Delitos de odio

La Audiencia anula la absolución a los líderes de Falange y Alianza Nacional que animaban a "matar" por España

La Fiscalía les pedía tres años de prisión por los discursos del 12-O en Barcelona en 2013

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El líder  de Falange, Manuel Andrino, en una imagen de archivo

BarcelonaLa Audiencia de Barcelona ha revocado la absolución de los líderes de Falange, Manuel Andrino, y Alianza Nacional, Pedro Pablo Peña, por sus discursos de odio en Barcelona el 12 de octubre de 2013. Ese día Andrino animó a "matar por España", mientras que Peña aseguró que no habría independencia si no era "a base de mucha sangre", pero la jueza los absolvió. Ahora el tribunal considera que su sentencia fue arbitraria y le ordena repetirla, teniendo en cuenta todas las pruebas contra los acusados, para los que la Fiscalía pedía tres años de prisión.

Peña y Andrino acumulan otros procesos por delitos de odio. El primero fue condenado a tres años y medio de prisión por tener armas sin permiso, mientras que el segundo había conseguido esquivar hasta ahora entrar en la prisión, pero el noviembre pasado la Audiencia de Madrid ordenó finalmente su ingreso entre rejas para cumplir condena por el asalto a la librería Blanquerna el 11 de septiembre de 2013. El Supremo impuso a Andrino y los otros 13 condenados cuatro años de prisión, pero finalmente el Tribunal Constitucional obligó al alto tribunal a revisar la sentencia a la baja y la condena se quedó en dos años de prisión.

Pocos días después del asalto a la Blanquerna, Andrino y Peña desembarcaban en Barcelona acompañados de centenares de ultras para subir hasta la montaña de Montjuïc, durante el acto que las formaciones de extrema derecha organizan cada 12-O en Barcelona. Ese año los discursos de los dos líderes ultras animaron a utilizar la violencia para frenar la independencia de Catalunya y defender la unidad de España.

"Hoy no tenemos ni capitanes ni tenientes como entonces [en referencia al alzamiento militar de 1936], pero tenemos la voluntad irrenunciable como españoles de defender la madre patria. No habrá secesión de Catalunya si no es a base de mucha sangre", dijo Peña. Por su parte, Andrino se mostró dispuesto a "dar hasta la última gota de sangre en defensa de la sagrada unidad de España": "Que no lo duden, estamos dispuestos a morir, pero también a matar por España, solo faltaría", dijo.

Prueba falsa

Como pruebas de sus proclamas incitando al odio, la Fiscalía presentó en el juicio varios vídeos grabados por los medios ese día. Pero uno de ellos -que es el que sirvió a los Ayuntamientos de Barcelona y de Sabadell para denunciar las proclamas- se refería a hechos anteriores. La jueza que juzgó a Andrino y Peña consideró que esta prueba era falsa y que invalidaba todo el resto.

Un criterio que no comparte el tribunal, que cree que la magistrada tendría que haber revisado el resto de pruebas a la hora de dictar sentencia porque no tenían nada que ver con la primera y se podía comprobar su autenticidad. Esto es también lo que argumentaba la Fiscalía de Delitos de Odio, que aseguraba que la sentencia causaba indefensión.

"No llegamos a entender el razonamiento de la jueza", dicen los magistrados de la Audiencia que han revisado el caso. Ahora la Audiencia ordena a la jueza revisar todo el resto de imágenes y redactar una nueva sentencia de acuerdo con estas pruebas.

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