El presidente del Supremo suspende una reunión con Bolaños por las críticas de Junts a los jueces
Varios socios del PSOE, pero también el PP, han denunciado la existencia de 'lawfare' judicial
MadridNueva crisis entre la justicia y el gobierno español. El presidente del Tribunal Supremo, Francisco Marín Castán, canceló esta mañana una reunión que tenía agendada con el ministro de Justicia, Félix Bolaños. La versión oficial son "motivos sobrevenidos", pero fuentes del alto tribunal apuntan a que ha tenido que ver el "contexto" de críticas a jueces que se han hecho en las últimas horas. Las más destacadas son las que pronunció este martes la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, que acusó de "indecentes" magistrados como Manuel Marchena, Carlos Lesmes o Concepción Espejel, aunque también hubo acusaciones de lawfare desde Podemos tras el archivo del caso Neurona, y también del PP ante José Ricardo de Prada, el juez que redactó la sentencia de la Gürtel y señaló la responsabilidad de la formación que entonces dirigía Mariano Rajoy.
Desde el entorno de Bolaños puntualizan que este martes el ministro hizo una defensa cerrada de los jueces en respuesta a varias preguntas durante la sesión de control en el Senado. "Los jueces actúan con independencia", respondió al portavoz de Junts en la cámara alta, Josep Lluís Cleries, cuando le recriminó la actuación de los tribunales en causas como el Tsunami Democrático. También el PP le pidió que aclarara si creía que había jueces que habían practicado el lawfare en sentencias vinculadas al Proceso, y fue tajante: "La respuesta es no".
Más tarde, en los pasillos del Congreso, Bolaños subrayaba que cree firmemente con las palabras que pronunció, y este miércoles se ha reafirmado. "Defenderé a los jueces siempre para que hagan su trabajo con independencia. Los defenderé de los ataques y descalificaciones de los independentistas, pero también de la larguísima mano que tiene el PP, que intenta influir siempre en el poder judicial. Mi tarea es que puedan actuar con independencia, sin injerencias y con medios suficientes. A esto me dedicaré", ha afirmado en declaraciones a los medios.
"Indecentes"
En la sesión de este martes en la Cámara Baja, la presidenta Francina Armengol se negó a retirar del diario de sesiones las descalificaciones de Nogueras, a petición del PP. Este miércoles, Cayetana Álvarez de Toledo se refirió a ella como "presunta presidenta" y varios portavoces de la derecha recriminaron al gobierno español que tolere las expresiones de sus aliados de investidura. A estas alturas a ambos lados se reconoce la existencia del lawfare, a pesar de haberse puesto el grito en el cielo con el concepto que Junts logró incluir en el pacto con el PSOE para votar favorablemente en la candidatura de Sánchez.
Este martes el juez Juan José Escalonilla archivó, después de tres años de investigación, una causa sobre una supuesta apropiación indebida de fondos y de un delito electoral contra Podemos por un contrato con una consultora mexicana del año 2019. Se trata de un caso que iba desinflando ante la falta de indicios de irregularitos pero que se ha mantenido abierto durante muchos meses. El partido lila denuncia que estuvo viva sólo por el afán de perseguir a esa formación y "desprestigiarla". El ministro de Transportes, Óscar Puente, se abonaba a través de X: "No creo en las brujas, pero haberlas, hay".
El PP también denuncia 'lawfare'
Pero el PP también cree que ha habido lawfare, aunque no ha provocado la indignación del estamento judicial. En la sesión de control en el Senado de este martes, el expresidente de Extremadura José Antonio Monago aseguró que "el mayor" caso de episodio de guerra sucia judicial ha sido el que, a su juicio, protagonizó el magistrado José Ricardo de Prada con el "párrafo" de la sentencia de la Gürtel de la Audiencia Nacional que incriminó al PP. Un fragmento que, posteriormente, enmendó el Tribunal Supremo.