heridas y ha desplazado a millones de personas, 40 mil de las cuales han encontrado refugio en Cataluña.
El mundo es testigo de asesinatos crueles y genocidio en los territorios ocupados, el chantaje nuclear derivado de la ocupación de la Central Nuclear de Zaporiyia, las consecuencias del ecocidio en las zonas aledañas a la presa destruida de Kajovka, la necesidad de recuperar a los niños y adolescentes transferidos ilegalmente a diferentes regiones de Rusia, la liberación de prisioneros civiles y soldados, y el desminado humanitario. Esta lista, lamentablemente, no está completa.
Aún no hemos alcanzado la victoria y el agresor no ha asumido la responsabilidad por sus acciones. Al contrario, Rusia continúa lanzando ataques con misiles y drones sobre nuestras ciudades, causando nuevas víctimas entre la población civil y dañando infraestructuras críticas. El último caso fue el brutal bombardeo del hospital infantil "Okhmatdyt" en Kyiv el 8 de julio, que resultó en 33 muertos y más de 100 heridos, muchos de ellos niños.
Por muy difícil que sea, no podemos permitirnos el lujo de cansarnos de luchar. El pueblo ucraniano demuestra ejemplos de alto heroísmo, resistencia y devoción a la Patria, tanto en el campo de batalla como en la retaguardia. Los voluntarios dentro y fuera del país, respaldados por la comunidad internacional, incluidos Barcelona y Cataluña, también juegan un papel crucial en esta lucha.
Hacemos un llamamiento al mundo para que no se canse de brindarnos su apoyo militar, el cual ha evolucionado desde los sistemas portátiles NLAW hasta el suministro de tanques "Leopard" y aviones de combate F-16. Asegurar la victoria de Ucrania es la mejor manera de acercar la paz, prevenir una guerra más amplia en Europa y evitar una reacción en cadena de conflictos en todo el mundo. No podemos permitir que la agresión se convierta en la norma.
Esto se refleja claramente en las palabras de la ministra de Defensa de España, Margarita Robles, durante la presentación del libro de Sor Lucía Caram “Invitados a reconstruir” en Barcelona en febrero de 2024. La Sra. Robles expresó su convicción de que Ucrania ganará la guerra porque defiende una causa justa, y en el siglo XXI no se puede tolerar a dictadores y autócratas como Putin.
Siendo miembro de organismos internacionales, Ucrania está tratando de utilizar sus instrumentos para resolver los problemas que han surgido. Sin embargo, se ha hecho evidente para todos que solo una pequeña parte de los mecanismos existentes puede ser eficaz en estas circunstancias. Precisamente por esto, estamos buscando nuevas vías para enfrentar los desafíos actuales.
Una de las propuestas elaboradas es la visión del fin de la guerra basada en la Fórmula de Paz del Presidente Zelenskyy. La Cumbre de Paz para Ucrania, celebrada el 16 de junio en Suiza, concluyó con una declaración que incluye tres puntos relevantes: la seguridad nuclear, el tránsito marítimo seguro y el llamamiento a la liberación de los prisioneros de guerra en Ucrania. La idea de la Cumbre es sentar las bases para establecer una paz justa y duradera en nuestro continente.
Esto concierne a toda Europa, ya que Ucrania continúa implementando su proyecto de integración europea, que es fundamental en nuestra política exterior. Nos guía el lema de altos cargos de Bruselas, como Josep Borrell y Ursula von der Leyen, quienes hablan de una "Europa desde Lisboa hasta Luhansk". Según las últimas encuestas, el 90% de los ucranianos desean ver a su país en la UE para 2030.
Nosotros continuamos dando pasos firmes en esta dirección. En junio, se celebró la primera Conferencia Intergubernamental entre Ucrania y la UE, marcando el inicio de las negociaciones formales sobre la adhesión de Ucrania a la Unión Europea. Estamos llevando a cabo acciones concretas en nuestra integración, tales como la cooperación en el marco del Ukraine Facility, nuevos programas de Erasmus+, la adopción del 14º paquete de sanciones contra Rusia, y la decisión de la UE sobre el uso de los beneficios netos obtenidos por los depositarios centrales de valores rusos para seguir apoyando militarmente a Ucrania, fortalecer nuestra capacidad de defensa y contribuir a la reconstrucción del país, entre otros.
Me complace que Cataluña no se mantenga al margen de estos procesos. Nos da mucho ánimo la solidaridad mostrada por el Parlamento de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona, la Delegación del Gobierno, así como por las personas comunes hacia el pueblo ucraniano y la comunidad ucraniana en Cataluña. Entre las acciones más recientes podemos destacar el festival de La Mercè 2023, donde Kyiv fue la ciudad invitada, la participación de nuestras delegaciones comerciales en ferias en Barcelona, proyectos de cooperación interuniversitaria, proyecciones de películas ucranianas, exposiciones de obras de artistas destacados, las vacaciones de los niños de las regiones más afectadas por la guerra en Cataluña, y muchas otras iniciativas. Esperamos contar con más apoyo en la implementación de otros proyectos que enriquezcan el patrimonio europeo y contribuyan a su diversidad.
Precisamente por esto, con amor a nuestra tierra natal y a la vida, juntos somos invencibles. Las democracias deben mantenerse unidas y movilizar todo su poder para restaurar una paz justa para Ucrania. Durante todo este tiempo, contamos con estar codo a codo con nuestros aliados, incluida España.