Los comunes reclaman alargar el eje verde de Consell de Cent a cambio de los presupuestos

BarcelonaNuevo paquete de condiciones de Barcelona en Común a Jaume Collboni para pactar los presupuestos de Barcelona de 2025. Después de plantear la regulación municipal de los alquileres de temporada y el cierre de dos terminales de cruceros del Puerto, la portavoz y futura líder de los comunes en el Ayuntamiento, Janet Sanz, ha reclamado este miércoles expandir el programa de supermanzanas y ejes verdes en la ciudad. También poner en marcha medidas sociales como una funeraria pública, una medida que los comunes no lograron aprobar durante el primer mandato de Ada Colau.

En cuanto a los ejes verdes, Barcelona en Comú hará llegar a Collboni la petición de completar la pacificación de Consell de Cent para que atraviese el paseo de Sant Joan y llegue hasta la avenida Meridiana. Una prolongación que, piden, debería ir acompañada también de una pacificación de la calle Sicília del estilo de las que se han hecho en Rocafort, Comte Borrell y Girona. Esto crearía una nueva plaza en el cruce entre Consell de Cent y Sicilia.

Además, los comunes exigen al gobierno del PSC la pacificación de la calle de Sants y de la Creu Coberta entre la plaza Espanya y la rambla Brasil, y la de todo el paseo Maragall. En estos dos casos, la propuesta no es hacer ejes verdes como el de Consell de Cent, sino repetir el modelo de la calle Pi i Margall, desde donde Sanz ha hecho este miércoles la rueda de prensa. Esto supone convertir estas dos calles en vías de plataforma única, pero manteniendo un carril de tráfico por sentido (ahora hay dos). En definitiva, quieren sacar espacio en el coche y reducir la velocidad permitida para dar más espacio a los peatones ampliando las aceras.

Para reforzar la petición, Sanz ha esgrimido las dos decisiones judiciales favorables a la supermanzana que se han sabido esta semana. Por un lado, el archivo definitivo del Supremo de la causa penal impulsada por el exarquitecto jefe de la ciudad Josep Antoni Acebillo. Por otro, elaval por primera vez de un juzgado en la construcción del eje verde de Consell de Cent sin necesidad de modificar el Plan General Metropolitano (MPGM). "Teníamos el aval científico y el ciudadano, y ahora también el judicial", celebró Sanz.

La carpeta sobre los ejes verdes no será una de las más fáciles de negociar entre comunes y el PSC, porque los socialistas han marcado distancias siempre con la forma en que se hicieron las supermanzanas el pasado mandato. Este mismo martes, la teniente de alcalde de Urbanismo, Laia Bonet, reaccionaba a la sentencia favorable al tramo de eje verde de Consell de Cent y Girona haciendo un llamamiento a abrir "una reflexión" sobre la forma en que se habían hecho hasta ahora estas pacificaciones.

Ayudas para familias y jóvenes

Más allá de extender el modelo de las supermanzanas por la ciudad, los comunes también han puesto sobre la mesa este miércoles un paquete social. La portavoz adjunta, Gemma Tarafa, ha condicionado el apoyo a las cuentas de Collboni en la implantación de medidas como la creación de una óptica municipal y la implantación progresiva de la gratuidad de los comedores escolares. También ha recuperado la petición de impulsar una funeraria pública, uno de los proyectos estrella de Colau que la oposición derribó durante su primer mandato.

Tarafa ha subrayado que el PSC votó entonces contra la medida, pero que ahora hay ayuntamientos gobernados por los socialistas como Salou, Vila-seca, Reus y Constantí que han impulsado una funeraria pública. Por ello, confió en que ahora apoyen una iniciativa que, según los cálculos de los comunes, podría reducir en cerca de 1.300 euros el coste de un servicio funerario para un ciudadano de Barcelona, ​​que ahora está situado en torno a los 4.000 euros . Los comunes, que defienden que existen informes municipales que avalan la creación de una funeraria pública, plantean una doble vía para sacar adelante esta política: el uso de velatorios ya existentes en tanatorios o la creación de un tanatorio público en la parroquia del Patriarca Abraham, en Sant Martí, que es municipal.

En cuanto a la gratuidad del comedor, Tarafa ha propuesto que el próximo curso se bonifique el 100% en los centros de alta complejidad y un 50% en el resto. Una inversión que, ha dicho, debería hacerse de la mano de la Generalitat y que costaría cerca de 80 millones de euros por curso. De éstos, con respecto al ejercicio 2025, sólo deberían abonarse 26,6 millones. En el caso de la óptica pública, calculan que para alcanzar unas 50.000 personas vulnerables se necesitarían 2,5 millones de euros anuales.

Por último, los comunes también han pedido aprovechar la inversión extraordinaria anunciada por el gobierno español para fomentar servicios como el Bicing para hacerlo gratuito para los jóvenes de entre 16 y 20 años. Una medida que, según Sanz, costaría cerca de 5 millones de euros.