Gobernabilidad en el Estado

Sánchez se plantea reformar el CGPJ sin el PP: ¿cómo podría hacerse?

El presidente español se abre a "soluciones" alternativas si Feijóo mantiene el bloqueo y Podemos ya registra una iniciativa

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El presidente interino del CGPJ, Vicente Guilarte, en un pleno del órgano de gobierno de los jueces

MadridLa decisión de Pedro Sánchez de quedarse en Moncloa iniciará una serie de reformas que no ha anunciado pero que los socios de investidura ya le han planteado. Sumar, Podemos y las formaciones soberanistas defienden una reforma legal para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sin el PP y que deje de haber una mayoría conservadora en el órgano de gobierno de los jueces. En una entrevista en TVE este lunes por la noche, el presidente español se abría a "explorar" soluciones si Alberto Núñez Feijóo mantiene el bloqueo. Este martes, en la SER, ha añadido: "La responsabilidad del gobierno es renovar el poder judicial, y lo llevaremos a cabo".

¿De qué forma? Sánchez no lo concreta y, de hecho, quiere agotar aún el margen para llegar a un acuerdo con el PP. En cambio, desde la sala de prensa de la Moncloa, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha denunciado que Feijóo tiene una "vocación absoluta de destrozar a las instituciones del país y ha apostado por rebajar las mayorías para renovar el CGPJ .Podemos ya ha registrado una iniciativa en el Congreso para esquivar al PP.

El artículo 122 de la Constitución establece que el órgano de gobierno de los jueces está formado por 20 vocales, 12 de ellos escogidos entre jueces y magistrados y 8 entre abogados y juristas. Sobre estos últimos, la carta magna establece que 4 se escogen en el Congreso y 4 en el Senado, con una mayoría de tres quintas partes. Por tanto, esto es inamovible y requiere que PSOE y PP se pongan de acuerdo para nombrarlos. Por el contrario, la elección de los 12 vocales jueces está regulada por la ley orgánica del poder judicial, que también establece que 6 se eligen en el Congreso y 6 en el Senado, también por una mayoría de tres quintas partes.

Así, las posibilidades de cambio están en esta normativa. Tal y como ya plantearon el PSOE y Unidas Podemos –pero después lo retiraron–, se podría rebajar la mayoría de tres quintas partes a mayoría absoluta, a fin de que los partidos del gobierno español y los socios de investidura sean suficientes para nombrar a los 6 vocales jueces en el Congreso. Ahora bien, si esto también aplicara en el Senado el PP podría nombrar él solo a los 6 vocales que dependen de la cámara alta, dado que la formación conservadora tiene mayoría absoluta. Si se quisiera dar la vuelta a la mayoría conservadora del CGPJ, haría falta un movimiento más.

Esta segunda modificación exigiría retirar al Senado esta potestad de nombrar 6 vocales y trasladarla al Congreso, de modo que la cámara baja elija los 12 vocales de procedencia judicial. Así, la mayoría plurinacional podría escoger un total de 12 de los 20 vocales, mientras que para los otros 8 -4 en la cámara baja y 4 en la cámara alta- sería necesario un acuerdo con el PP. Este doble cambio es el que Podemos ha propuesto en la iniciativa que ha registrado este martes en el Congreso.

Además, la formación lila también propone que este cambio de vocales pueda ser efectivo aunque la renovación no sea completa. Es decir, si el Congreso consiguiera nombrar a los 12 vocales jueces, el CGPJ funcionaría con estos nuevos miembros junto a los 8 antiguos que aún no habrían sido sustituidos. Por tanto, que no se pudieran escoger los nuevos 20 vocales no impediría que se relevaran los 12 que sí. Más allá del método de elección, Podemos también plantea establecer por ley qué atribuciones podrá desarrollar un CGPJ que agote su mandato y se encuentre en funciones.

La propuesta de Guilarte

Este planteamiento se suma a otros que ya se han puesto sobre la mesa, como el del propio presidente interino del CGPJ, Vicente Guilarte, que hace unos días envió formalmente al Congreso y al Senado sus ideas. En su caso, reclama que la renovación pendiente se haga con el sistema actual, pero que se trabaje en un sistema para dejar a los partidos políticos al margen de la elección, o al menos retirarles la influencia. No se mojaba sobre si los 12 vocales de procedencia judicial deberían seguir escogiéndose en el Congreso y en el Senado o bien en unas elecciones entre la carrera judicial, pero sí defendía que se pudiera asegurar una proporcionalidad entre jueces asociados y no asociados, así cómo prohibir candidatos que hayan ocupado cargos públicos en el pasado.

Habrá que ver si las modificaciones en el ámbito de la justicia se circunscriben en la renovación o si hay otras a fin de combatir el lawfare que Sánchez ha denunciado que ha sufrido en primera persona. El presidente español se ha declarado víctima de la guerra judicial porque su entorno familiar fue objeto de "espionaje" por parte de la política del gobierno de Mariano Rajoy en 2014, según apuntan los audios del excomisario José Manuel Villarejo. En este sentido, ha hecho autocrítica por no haber sido consciente de la gravedad de estas prácticas antes, hasta que no le han afectado a él directamente.

Sánchez quiere seguir más allá de la legislatura

Pedro Sánchez no sólo no ha dimitido, sino que se plantea ir más allá de esta legislatura. "Durante estos cinco días he reflexionado y he asumido el compromiso de liderar, que no monopolizar, un debate que es muy necesario en nuestro país, que es la regeneración democrática", ha dicho Sánchez en la SER. "Y eso no es una tarea que pueda realizar ni en tres días ni en tres meses ni en tres años, que es lo que nos queda de legislatura. Trasciende esta legislatura", ha añadido, para acabar afirmando que tiene "ánimos para estos tres años y para quienes quieran los españoles con su voto". En la Moncloa hablan incluso de una "gran causa nacional".

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