Iceta confirma que el catalán forma parte de la mesa de diálogo

Defiende que la Moncloa tiene "obligaciones" en la promoción de la lengua y asegura que los gobiernos están abordando la sentencia del 25%

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La mesa de diálogo reunir a la Generalitat

BarcelonaAún sin una nueva fecha para la tercera reunión de la mesa de diálogo, que se está retrasando más de lo que querría la Generalitat, el ministro de Cultura, Miquel Iceta, ha dado este viernes alguna pista sobre qué tipo de frutos podría dar el próximo encuentro. En una entrevista en TV3 ha confirmado que el catalán forma parte de los acuerdos que se trabajan en el marco de la negociación política entre gobiernos, tal como avanzó hace unos días Nació Digital.

"Desde el gobierno de Catalunya se plantea, con razón, que el Gobierno de España también tiene obligaciones respecto a la promoción de la lengua catalana", ha afirmado. Y una versión parecida ha dado posteriormente en La 2 y Ràdio 4 el portavoz de los comunes, Joan Mena, asegurando que la lengua es uno de los temas "prioritarios" para una "solución política" y el "reconocimiento nacional" de Catalunya. "Es evidente que tenemos que hacer algún tipo de acuerdo para evitar que la lengua forme parte de esta guerra política y sea un arma arrojadiza", ha dicho.

Ni Mena ni Iceta han entrado en detalles sobre el tipo de pacto que se podría acabar cerrando, pero el también presidente del PSC ha asegurado que los ejecutivos catalán y español están "hablando mucho" sobre la sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya que obliga a un 25% de castellano en la escuela, sobre su "cumplimento" y "cómo hacerlo", ha puntualizado. Y, a pesar de que deja claro que las resoluciones judiciales se tienen que cumplir, la realidad es que la Moncloa ha renunciado por ahora a pedir la ejecución forzosa de la sentencia.

El ministro, en este sentido, ha calificado de "magnífico" el acuerdo de ERC, JxCat, el PSC y los comunes para intentar esquivar los porcentajes de castellano a través de una reforma de la ley de política lingüística, la cual se ha retardado por las dudas de Junts. En su opinión, la decisión sobre cuántas horas de catalán y castellano se dan en las aulas tiene que corresponder a cada centro –tal como define el pacto de los cuatro partidos– y no a los jueces. "¿Y esto es malo? ¿Es bueno que alguien en un despacho nos diga qué se tiene que hacer tanto en Picamoixons como en Cornellà? ¿De verdad?", ha preguntado, para acabar haciendo un llamamiento a sacar "hierro ideológico" a los proyectos lingüísticos de las escuelas.

Mena se ha sumado a la defensa de la modificación de la ley de política lingüística porque –ha dicho– quiere "blindar" la inmersión. Ha recalcado en este sentido que es "importantísimo" que los de Carles Puigdemont no se desmarquen del pacto y ha añadido que hay que trabajar para que la CUP se incorpore al acuerdo. Mena ha instado a los anticapitalistas a hacer "una reflexión": "Cuanta más fuerza tengamos en la defensa del modelo de inmersión lingüística y de escuela pública, más difícil será que pueda haber injerencias para debilitarlo", ha concluido.

No hay bloqueo en la negociación: "Progresa adecuadamente"

A la espera de ver cómo vincula esta reforma con la negociación abierta con la Moncloa, y más allá de los contactos discretos entre gobiernos, a estas alturas no está previsto en el calendario ningún nuevo encuentro público de la mesa de diálogo. "No hay fecha. Es una evidencia que no estamos en los plazos acordados", lamentaba este martes la portavoz del Govern, Patrícia Plaja. Iceta ha negado que la mesa esté "bloqueada" y mantiene que se reunirá cuando haya un acuerdo "suficientemente sólido". Aun así, ha insistido en que "la relación entre gobiernos progresa adecuadamente" a varios niveles.

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