Ábalos, el primer sanchista que planta frente al líder
Siempre estuvo junto a Sánchez en las primarias del 2014, del 2017 y recibió el premio de ser ministro
MadridSi la XV legislatura se cumple entera, José Luis Ábalos (Torrent, 1959) podrá jubilarse cuando deje de ser diputado, una vez este martes ha decidido aferrarse al cargo que sea en el grupo mixto. Será toda una vida ligada a la política y desde 1981 en el PSOE –del que será expulsado de forma inminente–, al que recaló tras una primera experiencia en el PCE. El último tramo de esta trayectoria ha sido de la mano de Pedro Sánchez, de quien se convirtió en el principal escudero cuando aspiró a la secretaría general del PSOE en 2014 y 2017. Esta fidelidad le trajo premio: fue secretario de organización del partido y ministro de Fomento, hasta la remodelación del año 2021, precisamente la etapa que ha terminado manchada de la sombra de corrupción por el caso de las mascarillas.
La decisión de mantenerse en el Congreso en contra del criterio unánime de su partido rompe con el espíritu de lealtad y fidelidad a Sánchez que le ha caracterizado en los últimos años, pero se corresponde con su condición de superviviente. En el Partido Socialista del País Valenciano (PSPV) protagonizó mil y una batallas internas y supo moverse por no caer del barco. En el 2000 salió derrotado de las primarias en la secretaría general contra Joan Ignasi Pla, pero logró ser el número 2, y entre 2012 y 2017 fue el líder del PSPV en la provincia de Valencia.
Hijo de un torero republicano, tiene siete hermanas. Es maestro de educación primaria en excedencia y doctor honoris causa por la Universidad de San Pedro de Chimbote (Perú). Se especializó en cooperación internacional y en el fortalecimiento institucional de América Latina, pero toda su vida le ha dedicado a la política. Más allá de la vida orgánica, Ábalos estuvo a la sombra en varios cargos de la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento de Valencia, hasta su concejal (1999-2009) y diputado en las Cortes Valencianas (2003-2007) ).
El salto a la arena estatal como diputado en el Congreso arrancó en el 2009, el mismo año que lo hizo Sánchez. En Madrid empezó el vínculo entre ambos, que ahora rompe un escándalo de corrupción que afecta a su polémico exasesor, Koldo García, al que llegó a través del navarro Santos Cerdán. El ahora número 3 del partido y sucesor de Ábalos como secretario de organización, le conoció en el PSOE de Navarra.
1-O y moción de censura
Accedió al ministerio de Transportes tras la moción de censura del 2018 a Mariano Rajoy, que defendió desde la tribuna del Congreso. "No ha tenido la decencia de dimitir", le dijo al expresidente del gobierno español y del PP, que aparecía en los papeles de Bárcenas vinculados al caso Gürtel. Unos meses antes, el entonces portavoz del PSOE también ponía cara a la primera reacción de su partido en la jornada del 1-O y evitaba criticar la violencia policial ordenada por Rajoy.
Su paso por el gobierno español estuvo marcado por el caso Delcy Rodríguez, la exvicepresidenta de Venezuela que puso un pie en el aeropuerto de Barajas pese a tener prohibida la entrada en el espacio Schengen. En la remodelación de gobierno de julio del 2021, Sánchez prescindió de nombres importantes que le habían acompañado como la exvicepresidenta Carmen Calvo, su exjefe de gabinete Iván Redondo y también el propio Ábalos, que como blanco de las críticas de la de pie se había convertido en un elemento de desgaste para un PSOE que necesitaba una imagen de renovación. Sin embargo, Ábalos no fue defenestrado por completo y en las elecciones del 23-J repitió como diputado. Ahora se aferra hasta el final.