420 heridos al año en accidentes de tráfico sólo en la calle Aragó de Barcelona
La vía más transitada de la capital catalana acumuló 2.522 heridos en siniestros entre 2018 y 2023
BarcelonaLunes, 6 de febrero de 2023. Son las 11.30 h de la mañana y en el cruce de las calles Aragó con Aribau una moto choca lateralmente contra otro vehículo. El conductor resulta herido leve. Seis horas más tarde, en la misma calle pero en el tramo entre paseo de Gràcia y Pau Claris, hay otro accidente. Un patinete eléctrico choca frontalmente contra un vehículo. Hay otro herido leve. El miércoles día 8 la cosa empeora. Se producen hasta cuatro accidentes con heridos leves en cuestión de 12 horas: uno en el cruce de Aragó con Padilla; otro en la esquina con paseo de Sant Joan, y otros dos en el tramo de Aragó entre el paseo de Gràcia y la rambla de Catalunya. En todos los casos existe una moto implicada. En las dos semanas siguientes, en la calle Aragó todavía se registrarán otros 13 accidentes con heridos, dos de ellos graves.
Los datos del Ayuntamiento de Barcelona analizados por el ARA demuestran que la recopilación del párrafo anterior no es una excepción. Entre 2018 y 2023, la calle Aragó ha acumulado 2.522 heridos en accidentes de tráfico, lo que supone una media de 420,33 heridos al año. Más de uno al día. Y eso que durante el 2020 hubo tres meses en los que prácticamente no se circuló a consecuencia de la pandemia. Del total de heridos entre 2018 y 2023, la inmensa mayoría (2.464) fueron leves, pero también hubo 53 heridos graves y 7 fallecidos.
La calle más transitada
Con casi 5,5 kilómetros de longitud, Aragó es la tercera calle más larga de Barcelona y la que soporta más tráfico. Según el Anuario Estadístico de la ciudad, en el 2022 circulaban una media de 62.101 vehículos al día, por delante de otras vías como la avenida Diagonal (55.794) o la Gran Via (51.802). Una cifra que, según el Ayuntamiento, se mantiene bastante estable y que es notablemente inferior a la del 2018, cuando cada día pasaban de media 84.516 conductores. Este descenso del tráfico ha ido acompañado también de una reducción de los heridos en siniestros. Así, si en 2018 se registraron 659 heridos, en 2023 se contabilizaron 341, por debajo de los 510 de 2019 y de los 397 de 2021, pero aún por encima de los 301 de 2020 (el año del confinamiento) y de los 316 de 2022. De los 6.857 accidentes con lesionados ocurridos en Barcelona en 2023, un 4,59% fueron en la calle Aragó.
En cuanto a la distribución, el tramo de Aragón que concentra más heridos en siniestros de tráfico es el comprendido entre las calles Pau Claris y Aribau, con casi un tercio de los accidentados (790). De hecho, en estos poco más de 800 metros existen cuatro cruces que encabezan el ranking de heridos en la vía. Sólo en el cruce de rambla de Catalunya y Aragó se contabilizaron 81 lesionados entre 2018 y 2023. Por delante de los 80 de Balmes, los 79 de paseo de Gràcia, los 76 de Pau Claris o los 67 de Padilla.
Curiosamente, en 2023 ninguno de estos cruces apareció entre las zonas de concentración de accidentes de la ciudad –puntos con 10 o más siniestros con lesionados en un año a una distancia de 15 metros–. Los representantes de la calle Aragó en esta clasificación fueron los cruces con Independencia –17 accidentes–; con Roger de Flor, Roger de Llúria y Muntaner –con 14 cada uno–, y con la avenida Meridiana, que acumuló 11 accidentes con heridos.
Aunque todavía hay trabajo por hacer, desde el Ayuntamiento se reivindica que se haya logrado reducir sustancialmente el número de accidentes con heridos en la calle Aragó entre 2018 y 2023. Fuentes municipales apuntan también que en la inmensa mayoría de los siniestros –causados a menudo por giros indebidos o por falta de atención conduciendo– pesa más el error humano que un factor estructural de la vía. Por ejemplo, indican que los atestados de la Guardia Urbana constatan que en todos los casos en los que hubo heridos graves hubo una infracción previa por parte del conductor responsable del siniestro. Sin embargo, también se han designado “puntos alfa” a lo largo de la calle –lugares donde se destinan agentes uniformados porque se han detectado problemas de tráfico, accidentes reiterados o infracciones frecuentadas– y se han instalado tres radares de velocidad y tres cámaras para las que se salta los semáforos para intentar reducir el número de infracciones.
Una parte de los vecinos de la calle Aragó, sin embargo, reclaman pasos más decididos para reducir el tráfico en la calle. Es el caso de Luca Telloli, vecino de Aragón y miembro de la plataforma Eixample Respira. En declaraciones al ARA, lamenta que el Ayuntamiento mantenga una fase semafórica que "alienta la velocidad" y "cruzar la ciudad sin parar", y echa de menos más radares pedagógicos y sancionadores. “La calle Aragó representa una autopista urbana que necesita ser transformada”, avisa, y cuestiona que los 12.000 vecinos que viven en esta calle y las numerosas escuelas que hayan de sufrir “el ruido y la contaminación” de los más de 60.000 vehículos que pasan a diario.
El impacto del carril bici
Entre las medidas que han ayudado a reducir el tráfico y, por tanto, la siniestralidad en la calle Aragó, el Ayuntamiento sitúa también la inauguración del carril bici en la calle Aragó justo antes de empezar el año 2021. La nueva infraestructura supuso perder un carril para los coches y la moto y ganarlo para ciclistas y conductores de otros tipos de vehículos de movilidad personal, como los patinetes eléctricos. Esto hizo que este tipo de vehículos, con una presencia testimonial hasta entonces en la calle Aragó, se multiplicara. Y también, por tanto, su implicación en siniestros con heridos.
Así, si entre 2018 y 2020 el total de heridos en accidentes en la calle Aragó con bicicletas o patinetes implicados era de 52, a partir del estreno del carril bici esta cifra se prácticamente multiplicó por cuatro: 192 heridos entre los años 2021 y 2023. En cuanto a los puntos más negros para las bicicletas, los datos permiten identificar a cuatro destacados. Se trata de los cruces de Aragón con Pau Claris y de Aragón con Villarroel, con 14 heridos cada una, y también de los cruces con Muntaner y Conde d'Urgell, que suman 8 heridos cada uno. En este último caso, cabe destacar que seis de estos heridos son anteriores a la inauguración del carril bici de la calle Aragó.
La moto, protagonista
Ahora bien, si hay un vehículo damnificado por los accidentes en la calle Aragó es sin lugar a dudas la moto. Un 64% de las víctimas en siniestros en esta vía viajaban en motocicleta, una cifra que aún se eleva más si añadimos a los que viajaban en ciclomotores. En concreto, hubo 1.613 motoristas heridos. De éstos, 1.571 resultaron heridos leves, 37 sufrieron lesiones graves y cinco fallecieron. Además, 274 personas que viajaban en ciclomotores también resultaron heridas en ese intervalo de tiempo, de las que cuatro fueron graves. En cuanto a los peatones, entre 2018 y 2023 ha habido 212 atropellos en la calle Aragó, cuatro de los cuales han supuesto lesiones graves al peatón. En dos casos la persona atropellada ha muerto.