Barcelona

Los antiguos pajareros de la Rambla se niegan a entregar las llaves al Ayuntamiento

El consistorio inicia la vía judicial para recuperar la posesión de los puestos

Pajareros de la Rambla poniendo una pancarta en contra del cierre de las paradas históricas

BarcelonaDesde este martes los antiguos pajareros de la Rambla de Barcelona podían ser expulsados ​​de sus puestos, que durante los últimos años han ido cambiando hasta convertirse en puestos de venta de otros muchos productos, sin rastro ya de los animales exóticos que llegaron a vender durante todo el siglo XX. Desde 1855 ocupaban un espacio en la mítica Rambla barcelonesa. Este jueves, el Ayuntamiento de Barcelona les ha pedido las claves para echarlos, los paradistas se han negado porque consideran que el procedimiento judicial todavía está abierto y el desahucio llegará durante las próximas semanas: es el último capítulo de un largo serial que viene de lejos y que, incluso, ha llegado al Parlamento y al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Esta mañana, entregando la notificación pertinente, el Ayuntamiento de Jaume Collboni ha iniciado el proceso para recuperar las paradas y ganar el espacio que ocupan, en un intento por esponjar una zona masificada por la gran cantidad de turistas que pasan por ella . Manel Mallo, director de los servicios jurídicos del consistorio barcelonés, ha explicado que el Ayuntamiento está avalado por "cinco juzgados y veinte resoluciones judiciales distintas" que sostienen que estas 11 paradas no pueden "vender estos productos", en referencia a los helados, turrones y suvenires que los paradistas empezaron a vender a partir del convenio que se firmó en 2009 con el distrito y el Instituto Municipal de Mercados de Barcelona (IMMB). Un convenio que posteriormente el propio ayuntamiento echó atrás al declararlo nulo. "No tienen ningún título por estar en estas paradas", ha sentenciado Mallo. De esta forma, la administración solicitará al juzgado la autorización para una recuperación "forzosa" de estas paradas ubicadas en la Rambla.

Hace justo un mes el consistorio envió una diligencia de ejecución que daba diez días a los paradistas para devolver las llaves de las tiendas al IMMB y, ante este ultimátum, los antiguos pajareros presentaron hasta tres medidas cautelarísimas que finalmente el martes se desestimaron. "No contábamos que vinieran hoy a pedirnos las llaves", ha explicado al ARA el portavoz de los antiguos pajareros y propietario de cinco de las once paradas, Xavier Cuenca, quien ha asegurado que todavía disponen de los 15 días hábiles en los que pueden presentar recursos ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC).

15 años de conflicto

Durante los últimos quince años, Ayuntamiento y paradistas han intentado buscar una salida a la situación, sin llegar a un acuerdo. Ahora, el consistorio ejecutará el desalojo sin contrapartida alguna. "No pedimos más que nos traten como a cualquier paradista. Somos paradistas del Mercado de la Boqueria aunque estemos fuera del mismo mercado. Pagamos como cualquier otro. Lo fácil sería la reubicación dentro del mismo mercado", explica uno de los afectados.

Los antiguos pajareros de la Rambla se establecieron en el paseo en 1855. Antes trabajaban dentro del Mercado de la Boqueria, pero un decreto de aquella época aprobó que los animales vivos debían disponer de un espacio propio alejado de los animales fallecidos por motivos de higiene y para evitar la transmisión de enfermedades.

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