La opción de quedarse en el Govern gana peso en el territorio

BarcelonaLa votación de Junts sobre la continuidad en el Govern ha empezado este miércoles por la noche después de 48 horas intensas de campaña entre los partidarios del sí y del no. Los dos sectores del partido –el más activista y el más institucional– se han dedicado en las últimas horas a llamar, enviar mensajes y pisar el territorio para tomarle el pulso. ¿Cuál será el resultado? Es una incógnita, pero en las asambleas comarcales que se han hecho en las últimas horas gana peso la opción de quedarse en el ejecutivo. Esto no significa que se esté decantando a la militancia hacia aquí, sino que entre los afiliados que participan en estos encuentros hay varias voces que apuestan abiertamente por mantener la coalición con Esquerra. 

A estas reuniones –que se están haciendo por toda Catalunya– están asistiendo primeras espadas del Govern, diputados y altos dirigentes del partido de las dos sensibilidades, aprovechando que la mayoría ya estaban convocadas para escoger a los nuevos consejeros nacionales. Entre otros, han asistido a este tipo de encuentros el conseller de Economía, Jaume Giró, con una defensa firme de quedarse en el ejecutivo –tal como explicitó el martes en el debate en el pleno del Parlament–, y también el diputado Jaume Alonso-Cuevillas, que defiende salir del Govern. De hecho, este último, cercano a la presidenta del partido, Laura Borràs, ha levantado polvareda por una intervención en un acto con militantes donde utilizaba como argumento para marcharse del ejecutivo el hecho de que venga una crisis económica "de caballo" y que habrá recortes. 

Barcelona, con el sí 

Por otro lado, también se están pronunciando concejales y alcaldes de diferentes territorios a favor de quedarse en el Govern. El más significativo es Barcelona. Los concejales de la ciudad, encabezados por Neus Munté, han firmado un manifiesto en el que apuestan por el sí con el objetivo de "encarar las municipales y ganar". Un pronunciamiento que va en la misma línea del que ha defendido el exalcalde Xavier Trias, que cree que sería un "error" romper la coalición con Esquerra. Los primeros en dar el pistoletazo de salida en este sentido, sin embargo, fueron los alcaldes y concejales del Maresme, haciendo público un manifiesto en el que decían que "no querían ser cómplices de la ruptura del independentismo catalán".

Los han seguido cargos locales del Camp de Tarragona y los de las Terres de l'Ebre, que firman una declaración explícita: "El Govern de Catalunya es mejor, mucho mejor, con la participación de Junts que sin ella. Y tener referentes afecta directamente a la capacidad de interlocución, el establecimiento de sinergias y la posibilidad de obtener resultados positivos para nuestros municipios".

¿Quiere decir esto que ganará el sí a quedarse en el Govern en la consulta? No se sabe. Los partidarios del no recuerdan un dato: son más de 6.000 afiliados que están llamados a votar y no todos mantienen una vida activa en las estructuras del partido. Por lo tanto, creen que si hay una participación alta, su opción –que es la de la presidenta del partido, Laura Borràs, y el ex president Carles Puigdemont– puede dar sorpresas que ahora mismo no se estarían detectando en los debates territoriales. El viernes se sabrá.