Los gobiernos autonómicos declaran la guerra a la condonación de la deuda de Cataluña
Pese a las críticas, especialmente del PP, no descartan beneficiarse de la misma medida
MadridEn el debate sobre la amnistía que forzó al PP hace dos semanas en el Senado, quedó claro que a algunos presidentes autonómicos populares casi les inquietaba más la rama económica de la negociación del PSOE con el independentismo que la amnistía. Varios varones del PP amenazaron con acudir a los tribunales para impedir "agravios y discriminaciones" en sus comunidades autónomas si se concretaba una condonación de la deuda en Catalunya o había "favoritismos" en el sistema de financiación autonómica. Aunque el acuerdo rubricado entre los socialistas y ERC –que implica el perdón del 20% de la deuda de la Generalitat con el FLA– recoge que podrá hacerse extensible a otras autonomías, el resto de comunidades ya han advertido de que abrirán una batalla con el Estado para evitar un trato de favor.
Los presidentes autonómicos del PP realizaron una batería de tuits en X críticas con el pacto nada más publicarse. "Iremos a los tribunales para defender a Castilla y León y la igualdad de todos los españoles", volvió a amenazar a Alfonso Fernández Mañueco. También el presidente andaluz, Juanma Moreno, reclamó que las comunidades con menos deuda, y "no necesitan que se les perdone", no se vean perjudicadas. El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, mantiene contactos a lo largo de este viernes con los varones y otros cargos del partido por "coordinar las acciones que sean pertinentes para garantizar la igualdad".
Mientras que Cataluña, según los últimos datos del Banco de España, tenía en junio del 2023 una deuda con el Estado, a través del fondo de liquidez autonómico (FLA), de 73.110 millones de euros, la de Andalucía es de 25.409 millones. Si se aplicara, por tanto, el mismo porcentaje de condonación, la cifra resultante sería inferior a los 15.000 millones que se perdonarán en Catalunya. Sin embargo, fuentes del ministerio de Hacienda remarcan que no se aplicarán las mismas condiciones a todas las autonomías acogidas al FLA sino que se buscará una "fórmula objetiva, pública y transparente" –que se desarrollará por ley– para cifrar "el' impacto negativo del ciclo económico" en cada comunidad.
¿Esta fórmula perjudicará al resto en relación con Catalunya? Las mismas fuentes de Hacienda insisten en que lo pactado para Catalunya puede beneficiar al resto de autonomías y niegan que perjudique a las que tienen menos deuda con el FLA. Una vía que apunta Hacienda es la posibilidad de que el Estado realice transferencias para que puedan amortizar deudas adquiridas con terceros. Podría ser el caso de Madrid, que tiene 37.658 millones de deuda, ninguno de ellos con el FLA.
Innovando para beneficiar sus intereses, el presidente andaluz exige que se aplique un criterio de población para transferir recursos desde el Estado : si en Catalunya le corresponden 15.000, en Andalucía –dice– deberían llegar 17.800 millones. El ministerio de Hacienda descarta la idea y lo que valorará es cómo perjudicó a cada comunidad la crisis del 2008. De hecho, el FLA, creado en el 2012, sirvió precisamente para permitir que las autonomías pudieran acceder a fondos de financiación, ya que la deuda desatada provocó que se les cerraran las puertas de los mercados. Las mismas fuentes recuerdan que incluso cuando reciben recursos, desde el PP critican agravios comparativos.
La infrafinanciación crónica
Lo cierto es que la compensación de ese impacto negativo puede hacer que algunas autonomías, como Catalunya, salgan mejor paradas en la foto final de cantidades condonadas. El independentismo, de hecho, reclamaba la condonación por compensar la infrafinanciación crónica de Cataluña, que explica el exceso de deuda de la Generalitat. Ahora bien, este planteamiento también puede beneficiar a otras autonomías gobernadas por el PP y perjudicadas por la infrafinanciación, como la Comunidad Valenciana. Habrá que ver si su presidente, el popular Carlos Mazón, rechaza esa posibilidad cuando se le ponga sobre la mesa, cuando tiene la segunda deuda con la FLA más elevada por detrás de Catalunya: 48.344 millones. De momento, Mazón se sumó a la batería de mensajes críticos en X y dijo que no era una opción "seria", pero también argumentó que si hay condonación, su comunidad debería ser "la primera" en beneficiarse de se.
La número dos del PP, Cuca Gamarra, ha evitado en varias intervenciones este viernes rechazar taxativamente la posibilidad de una condonación de deuda a otras autonomías. Lo que ha reclamado es que este tipo de pactos se cierren en foros multilaterales como el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y ha denunciado que el objetivo del PSOE no es mejorar la financiación autonómica del conjunto de comunidades sino asegurarse los siete votos de los republicanos.
Sin embargo, pese al intento de Génova de transmitir una imagen de oposición en bloque a la medida, en debates sobre la financiación autonómica las diferencias entre autonomías históricamente han ido más allá de las siglas. De hecho, el presidente de Asturias, el socialista Adrián Barbón, también reaccionó al acuerdo alcanzado por su partido con ERC reclamando "igualdad de trato". Los intereses contrapuestos entre partidos, pero sobre todo entre territorios, explican que el modelo de financiación esté caducado desde el 2014 y que desde entonces ni el PP ni el PSOE se hayan atrevido a empezar el melón para establecer uno nuevo.