Cuenta atrás para salvar a la Casa Orsola: "La ciudad se está vendiendo"
El síndico de Greuges se ofrece de mediador horas antes del desahucio y la gente responde con un "maratón" de actos reivindicativos

BarcelonaPocas horas antes de conocer cuál será el futuro de la Casa Orsola, que vive bajo la amenaza del primer desalojo en la finca, el de Josep Torrent, un millar de personas –según datos de la Guardia Urbana– entre ellos vecinos, activistas y personalidades catalanas han salido a la calle para reivindicar el paro del desahucio del emblemático edificio modernista. Lo que antiguamente fue una fábrica de baldosas se ha convertido en un símbolo de la lucha contra la especulación en los barrios, y así ha quedado demostrado con el "maratón" cultural que se ha celebrado desde las 18 horas en la esquina entre la calle de Calàbria y Consell de Cent.
"Mañana me desahucian", ha lamentado Torrent, que antes de empezar los actos culturales planificados ha asegurado que su intención es quedarse "en casa tranquila y pacíficamente, pero con firmeza" y acompañado de sus vecinos. La hora de su desahucio está prevista a las 10:30 h. A su lado, el portavoz del sindicato de inquilinos, Enric Aragonès, ha hecho un llamamiento "a todos los vecinos y inquilinos de Catalunya" a participar en la acción cultural. "No estamos dispuestos a hacer ver que esto no está pasando y señalamos a los vecinos de este piso como modelo y referente", ha insistido, justo antes de que empezaran las actuaciones de Joan Colomo y La Ludwig Band.
Entre los asistentes ha habido vecinos del barrio preocupados por su futuro. "He recibido llamadas constantes de inmobiliarias que me ofrecen comprar mi piso", explica Maite, quien denuncia que "no se pueden pagar 1.000 euros por un piso porque la gente no gana tanto" y confía en que la movilización "hará que los políticos lo piensen". Con ella, otra vecina pide una "planificación del turismo" y critica que con la supermanzana "se han triplicado los precios" de los alquileres.
Entre los vecinos que han venido a defender la Casa Orsola también hay Eugenia, que es la última inquilina en un edificio que ha comprado entero una sociedad para rehabilitar los pisos y ofrecerlos por alquiler de temporada. Dice que hoy ha venido porque lo que está sucediendo "es simbólico" de la situación en Barcelona. "La ciudad se está vendiendo a especuladores", lamenta.
Para Torrent, la respuesta ciudadana por defender la Casa Orsola evidencia la voluntad de los barceloneses de "defender todas las casas" y ha hecho un agradecimiento público al finalizar el acto. "No lo esperaba, ha sido una sorpresa. El apoyo recibido, los mensajes de entidades, de gente anónima, de gente famosa, de los actores... Ha sido muy emotivo". Y también se ha dirigido a todos los vecinos que se encuentren en una situación similar: "Quien esté pasando por lo mismo, que no desfallezca y se quede en casa".
En 2021 la Casa Orsola pasó a manos del fondo de inversión Lioness Inversiones, que no quiere renovar los contratos de los actuales inquilinos porque pretende reformar los pisos y ponerlos como alquiler de temporada de lujo al triple de su precio actual, por lo que pasaría de los 700 y 900 euros que pagan actualmente los vecinos a los 2.100 o 2.800 euros mensuales. Algunos de los inmuebles ya han sido reformados y puestos en el mercado como alquiler esporádico a estos precios.
Gesto 'in extremis' del síndic y el Ayuntamiento
Este jueves, in extremis, el síndico de agravios de Barcelona, David Bondia, se ha ofrecido como mediador y ha pedido que se hagan "todos los esfuerzos posibles" para encontrar un espacio de diálogo y reflexión para llegar a una solución de consenso entre los vecinos y la propiedad. También ha instado al Ayuntamiento de Barcelona a proponer soluciones que, dentro de su marco competencial, preserven el derecho a la vivienda. Por su parte, el consistorio pidió a ambas partes, afectados y propietarios, que se comprometan con esta mediación y anunció que trabaja para construir un escenario que permita la suspensión del desahucio.
El Sindicato de Inquilinos y los vecinos de la Casa Orsola, sin embargo, han recordado que desde el primer día han exigido una negociación por todas las vías posibles y que siempre ha sido la propiedad la que se ha negado y ha " boicoteado" el proceso. De hecho, los residentes del edificio y el sindicato consideraron "sorprendente" que el consistorio se active a menos de 24 horas del desalojo. "Ha tenido años para sancionar a la propiedad", han lamentado en un comunicado conjunto. El descontento ha sido aún mayor porque el primer desahucio de este emblemático edificio coincide, esta semana, con el desalojo sorpresa de la Antiga Massana, y el Sindicato de Alquiladoras, que asesora a los vecinos ante las intenciones de la propiedad, ha sabido aprovechar las circunstancias.
Los actos reivindicativos de este jueves por la tarde han podido seguirse a través del canal de vídeo que el sindicato ha organizado. El plató ha sido uno de los pisos de Casa Orsola y, además de los actos callejeros, los impulsores realizan un programa audiovisual en directo que durará hasta este viernes, cuando está previsto el desahucio. De hecho, Aragonès ha llamado a reunirse ante la Casa Orsola para pasar la noche o bien desde primera hora del viernes para intentar impedir el desahucio de Torrent. "No nos jugamos sólo la casa de Josep, nos jugamos la casa de todos", clamó.
Un programa propio, actos políticos y conciertos
La retransmisión de los actos y del probable desalojo tienen como presentadores a Laura Grau, João Francia, Ana Polo y Alba Riera. También habrá tertulias periodísticas, que contarán con la presencia de David Fernández, entre otras, cápsulas informativas y diferentes entrevistas dirigidas por Mònica Terribas, Jordi Évole y Joel Díaz, el encargado de hablar con los afectados de esta comunidad.
Todo este contenido es retransmitido digitalmentey también en la calle, a través de una pantalla instalada en las puertas del edificio. De hecho, la supermanzana donde está ubicada Casa Orsola, en la esquina entre la calle de Calàbria y Consell de Cent, también se convertirá en un gran escenario de actos culturales y políticos.
El sindicato también ha preparado un debate con intervenciones de Marta Espriu, portavoz del II Congreso de Vivienda; la periodista y escritora Lucía Ramis; sindicalistas del sector educativo, y el propio Josep (el vecino amenazado por el desahucio, que también es profesor), así como actuaciones musicales en directo. Entre los artistas confirmados se encuentran Tarta Relena, Svetlana, Joan Colomo y La Ludwig Band.