Los 'comuns' y Podemos reproducirán la fórmula electoral de En Comú Podem en las municipales
Quieren evitar la competición que les perjudicó en los comicios del 2019
BarcelonaCatalunya En Comú y Podem Catalunya han dado un nuevo paso hacia una confluencia, objetivo a futuro de las dos formaciones pero que se ha ido posponiendo por las tensiones internas. Este lunes por la mañana los portavoces de las dos formaciones, Joan Mena (comuns) y Lucas Ferro (Podem), han anunciado que se presentarán juntos a las elecciones municipales en toda Catalunya bajo las siglas de En Comú Podem, la misma fórmula que ya utilizaron para presentarse juntos al Parlament de Catalunya. "La idea fundamental es evitar la competición electoral entre dos fuerzas que son hermanas", ha recalcado Mena. Con todo, en algunas localidades se mantendrán las denominaciones que ya están arraigadas, como en el caso de Barcelona en Comú o Movem Tortosa, por ejemplo.
Después de las elecciones municipales del 2019, la principal lectura que hicieron los dos partidos es que presentarse por separado en algunos municipios como Sabadell, Terrassa o Sant Cugat del Vallès les perjudicó en las urnas. Desde entonces, las dos formaciones buscaban la manera de presentarse juntas a pesar de las tensiones internas. El mes de septiembre pasado los dos partidos acordaron un pacto de no agresión –adelantado por el ARA– en las municipales, pero lo que se anuncia este lunes es un paso más, puesto que implica presentarse como un mismo partido. El portavoz del partido lila, Lucas Ferro, ha recalcado que hay una "voluntad de permanencia" detrás de esta apuesta: "Queremos extender a través de En Comú Podem la fórmula que existe en Barcelona". Por lo tanto, y a pesar de que de momento las estructuras internas de los partidos se mantienen por separado, desde las dos formaciones no esconden que la voluntad es profundizar en la idea de la confluencia.
El anuncio es en clave catalana, e independiente por ahora de los planes de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de sacar adelante una plataforma unitaria en las próximas generales, un proyecto que le está costando más de lo previsto desencallar: ya ha pospuesto en varias ocasiones el proceso de escucha que tenía que iniciar –paso previo a construir la plataforma–, y el preacuerdo al cual llegó con Podemos, Izquierda Unida, Más País y tres formaciones de izquierdas más para presentarse a las elecciones andaluzas del 19 de junio ha acabado con tensiones y el partido lila fuera de la coalición.
En los últimos meses había habido inquietud interna tanto en Podem Catalunya como en los comuns porque la lentitud con la que avanza el proyecto de Díaz mantenía la preparación de las candidaturas para las municipales en espera. Finalmente, los dos partidos han metido la directa sin esperar a que se concrete el proyecto de la vicepresidenta. Mena ha recalcado que se ha llegado a este acuerdo "en clave catalana", a pesar de que "es evidente" que tienen "alianzas estratégicas con fuerzas hermanas al conjunto del Estado". El portavoz se ha mostrado confiado de que viajen a Catalunya para defender estas candidaturas tanto Díaz como "mucha gente que forma parte del espacio de Unidas Podemos" y otras "fuerzas estratégicas del conjunto del Estado".
Colau buscará un tercer mandato
El anuncio llega después de que las bases de Barcelona En Comú validaran el sábado el mecanismo para que Ada Colau pueda optar a la alcaldía de Barcelona en un tercer mandato, cosa que requería cambiar el código ético de la formación. Justamente, este mismo fin de semana La Vanguardia publicó que uno de los espionajes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) se había centrado en conocer las negociaciones para formar gobierno en el Ayuntamiento de Barcelona después de la victoria del republicano Ernest Maragall. Mena ha valorado la noticia insistiendo en la "necesidad de que el Congreso arroje luz sobre esta situación oscura" a través de una comisión de investigación. Con todo, la noticia ha tensionado las relaciones entre los republicanos y Colau, que exigió una rectificación a Maragall por haberla vinculado al espionaje del CNI. Maragall ha negado esta mañana en RAC1 haber dicho que Colau "tuviera nada que ver" con la cuestión: "Ni lo he dicho ni lo pienso".