La ejecutiva de Junts se encargará de gestionar la expulsión de Casol

BarcelonaEl grupo de Junts en el Parlament se ha reunido este martes después de que la semana pasada la permanente del partido acordara pedir la dimisión o expulsar a la diputada afín a Laura Borràs Cristina Casol, después del archivo de la denuncia contra acoso en el cuarto. Al ser el primer encuentro tras la decisión de la cúpula del partido, la dirección del grupo capitaneada por Albert Batet ha hecho una cronología de los hechos –en presencia de la propia Casol–, pero no ha tomado ninguna decisión: será la ejecutiva de la formación quien asuma su gestión, según explican las fuentes consultadas por el ARA. ¿Cuándo? No hay un calendario previsto, aunque la primera reunión de la ejecutiva en pleno es el próximo lunes. Casol, de hecho, también forma parte.

Esta mañana desde la dirección del grupo se ha pedido mantener un perfil bajo para evitar ruido, ya que la tensión de las últimas semanas ha llevado al grupo parlamentario a una situación límite. Por este motivo, nadie ha tomado la palabra para pedir a la diputada afín a Borràs que se pliegue. Y Casol tampoco ha levantado la voz para hablar. Lo que sí hay –como hubo en el caso de la diputada Aurora Madaula– es una carta de una veintena de diputados dirigida a la dirección del partido en la que reclaman que se actúe contra Casol después de que se haya archivado la denuncia. El portavoz de Junts, Josep Rius, en una entrevista en el Café de las Ideas, ha negado que haya "machismo" en las filas de Junts: "Hay debate político".

Un antes y un después

Hay que tener en cuenta que el acta de diputado es personal; por tanto, desde Junts no pueden forzar a Casol a dimitir si ella no lo quiere. Lo único que pueden hacer es apartarla del grupo parlamentario. De hecho, sólo pueden expulsarla de forma inmediata en el ámbito del Parlamento, ya que la expulsión del partido está recogida como una falta grave en los estatutos tras una vulneración del Código Ético o los Estatutos, lo que se trataría en el comité de garantías de la formación después de un procedimiento. Ahora bien, ¿le interesa a la dirección del grupo parlamentario abrir esa carpeta? ¿O perder un voto a partir de ahora en la cámara catalana? Algunas voces aseguran que no.

Casol no es la única que interpuso una denuncia por acoso: también Aurora Madaula, cuyo caso está en el limbo. En el caso de Madaula, denunció públicamente "machismo" al grupo desde el atril del hemiciclo, en el pleno de las mujeres del 26 de noviembre, y la mayoría de sus compañeros la consideraron una acusación falsa. A raíz de ello, la presidenta del Parlament, Anna Erra, le pidió que dejara la mesa (ahora es secretaria segunda), pero Madaula se negó y ahora está de baja. ¿En su caso, Junts también se plantea la expulsión? Fuentes del partido consideran que antes debe haber una resolución de su caso, en manos del comité de garantías del partido. Si Junts acabara expulsando a Casol y Madaula, habría dos diputadas afines a Borràs en el grupo mixto a un año de las elecciones catalanas.