"Han envenenado el lago": los vecinos claman contra un espectáculo navideño en Pedralbes
El gobierno municipal alega que no podía rescindir el contrato con los promotores del festival Natura Encesa
BarcelonaBarcelona revive este año una de las polémicas de la pasada Navidad. La reedición del espectáculo lumínico Natura Encendido en los jardines Torre Girona de Pedralbes ha encendido a los vecinos, que este lunes han puesto de manifiesto su malestar en un pleno extraordinario del Consejo de Distrito de Les Corts en el que han lamentado que no se haya encontrado un emplazamiento alternativo para este festival. Uno tras otro, los vecinos presentes en el pleno han hecho llegar al concejal del distrito, David Escudé, las quejas por el impacto que ya tuvo la edición de la pasada Navidad. "Han envenenado el agua del lago", han denunciado.
Durante el pleno específico, los vecinos han reprochado al gobierno municipal que a pesar de haberse mostrado partidario en debates anteriores de buscar un nuevo emplazamiento en el festival, finalmente vuelva a hacerse en los jardines de Torre Girona. "Es un incumplimiento flagrante del distrito", ha denunciado Ivan Condés, consejero de distrito de Junts, el grupo que ha forzado el pleno y que ha logrado aprobar una iniciativa que pide al consistorio presentar los informes hechos hasta ahora sobre el impacto del Natura Encendido.
Las quejas de los vecinos podrían agruparse en tres bloques: el exceso de ruido por la música que acompaña al espectáculo –han asegurado que el año pasado se rondaron los 80 decibelios algunas vísperas–; el impacto que la luz y el ruido tienen sobre la fauna y flora del parque, y las molestias para la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), que tiene en el parque el rectorado y la sede del Barcelona Supercomputing Center.
En este último caso, tal y como avanzó El Periódico, la misma universidad presentó alegaciones pidiendo al Ayuntamiento que "reconsidere la realización de la actividad", ya que el pasado año hubo "importantes y numerosas situaciones de incompatibilidad" entre la universidad y el festival. Entre las molestias relatadas se encuentra el exceso de ruido y la proyección de imágenes sobre fachadas del rectorado que hicieron imposible trabajar en algunos despachos más allá de las seis de la tarde.
El capítulo de los efectos sobre la fauna y la flora del parque ha sido más extenso. Los vecinos se han quejado del mal estado en el que quedó el jardín tras la edición del pasado año, pero también de las consecuencias que ha tenido sobre los animales que habitan el jardín. "Hace un año que no vemos ni una sola ardilla", ha denunciado Josep Garcia, quien ha explicado también que las máquinas de generar niebla artificial envenenaron el agua del lago. "Nunca había muerto más de un pájaro en este parque, y este año han muerto ocho", ha dicho.
Por parte del PSC, la consellera técnica del distrito Irene Morales se ha defendido de las críticas alegando que el Ayuntamiento no podía rescindir el contrato –de dos años– con Natura Encesa. "Solo podíamos hacerlo si había un delito flagrante", aseguró, y recordó que la Fiscalía medioambiental archivó la querella que los propios vecinos presentaron contra el evento.
Una larga polémica
De esta forma, a pesar de la polémica que siempre le acompaña el festival Natura Encesa volverá a celebrarse este año en los Jardines de Torre Girona. De hecho, las entradas –que cuestan entre 17,5 y 19,5 euros– ya se pueden adquirir en su página web, que anuncia el festival lumínico como "el evento más querido de la Navidad barcelonesa". El año pasado el espectáculo reunió a cerca de 150.000 visitantes.
Antes de celebrarse en los Jardines de Torre Girona, el espectáculo ya se había hecho (también entre quejas de los vecinos) en los Jardines de Pedralbes. Y antes, los vecinos de Nou Barris, ayudados también por las restricciones pandémicas, sí habían logrado frenar el intento de hacerlo en el Parc del Turó de la Peira.