Puigdemont, ¿intocable para la CUP?
Los cuperos evitan el cuerpo a cuerpo con el expresidente, a diferencia de ERC y Al mismo tiempo
BarcelonaEl 30 de enero del 2018 Carles Puigdemont debía ser investido como habían acordado las tres grandes fuerzas independentistas el día anterior, pero ERC se echó atrás, pocas horas antes del pleno, previendo que no sería una investidura efectiva. Mientras miles de manifestantes independentistas esperaban decepcionados fuera del Parlament, a la hora del inicio del pleno, sólo los cuatro diputados de la CUP se sentaban en sus escaños para evidenciar su rechazo a la decisión.
Dos meses más tarde, la CUP frustraría, en cambio, la investidura de Jordi Turull. "Si se trata de hacer frente al Estado en todos los terrenos, Puigdemont es el candidato, más aún por la destitución ilegítima con el 155", expuso durante el pleno el diputado Carles Riera, que justificó el veto en Turull por su discurso "autonomista". Seis años después, la CUP puede volver a tener la clave para investir a Puigdemont y, de momento, la tregua se mantiene.
Ni en precampaña ni en campaña los cuperos le han atacado, aunque sea con alguna alusión indirecta. Este sábado en el acto central en Girona, donde el expresidente fue alcalde del 2011 al 2016, sólo el exdiputado Albert Botran se ha referido a ello para sentenciar que Puigdemont y Salvador Illa "no tienen diferencias con el Hard Rock" y que "eso no es defender la tierra". Es la primera acometida directa al expresidente. Los otros seis ponentes no le han criticado.
Una actitud que contrasta con la de las demás fuerzas independentistas. Esquerra ha decidido entrar en el cuerpo a cuerpo con el expresidente de la Generalitat y Al mismo tiempo, la formación liderada por la exconsejera Clara Ponsatí, tampoco se ha mordido la lengua y ha acusado incluso a Puigdemont de hacer chantaje a la población con su regreso. ¿Es intocable Puigdemont para la CUP?
En conversación con el ARA, fuentes de la formación confirman que no quieren entrar en reproches personales con las víctimas de la represión. "No entramos en sí volverá o no, pero con la ley de amnistía entendemos que lo hará, y lo que nosotros queremos es que vuelvan todos los exiliados. Nunca hemos utilizado la represión como un arma arrojadiza porque tenemos muy arraigada la cultura antirrepresiva" , defienden desde el partido. Sea como fuere, avisan de que el escenario actual no es el mismo que el del 2017, como dejó claro Laia Estrada en la entrevista con el ARA. "Estamos encantados de que vuelva, pero vuelve como candidato de Junts, no es un escenario de restitución y ahora solo nos interesa saber si sus parámetros son los de Junts", señalan estas mismas fuentes.
Diferenciación entre Puigdemont y Junts
De hecho, en precampaña y ahora en campaña, la candidata de la CUP, Laia Estrada, se ha limitado a pedir al cabeza de lista de Junts que haga una "enmienda clarísima" a las políticas de Junts. "Hoy en día es la Convergencia de toda la vida ondeando una estelada. Si escuchamos a Puigdemont es algo y si vemos qué ha hecho Junts, es la contraria. Que se aclaren", dijo en una entrevista en SER Catalunya antes del inicio de la campaña.
Cinco días después del inicio de la campaña, la candidata cupero se expresaba en la misma línea: "¿Debemos escuchar a Carles Puigdemont o escuchar lo que ha hecho hasta ahora Junts per Catalunya?", se preguntaba la candidata. "Si escuchamos a Carles Puigdemont parece que será más fácil que nos entendamos", dijo después de que el expresidente afirmara que no quiere "una Catalunya Hard Rock".
En este sentido, desde el partido quieren saber cuál es la propuesta política de Puigdemont: "Le estamos presionando, le estamos pidiendo si comparte la política de Junts, que es la misma de la derecha". Su posible investidura dependerá, pues, del programa que desee imprimir en la próxima legislatura. "No es una cuestión personalista, no estamos en el marco del 2017", insisten desde la formación anticapitalista.
Con todo, el recuerdo que dejó el expresidente aún pesa: "La investidura de Puigdemont nos llevó el 1-O, mientras que la de Aragonès sólo la decepción de un giro a la izquierda que no se produjo". Los votantes de la CUP tampoco tienen ninguna duda si deben escoger entre Puigdemont o Aragonès como futuro presidente, como quedó de manifiesto en la reciente encuesta del ARA. Un 52% de sus votantes se decantan por Puigdemont como candidato predilecto alternativo al suyo, muy por delante de Aragonès, que sólo tiene el apoyo de un 10%.