Casado alaba la estrategia de Rajoy con el Estatut y llama a aplicarla contra los indultos

Empieza a recoger firmas contra los indultos y rechaza las críticas para volver a la foto de Colón

El líder  del PP, Pablo Casado, durante un almuerzo informativo organizado por Europa Press.

MadridHay muchos Pablo Casado. El líder del PP ha ido cambiando constantemente de discurso en función de las necesidades. También ha pasado con Pedro Sánchez, que hace un año y medio defendía que los presos políticos tenían que cumplir la pena íntegra. Pero ante el escenario de la concesión del indulto a los líderes independentistas, el jefe de la oposición ha vuelto al discurso más duro y cercano a la extrema derecha, si hace falta. Ha vinculado a Sánchez otra vez con ETA y Venezuela y ha considerado que se trata de un ejecutivo "terminal, rehén de los que quieren destruir España" por haberse mostrado a favor de los "autoindultos ilegales" para "seguir en el poder". Lejos queda el duro discurso contra Santiago Abascal en la moción de censura fallida de Vox, celebrada el otoño pasado en el Congreso.

Un almuerzo informativo organizado por Europa Press se ha convertido este martes en la tribuna de la estrategia que piensa aplicar el PP en contra de la medida de gracia. Y el caso es que los populares, cuando se trata de Catalunya, no tienen problemas en ser los de siempre, aunque para Casado signifique recuperar la figura de Mariano Rajoy -de quien tanto se ha apartado en los últimos meses-. El líder del PP ha alabado la estrategia de su predecesor contra el Estatut en 2006 con la recogida de firmas y el posterior recurso ante el Tribunal Constitucional -que algunos cargos del partido, incluso Esperanza Aguirre pero también Soraya Sáenz de Santamaría y Xavier García-Albiol, consideraron un error a posteriori por haber alimentado el independentismo- y ha llamado a aplicarla contra los indultos. "Lo volveríamos a hacer", ha aseverado.

Casado también ha defendido su asistencia, junto a Abascal otra vez, a la manifestación prevista para el 13 de junio en la plaza Colón de Madrid en contra de los indultos. A pesar de que inicialmente la dirección del PP descartaba movilizaciones para no dar alas a Vox, el jefe de la oposición española ha defendido este martes que salir a la calle es "estar con la España real" que está "indignada" y, si esto les hace compartir un espacio con otras formaciones, "bienvenido sea". De hecho, ha rechazado las críticas del gobierno español a la reedición de la llamada "foto de Colón" de febrero de 2019 -cuando Casado, Abascal y Albert Rivera entonces como líder de Ciudadanos se unieron en contra del gobierno de Sánchez y los apoyos del independentismo-, y las ha calificado de "globos sonda" y "propaganda" de la Moncloa. "A mí lo que me daría vergüenza es hacerme una foto con Bildu", ha dicho.

Ahora bien, Casado ha evitado mencionar a Vox, y ha enfatizado que la manifestación convocada el 13 de junio por la plataforma Unión 78 estará liderada por cuatro personas que han sufrido la violencia de ETA, dos las cuales, María San Gil y Carlos Urquijo, forman parte del PP. "Habrá que preguntarse si acaso hay otra fuerza política que se suma a lo que el PP ha hecho siempre", ha añadido Casado.

Recogida de firmas

Pero más allá de la manifestación en Colón, el PP planea responder a los indultos también con una recogida masiva de firmas, como hizo Rajoy contra el Estatut en 2006, para poner las bases para revertir "la agenda absurda" del ejecutivo español. Según el diagnóstico que hace ahora Casado, fue el Pacte del Tinell y el Estatut promovido por José Luis Rodríguez Zapatero los que iniciaron la "hegemonía independentista", y no la reacción del PP. "Y fue el recurso de inconstitucionalidad promovido por el PP con el apoyo de los españoles lo que permitió evitar que los referéndums unilaterales fueran legales y que el máximo órgano jurisdiccional fuera un Tribunal Superior de Justicia escogido por el Parlament", ha señalado Casado haciendo su propia interpretación del Procés.

Casado cree que la Moncloa está llevando a cabo una "manipulación grotesca" de los hechos, "corrompiendo la figura del indulto" a cambio de "minimizar la gravedad" del 1-O. "Es el paso previo para borrar el delito", ha advertido. Pero a pesar del duro y largo discurso, el líder del PP no ha dado detalles todavía de cómo será el recurso que plantean presentar en la sala tercera del Supremo para anular los indultos, y tampoco ha querido entrar en detalles de si tienen capacidad para hacerlo, puesto que no fueron acusación popular en el juicio al Procés, como sí es el caso de Vox. En caso de que el Supremo no acepte su recurso, se deshincharía buena parte de la estrategia del PP.

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