Manuel Valls: "Voté a Salvador Illa"
El concejal asegura en una entrevista a 'La Vanguardia' que, a pesar del paso de Parera al PP, él "nunca" ha votado "conservador"
El fichaje de su mano derecha en el Ayuntamiento de Barcelona, Eva Parera, por el PP –junto con otros cargos de Barcelona pel Canvi– no tuvo ninguna influencia en la papeleta que el 14 de febrero escogió Manuel Valls. El concejal ha asegurado en una entrevista publicada este martes por La Vanguardia que optó por el PSC, que finalmente fue primera fuerza con 33 escaños.
"Después de pensarlo mucho voté a Salvador Illa, a pesar de las ambigüedades durante el Procés del PSC, a pesar del alto precio que pagamos por su coalición de gobierno con Unidas Podemos", ha asegurado Valls, que en Barcelona votó a favor de la investidura de Ada Colau para evitar que gobernara ERC. Para el ex primer ministro francés, que asegura que a pesar del paso de Parera al PP él "nunca ha votado conservador", el discurso del PSC era "la única alternativa al independentismo".
Valls propone un "gobierno de concentración" en Catalunya, porque considera que "el independentismo está incapacitado para gobernar" y la supuesta "mayoría de izquierdas es un espejismo": "ERC no es un partido de izquierdas porque el nacionalismo es incompatible con la izquierda, y la CUP es un partido antisistema". El concejal considera, además, que "un tripartito liderato por el PSC de momento no es posible". Por lo tanto, defiende la aparición de un "Mario Draghi catalán" para replicar la formación del ejecutivo en Italia, "con un calendario de máximo dos años y un pacto de gobierno o fuera del gobierno de todos los partidos, excluidos Vox y la CUP". Valls propone, por lo tanto, un gobierno técnico, porque "las elecciones no han cambiado los bloques". "Necesitamos unidad", ha insistido, recalcando que aunque el independentismo se haya impuesto en las urnas "no habrá independencia".
A raíz de los rumores recurrentes sobre el hecho de que pueda dejar el consistorio y retomar la carrera política en Francia, Valls afirma en la entrevista que, a pesar de que se siente "muy francés", no se plantea hoy por hoy irse de Barcelona: "Tenemos que ayudar a esta ciudad a recuperarse". El concejal también se ha posicionado en contra de la defensa de Pablo Hasél: "Me ha indignado ver cómo se defiende a un rapero que alaba el terrorismo, el yihadismo, que amenaza, que agredió a un periodista, y la idea que tenemos de que cambiar la ley para que este tipo de persona no vaya a la prisión". También se ha referido a la "persona que el otro día hacía un discurso antisemita" en un acto falangista, y que se hizo viral en redes: "En Francia la condenan, no son opiniones, es un delito de odio, y una parte de la izquierda, por buenismo, cae en esta trampa".