La legislatura catalana

ERC, JxCat y el PSC ultiman un acuerdo para desbloquear los órganos caducados

Se habían comprometido a hacerlo antes de acabar el año

Pleno del Parlamento  de este domingo

BarcelonaA menudo desde Catalunya se ha criticado a los organismos pendientes de renovación en Madrid –hasta hace poco estaban caducados el Tribunal Constitucional y el Tribunal de Cuentas, y todavía se tiene que renovar el Consejo General del Poder Judicial–, pero lo cierto es que las instituciones catalanas sufren el mismo bloqueo. Desde hace al menos una legislatura decenas de cargos están caducados o pendientes de llenar, una situación que después del 14-F el PSC, Esquerra y Junts –los tres primeros partidos en las elecciones– se comprometieron a desbloquear antes de acabar el año. Y cuando faltan diez días para acabar el 2022, ¿en qué punto está? No han llegado a un acuerdo con suficiente tiempo para llevarlo al pleno del Parlament y cumplir la promesa, pero fuentes parlamentarias creen que sí podrían anunciar un pacto esta semana y concretar los trámites parlamentarios para hacerlo efectivo en el mes de enero. Este miércoles hay prevista una reunión, discreta –como han sido todos los trabajos–, para decidir si se cierra de forma definitiva el pacto para renovar hasta siete organismos: el Consejo del Audiovisual de Catalunya (CAC); la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), el Síndic de Greuges, la Sindicatura de Cuentas, el Consejo de Garantías Estatutarias; la Autoridad Catalana de Protección de Datos y la Comisión de Garantía del Derecho de Acceso a la Información Pública (GAIP).

La portavoz parlamentaria del PSC, Alícia Romero, ha admitido este martes en rueda de prensa que no llegarían a tiempo para llevar la renovación de ninguno de estos órganos al pleno extraordinario para aprobar los presupuestos de este jueves en el Parlament, pero sí ha considerado que había tiempo esta semana para cerrar un pacto entre las tres formaciones políticas. El encuentro de este miércoles es, pues, determinante, y los puntos más calientes son el Síndic de Greuges y la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales, de la cual dependen la radio y la televisión públicas.

El caso del Síndic es delicado porque se trata de un cargo unipersonal que tiene que reunir el consenso, como mínimo, de los tres partidos. Es diferente de los otros órganos, con más cargos por repartir, en los que cada formación escoge a sus respectivos candidatos con el compromiso de no vetar a los del resto. La ley requiere que sea escogido por una mayoría reforzada, de tres quintas partes de la cámara (81 diputados); por lo tanto, con el apoyo del PSC, Esquerra y Junts bastaría. “No se ha hablado de nombres”, insisten fuentes de los tres partidos, a pesar de que sí de principios: se prefiere una mujer, proveniente del ámbito social y que no haya pasado por la política ni tenga vínculos con ningún partido.

En el segundo caso, el de la CCMA, el problema es la pugna por quién ocupa la presidencia. Hay siete miembros en el consejo, y el reparto apalabrado es el siguiente: dos miembros para ERC, dos para Junts y tres para el PSC. Los republicanos reclaman la presidencia de la Corporación, pero los socialistas remarcan que se tiene que contar con ellos. Si no encuentran el consenso no habrá fumata blanca: según la ley, la presidencia del consejo de gobierno de la Corporación tiene que ser escogida por el Parlament, a propuesta como mínimo de tres grupos parlamentarios, y con una mayoría de dos tercios (90 diputados).

Sistema de elección

El consenso que se prevé para la elección de estos organismos es amplio y hace años que los acuerdos escasean en el Parlament, cosa que eterniza el bloqueo actual. En los años más álgidos del Procés los partidos independentistas y Ciudadanos, entonces el primer partido de la cámara, no llegaron a ningún acuerdo. Y es que lo más importante es que haya pacto político. A pesar de que la ley prevé diferentes procedimientos para escoger a estos candidatos, lo que importa es si hay entendimiento en el reparto. Es decir, en el reparto de las sillas.

La prueba de esto es la propia CCMA. La ley prevé que el Consejo del Audiovisual de Catalunya —órgano que también se tiene que renovar— haga un informe sobre la idoneidad de los candidatos a formar parte del gobierno la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales, pero en realidad los partidos están negociando a la vez la composición de los dos organismos. Pasa lo mismo con el Síndic: la norma dice que, a partir del momento que el puesto queda vacante, se abre un periodo de un mes para que se presenten candidaturas y la comisión del Síndic de Greuges del Parlament haga un dictamen valorando a los aspirantes. Lo cierto, sin embargo, es que las formaciones políticas intentarán encontrar un nombre de consenso antes de poner en marcha este procedimiento.

Reducción de los mandatos

Otra opción que hay encima de la mesa y que tienen que acabar de pactar Esquerra, Junts y el PSC este miércoles es la reducción de los años de mandato que prevén algunos de estos organismos. El cambio afectaría especialmente al Síndic de Greuges y el Consejo de Garantías Estatutarias, que pasarían de un mandato de nueve años a uno de alrededor de seis o cinco años, como el resto de entes -ahora a seis.

Los partidos han llegado más lejos de lo que habían llegado en los últimos años, y esta semana será decisiva para ver si finalmente sacan adelante los cambios.

stats