El PSC suma a Barcelona pel Canvi al acuerdo de los presupuestos
El pleno aprueba las cuentas de 2022 con la abstención pactada de ERC y el apoyo del grupo de Parera
BarcelonaEl resultado estaba pactado desde hace semanas: el pleno de este viernes rubricaría los presupuestos de Barcelona de 2022, que se elevan a una cifra récord de 3.406 millones de euros. Y no ha habido sorpresas, en esto. Pero quedaban por definir incógnitas, como qué discurso mantendría el grupo de ERC, que se vio obligado a abstenerse en la votación para desbloquear el acuerdo de los presupuestos de la Generalitat y que todavía estaba en condiciones de dinamitar otra votación importante: la de las nuevas tasas. Y esto no ha pasado. Y todavía otra incógnita: saber si el gobierno municipal podría sumar a algún grupo al acuerdo de presupuestos.
Y aquí han valido los esfuerzos del PSC, que ha negociado hasta el último momento el apoyo a las cuentas de Barcelona pel Canvi, el grupo que capitaneaba Manuel Valls y que ahora, con Eva Parera al frente, se presenta como Valents para dar el salto a otros municipios. Han votado a favor sus dos concejales y la concejala no adscrita, Marilén Barceló, que en la práctica forma parte de la misma formación. Y esto ha convertido en irrelevante la abstención forzada de ERC.
El grupo de Parera ya ha anunciado momentos antes del pleno que votaría a favor de los presupuestos, sobre todo, por dos motivos: el primero, celebrar que con esto restaba protagonismo a ERC en la gobernabilidad –emulando, a escala muy menor, la jugada que sirvió para investir a Colau de alcaldesa–; y el segundo, apuntarse a elogiar adelantos en materia de seguridad, como la dotación para hacer crecer el número de agentes de la Guardia Urbana –hasta 3.500, en 2023– o el objetivo de tener una comisaría nocturna por distrito.
Parera ha defendido que solo ellos y el PSC han mantenido la actitud "responsable" de seguir negociando a pesar de tener la garantía de que los presupuestos se aprobarían. "A ERC y a los comuns les tengo que decir que Barcelona vale mucho más que un intercambio de cromos en la Generalitat", ha dicho, y ha cargado también contra el veto del resto de grupos de la oposición a la propuesta: "La política del no no aporta nada". Unas palabras que ha celebrado el PSC y que el concejal de Presupuesto, Jordi Martí (BComú), se ha encargado de reafirmar asegurando que el presupuesto que se aprueba "tiene mucho más de ERC que de Barcelona pel Canvi ".
El grupo de Parera, de hecho, ya evitó que la propuesta de presupuestos del gobierno cayera en saco roto cuando ERC votó en contra de su tramitación en comisión, como les ha agradecido hoy el socialista Jaume Collboni, que ha apuntado que esto permitió la "rectificación sobre la marcha" de ERC. Entonces los comuns aceleraron la presión para conseguir el apoyo de los republicanos –y evitar repetir la foto de la investidura– y la jugada acabó fructificando a través del pacto presupuestario coordinado en la Generalitat y el Ayuntamiento. Pero el jefe de filas de los republicanos, Ernest Maragall, dejó claro que estos no serían los presupuestos de ERC y que no entrarían a negociar ninguna de las partidas.
"El pacto estaba escrito"
"El pacto está escrito y vigente desde hace meses", ha asegurado hoy Maragall en su intervención en referencia al entendimiento con el grupo de Parera. El republicano ha considerado que es una "buena noticia" que Barcelona y Catalunya tengan unos presupuestos aprobados, que es lo que ha defendido el concejal de los comuns Jordi Martí en su intervención, pero ha añadido que lo que no es tan buena noticia es que sea "cualquier" presupuesto: "Gastar mucho no quiere decir ser de izquierdas".
La semana pasada el gobierno compareció en rueda de prensa para explicar a qué destinaría las partidas que había dejado sin definir para permitir la negociación con los grupos de la oposición. No había ningún pacto cerrado pero se habían atendido reivindicaciones de los diferentes partidos, y especialmente de ERC, según enfatizaron los comuns. Por ejemplo, se desencalló la reforma de la Rambla y se va garantizando la rehabilitación del invernadero de la Ciutadella. Esperaban con esto poder sumar algún apoyo más a la propuesta. Y el PSC se ha encargado de que Barcelona pel Canvi esté en el acuerdo.
El resto de grupos de la oposición han mantenido su no a la propuesta. Desde JxCat, Elsa Artadi ha reprochado que las cuentas incluyan "obsesiones dogmáticas" de los comuns, como la gran superisla, y que mantengan "el titular y la foto" como gran preocupación. También ha considerado que no se aprueban con "un cheque en blanco" de ERC y sí con el apoyo de quien ya permitió la investidura de Colau.
Cs ha asegurado que el gobierno no ha tenido voluntad real de negociar nada con ellos y que no se les han aceptado propuestas de inversión como el cubrimiento de la ronda de Dalt. "Lo que es expansivo no son los presupuestos sino sus prioridades ideológicas", ha defendido la líder del grupo, Luz Guilarte, a quien Collboni ha acusado de "autoaislarse" y de ser el único grupo que no ha cerrado ningún acuerdo con el gobierno. El PP también ha criticado la "nula voluntad" de negociar del gobierno, que ha dicho que prácticamente no ha aceptado ninguna de sus alegaciones.
Consolidación de las terrazas y 'no' a las habitaciones turísticas
El último pleno del año también ha aprobado las ordenanzas fiscales de 2022, que han incluido en el último momento la bonificación del 75% en la tasa de terrazas. Un punto que pedían todos los grupos menos ERC, pero que no ha impedido que los republicanos repitieran la abstención y permitieran que se aprueben. Barcelona pel Canvi también se ha abstenido y el resto de formaciones han votado en contra. El pleno también ha aprobado de forma definitiva los cambios necesarios en la ordenanza para poder consolidar las terrazas ganadas en pandemia. Se ha tramitado con los votos del gobierno y Barcelona pel Canvi, el rechazo frontal de ERC y la abstención del resto de formaciones.
El Ayuntamiento también ha dado luz verde a la modificación del Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT), que incluye nuevas restricciones a los apartamentos turísticos y prohíbe el alquiler de habitaciones por periodos inferiores al mes con muy pocas excepciones. Este último punto divide a socialistas y comuns y el compromiso pactado es dar forma a una nueva ordenanza que lo regule, que según el PSC se intentará tener terminada ya este mandato y modificará el texto aprobado hoy.