Violencia sexual

El modelo Barnahus prevé cuadruplicar la detección de agresiones sexuales a menores

Barcelona inaugura el servicio integral a la espera de que se abran los de Manresa y El Prat para acabar el despliegue

ARA
3 min
Una sala de la Barnahus de Tarragona, donde se da una atención integral a los menores víctimas de la violencia sexual.

BarcelonaLa puesta en práctica del modelo Barnahus permitirá cuadriplicar la cifra de casos de abusos a menores detectados en los próximos años. De hecho, esto mismo pasó a Tarragona en el primer año de este servicio de atención integral a las criaturas que han sufrido agresiones sexuales. En una visita a las nuevas instalaciones que cubrirán la ciudad de Barcelona, ​​el consejero de Derechos Sociales, Carles Campuzano, ha apuntado este viernes que pueden aflorar unos 3.600 nuevos casos cada año. De momento, los trabajadores tienen sobre la mesa unas sesenta expedientes.

El servicio atenderá a los menores en dos edificios de la calle de la Marina, junto a la Monumental, en un espacio habilitado con diferentes estancias diseñadas para que se parezcan a un espacio casero y pensadas para la comodidad de los niños. Además, habrá otros despachos para los Mossos d'Esquadra y el equipo psicosocial y una sala para psicoterapia y evaluación médica. Con el de Barcelona ya son 10 Barnahus en toda Cataluña (Terrassa, Granollers, la Seu de Urgell, Lérida, Gerona, Tortosa, Vilanova y la Geltrú, Mataró y Manresa) y sólo falta poner en marcha los del Prat de Llobregat y Badalona por completar una de las medidas estrella del Gobierno durante esta legislatura.

El conseller ha destacado "el intenso esfuerzo" que el Govern ha llevado a cabo en el último año para poder extender el modelo Barnahus a toda Cataluña y se ha mostrado satisfecho con la "decisión colectiva de afrontar la problemática que suponen los abusos sexuales”. Campuzano aseguró que la puesta en marcha de todos estos servicios permitirá "hacer emerger" muchos más casos. En este sentido, subrayó que la puesta en marcha del plan piloto del servicio de Tarragona "hizo emerger" el triple de abusos a menores. Así, ha calculado que en los próximos años se lleguen a contabilizar 3.600 casos anuales. "Desde el punto de vista del sentido común estos datos pueden llegar a sorprender, pero debemos tener en cuenta que, en estos momentos, la cola de entrada de expedientes de ambos dispositivos de Barcelona es de 60", ha explicado.

El objetivo a largo plazo del modelo Barnahus es la de "minimizar" los abusos, una "realidad atroz", según las palabras de Campuzano, que todavía está escondida en entornos como la escuela y el ocio y sobre todo en el familiar, que es donde se concentran la mayoría de agresiones a criaturas. "No se estaba detectando de forma adecuada, ni se hacía el acompañamiento pertinente, ni se castigaba cuando era necesario a través del Código Penal", admitió el conseller, quien también señaló que el eventual aumento de denuncias puede tener consecuencias de orden penal. Por eso, se ha alineado con las peticiones que el departamento de Justicia ha hecho en reiteradas ocasiones de ampliar el número de recursos en este campo. "Tenemos un proceso de ralentización de la justicia", ha apuntado Campuzano, que ha pedido que el Consejo General del Poder Judicial y el ministerio de Justicia den respuesta.

Niega que se incremente la cifra de menores autores de agresiones

A la pregunta sobre si se ha detectado un aumento de la cifra de menores autores de agresiones sexuales, Campuzano ha asegurado que el informe que se encargó a un grupo de expertos tras los episodios de violaciones en el centro comercial Màgic de Badalona no constató esa tendencia. Sin embargo, ha reconocido que el hecho de que haya este tipo de conductas obliga a plantear ciertos debates, como el de la necesidad de proporcionar a los niños y jóvenes una educación integral o el de restringir el acceso a la pornografía. "No puede ser que el principal elemento de educación sexual de nuestros niños y niñas sea éste", ha lamentado. Así, ha exigido que las instituciones europeas "planten cara a las plataformas que se lucran de estas actividades".

Por otra parte, hasta el 31 de diciembre del 2023, la Barnahus de Tarragona atendió a 803 casos de menores víctimas de agresiones sexuales: dos terceras partes (664) fueron niñas, y 139, niños. La mayoría de los abusos (428) se dieron fuera del ámbito familiar, mientras que 375 ocurrieron en el seno de la familia. Un total de 460 casos acabaron judicializados, siendo la principal vía de entrada la denuncia de los cuerpos de seguridad (276), seguida de la intervención de los servicios sanitarios (195) y del ámbito educativo (130). El conseller Campuzano ha destacado que a raíz de la activación de este servicio también han aflorado otras situaciones en las que se han vulnerado los derechos de los menores y que no están relacionadas con violencias sexuales, según informa el ACN.

stats