Corinna demanda al rey emérito ante la justicia británica por "vigilancia ilegal"
Hace efectiva su amenaza y reclama una orden de alejamiento contra Juan Carlos I y los agentes del CNI que presuntamente la asediaron
MadridCuando faltan pocos días para que se cumpla un año de la fuga de Juan Carlos I de España, aumentan los frentes judiciales contra el rey emérito. No porque la fiscalía española haya avanzado en su investigación sobre las comisiones del AVE a la Meca –que presumiblemente cerrará–, sino porque la ex amante del rey Corinna Larsen ha hecho efectiva la amenaza lanzada ya a principios del año pasado de demandar por la vía civil Juan Carlos I ante la justicia británica por "vigilancia ilegal".
En concreto, la denuncia se hizo efectiva este lunes ante el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales, según ha informado el Financial Times, que afirma que ya se registró en diciembre de 2020 pero que no se aceptó hasta ayer, 26 de julio. La demanda es contra el rey emérito y los agentes secretos españoles, a quienes Corinna Larsen acusa de espiarla desde 2012 y asediarla "hasta hoy", además de recibir amenazas y coacciones a través de un "seguimiento abierto y encubierto" de agentes del CNI. Por eso reclama una orden de alejamiento contra el rey emérito y todos los agentes del Centro Nacional de Inteligencia, además de una compensación por daños y perjuicios por los daños causados a su "consultora estratégica" después de que Juan Carlos I le acusara de haberle robado dinero. No cuantifica los daños pero podrían representar decenas de millones de euros.
La pregunta clave es por qué se acepta ahora la demanda, si es por los retrasos de la justicia o tienen que ver las dos nuevos cuentas suizas vinculadas a Juan Carlos I que ha revelado en los últimos días El Confidencial. El otro interrogante es si el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales puede llegar a juzgar un ex jefe de estado de otro país. De momento Juan Carlos I ha negado siempre los hechos, pero su defensa todavía no ha respondido a la demanda y después habrá que ver si la justicia británica tiene jurisdicción para el caso.
Cruce de acusaciones
La causa, sin embargo, supone un nuevo frente para la monarquía española después de que Felipe VI haya intentado desvincularse de su padre con la retirada de la asignación real y le haya parado los pies a la hora de volver a España desde Abu Dhabi, donde se ha instalado. Larsen insiste que se la acusó falsamente de haber robado 65 millones de euros del donativo de 100 millones que recibió Juan Carlos I del rey saudí por el AVE a la Meca. Lo aclara también en la demanda interpuesta y a la cual ha tenido acceso el diario británico, donde asegura que fue una donación del rey emérito, que después le pidió que le volviera el dinero "o lo pusiera a su disposición para su uso". Señala que, como se negó a hacerlo, el emérito la difamó a ella y a su familia en el mundo de los negocios asegurando que le había robado.