Sánchez acelera el relevo de Susana Díaz al frente del PSOE andaluz después del fracaso en Madrid

MadridDespués del fracaso en las elecciones de Madrid, Pedro Sánchez abre otro melón que tiene pendiente desde hace dos años: el relevo de Susana Díaz –contra su voluntad– al frente del PSOE andaluz (PSOE-A). En un momento en el que las elecciones se suceden de manera frenética en el panorama español y casi ninguna legislatura dura cuatro años, el presidente español y secretario general del PSOE teme que el PP, crecido por los buenos resultados de Isabel Díaz Ayuso, convoque pronto elecciones anticipadas en Andalucía. No en vano la presidenta madrileña recomendó al resto de barones seguir su modelo en sus territorios. Por eso Ferraz ha decidido forzar la máquina y enmendar el calendario que tenía preparado Díaz para prepararse para las próximas elecciones, previstas para el año que viene, el 2022. Si bien los cálculos de la expresidenta andaluza y presidenta durante un tiempo de la gestora socialista que desbancó a Sánchez pasaban por convocar un congreso en otoño y entonces celebrar primarias, la dirección del PSOE la ha forzado a convocarlas ya este mismo junio.

Díaz ha anunciado con resignación, en una declaración llena de críticas, la decisión de avanzar las primarias, pocas horas antes de que lo impusiera la ejecutiva federal del partido. "Me presentaré y espero que el proceso sea limpio y sin empujones", ha señalado en rueda de prensa, en la que ha censurado que se haya enterado de la decisión de Sánchez de forzar ya la celebración de primarias a través de un medio de comunicación. De hecho, ha detallado que mandó un mensaje el miércoles por la mañana al secretario general del PSOE y presidente del gobierno español y no obtuvo respuesta, y que por la tarde le llamó el secretario de organización y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, pero que en ningún caso le habló de la convocatoria de primarias en Andalucía.

Pero todo el plan de Ferraz ya está en marcha. Minutos después de que Díaz anunciara que se volverá a presentar a la reelección como secretaria general del PSOE-A, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha confirmado que también lo hará. Era el favorito de la dirección estatal socialista y, de hecho, ha hecho el anuncio después de reunirse con la ministra portavoz y de Hacienda, María Jesús Montero, una de las opciones que habían sonado en las quinielas como posible candidata en las elecciones andaluzas. Espadas se ha ofrecido para liderar un proyecto "revulsivo" para el PSOE-A y ha pedido no enfrentarse entre compañeros durante el proceso de primarias, sino hacer "un debate de ideas y de propuestas".

Díaz ha criticado justamente que con el adelanto de las primarias lo que se busca es anteponer las caras a las ideas, y ha lamentado que durante demasiado tiempo se haya hecho "ruido" internamente entorpeciendo la tarea parlamentaria de los socialistas andaluces. De hecho, ha recordado que la última palabra la tienen que tener los afiliados. La expresidenta andaluza se encuentra ahora en una situación del todo inversa a la del 2017, cuando la gestora que desbancó a Sánchez convocó unas primarias que la líder andaluza confiaba en ganar porque tenía a toda la vieja guardia haciéndole campaña. Entonces el actual presidente español salió adelante gracias al apoyo de la militancia. Ahora es lo único que le queda, en parte, a Díaz, que ha asegurado que sus aspiraciones ahora mismo solo pasan por Andalucía pero que ha aprovechado la ocasión para pedir a Madrid que haga "autocrítica" por los malos resultados en las elecciones del martes.